HERÓNIMO
- Al fin te encuentro, come mierda...
Rodrigo está de pie y al lado de la barra, donde estoy prácticamente tirado de la borrachera.
- Rayo, me dejó... - Digo triste y haciendo seña al barman de mi hotel, por otra medida de Bourdon para mí y la linda señorita a mi lado tan ebria como yo.
Ríe, tomando asiento a mi lado.
- Quiero...estar solo... - Balbuceo, dando otro trago a mi whisky.
- Eres idiota, hermano. - Hace seña por una gaseosa para él. - El Hero normal y la Van normal se dicen cosas y pelean, pero están locos el uno por el otro.
Niego, intentando acomodarme sobre la barra y en mi asiento, al mismo tiempo intento llamar otra vez a mi nena con mi celular, pero las jodidas cosas se mueven y pierdo el equilibrio.
Sip.
Los muebles de este hotel, caminan.
Y Rodrigo entre risas me toma de un hombro, para no terminar con mi trasero en el piso.
Otra vez, el buzón de voz y quiero estrellar el teléfono contra la pared ante sus negativas y destrozarlo en mil pedazos.
Intento ponerme de pie para ir a buscarla a la jodida de mierda, arrinconarla contra una pared y demostrarle de veinte maneras diferentes que solo pienso en ella.
Rodo me detiene con un brazo y me sienta nuevamente.
- Cálmate, hombre ¿Dónde vas?
- A buscar a rayo de sol...
Ríe.
- ¿Manejando tú, en este estado?
- Me lleva Collins... - Gruño con otro trago de whisky.
- Echaste a Collins.
Cierto.
- Mierda... - Gruño y la rubia de mi lado suelta una risita.
- Déjala que se le pase la bronca...
Quiero llorar como un niño.
- Yo, la cagué...
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La pasión de Vangelis®
Lãng mạnVangelis Coppola. Empleada de una de mis empresas. Mi rayo de sol. Mi nena. Simple, graciosa y algo torpe. La mujer a la que le pido casamiento y la muy cabrona, me rechaza. Sí. Sí, lo sé...porque mis propuestas apestan. Bonita. Testaruda. ...