Demigods

Solangelo 3 -4

La noticia de la roptura de Solangelo no tardo en esparcirse en ambos campamentos.
Como se esparaba que pasara, la noticia fue castastrofica. Las hijas e hijos de Afrodita lloraron e hicieron berrinches, Reyna tuvo que ser atada y amordazada para evitar el asesinato del rubio, los hijos de Apolo intentaban animar a su hermano... ¿Y lo peor? Hades habia amenazado con maldecir el campamento.

Ante la amenaza de un dios tratando de lastimar su hogar (otra vez) el hijo de Poseidon, habia sido encomendado a la mision de solucionar el problema (otra vez). Por lo que Percy Jackson, quien estaba harto de que los dioses lo maldicieran (si Ares, te estan hablando) se encontraba en el bosque, buscando señales de vida del hijo de Hades: Nico di Angelo.

Percy se habia enfrentado a miles de mostruos incluso el Tartaro mismo, por lo que creia estar preparado para todo una vez encontrara al italiano. Chico/a, que equivocado estaba.

Cuando Jackson lo encontro cerca del puño de Zeus (lugar maldito despues de la batalla del Laberinto) se sorprendio ante el hecho de que no estaba solo. Tenia compañia.
El hijo de Hades amante de la soledad despues de haber perdido a su hermana, se encontraba acompañado no por cualquier campista, si no por nada mas ni nada menos que por el rubio de ojos azules que teabajaba en la enfermeria: Will Solace.

Decir compañia era algo suave ante la situacion en la que los encontro Percy.

Nico estaba sentado encima de Will, con sus bocas deborandose unas a otras en una batalla por el dominio del otro. Percy Jackson era conocido por ser alguien problematico (los problemas lo seguian), desvergonzado y sin filtro entre su cerebro y su boca; aun asi no pudo evitar sonrojarse ante la situacion.

Carraspeando separo a los chicos. El rubio sonrojado hasta las orejas y el pelinegro matando con la mirada al hijo de Poseidon.

-No sabia que Nico di Angelo, Rey de los fantasmas, se escondiera...