Clara siempre lleva consigo un cuaderno en el que ha reunido todo lo que le gustaría hacer antes de morir, pero para poder hacerlo necesita un pequeño empujón, y ese empujón se llama Oliver.
Oliver, un chico algo "peculiar".Con un pasado oscuro, pe...
PARTICIPATEINAN OPERA ANDTAKEMORE THAN ONE THOUSAND PICTURES.
Oliver estaba realmente impresionado, era un gran teatro y Clara debía tener mucha categoría para actuar allí.
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Ya en primera escena estaba ella, su voz era dulce pero potente, aunque eso él ya lo sabía.
Todo iba genial hasta que llegó una escena demasiado romántica con el torero que era interpretado por Gabriel.
-¿Esto está en el guión? - le preguntó al hombre canoso y vestido con un traje rojo a juego con la pajarita, que estaba sentado a su lado.
-Silencio. - le acalló luciendo su mal genio, aunque Oliver no esperaba otra cosa de alguien con monóculo.
Miró en el papel que repartían antes de entrar, estaba en el guión, «Carmen besa al torero mientras bailan».
Por muy estúpido que sonara incluso para él mismo, no parecía una actuación , no sabía por qué pero había cierto brillo en su mirada que los demás no tenían.
-¡Has venido!- Clara se lanzó a Oliver que la recibió con los brazos abiertos.
-No podía faltar. - ella se apretó contra su pecho y él pudo notar el dulce olor de su pelo.- Lo has hecho genial. - dijo orgulloso , mientras sus cuerpos se separaban dejando sus manos entrelazadas.
-Oliver... siento mucho lo de la otra noche.- ella soltó sus manos que estaban temblando por los nervios.
-Clara, no pasó nada.- dijo él poniendo una mano en su cuello. - Seguimos siendo amigos igual que antes.
-¿Éramos amigos?- dijo con una sonrisa chulesca.- No importa... el caso es que entré en un bar y aparecí en tu cama a la mañana siguiente.
-Si, tuve que ir a recogerte del bar y dormiste en mi casa.-le explicó él muy relajado.
-Dios, me siento súper tonta, llevo días pensé si llamarte o no... - se rio mientras echaba su pelo hacia atrás.- Y no te puedes ni imaginar lo mucho que flipé cuando mi teléfono decía que yo conocía a «el camarero buenorro».
