sesenta y dos.

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Querida Hermana:

¡No lo puedo creer!

Hermana, volviste. Hermana, estas de vuelta en casa. Hermana, me alegra mucho que estés bien, sana y salva.

Pero, ¿por qué no me has venido a visitarme? Las cosas ya se solucionaron, ya no deberían de haber excusas, o así no este Olivia ¿me vas a seguir evadiendo? 

Papá y mamá dicen que vendrás cuando me encuentre más estable.

¡Que parte no entienden de que en cualquier momento moriré, en cualquier momento me iré de aquí! Si conocieran el tiempo tan bien como yo, no hablarían de perderlo. Mi tiempo de espera vale mucho, no puedo desperdiciarlo. 

Por favor hermana, ven pronto.

Los días transcurren muy rápido y... no se que sera de mi.

Atentamente: tu hermana menor.

Querida Hermana.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora