10.

2.9K 339 43
                                    

No es capaz de poder conversar con alguien y sentir la mirada de Ruben. Le tiene pánico al entrar al baño solo o cuando se olvida algo en el salón siempre debe llevar a alguien consigo, así sea un alumno hasta el conserje. Tiene tanto miedo que si algún conocido de Ruben viene a hablarle, lo primero que piensa es que el ojiverde lo ha mandado a verificar si todo está en orden. Miguel se ha vuelto tan paranoico con todo, con cada pequeña cosa que observa a su alrededor, cada error que hace, cada grito de espanto que da.. Para él todo tiene que estar relacionado con Ruben.

Y Alex lo puede notar.

—¿Acaso no ves que le estás haciendo daño? ¡Él no es el Miguel que yo conozco!—Alejandro exclama furioso en el salón de Arte, en el cual Ruben estaba guardando sus cosas—Y si tanta posesión quieres tener con él, deberías conseguirte a alguien como Miguel, o yo que sé.—el ojiverde mira al pequeño por unos segundos, y sigue ordenando sus útiles—Lo estás destruyendo Ruben, ¡Entiende, por favor. Miguel ya no es nada tuyo!—el nombrado deja de ordenar.

—¿Alguna vez no te han enseñado a no compartir algo personal?—Alejandro asiente confundido—Bien allí lo tienes. No voy a compartir a Miguel, sé que no estamos juntos pero él sigo siendo algo mío.—toma su mochila, y avanza hasta la puerta.

—Sé que lo amas, Ruben. Pero esto es mucho, él en verdad quiere ser feliz con otra persona.. p-pero, tú..

—¿Con quién, Bravo?

Alejandro calla.

—Te lo vuelvo a repetir una vez más, ¿Miguel con quién quiere salir?—el pelinegro muerde su labio, y se golpea internamente por haber venido en primer lugar hasta el salón, y dos por haber abierto su bocota donde no debía.

—Miguel me ha pedido que lo tenga en secre..

—¡Secreto mis cojones!—el ojiverde toma del cuello de la camisa al pequeño, y lo alza con fuerza hasta su rostro—¿Quién es?, no me hagas golpearte—murmura a centímetros de su cara.

—Belly—contesta por fin Alex con un poco de miedo.

—¿Billy?

—Sí, un chico alto, pelirrojo con rulos..—mira hacia algún punto de salón. Si Ruben supiera que estaba mintiendo.

—No hay ningún pelirrojo, aquí—aprieta el agarre con fuerza.

—Sí lo hay, pero no está en esta escuela—prosigue al sentir la penetrante mirada del castaño—É-Él está de vacaciones en Venecia con su familia, y vuelve el próximo viernes.

—¿Han estado saliendo?

—Desde hace un mes.

—¡Maldición!—exclama frustrado y empuja al pelinegro con fuerza—¡Debí haber mandado a Max! ¡Nunca debí dejarlo de observar! ¡Maldita sea!—Ruben camina directo hacia la puerta y sale hacia los corredores.

—¿A dónde vas?—Alejandro trata de seguirle el paso, pero por ser alto sus zancadas son más largas.

—A buscar a Miguel.

—¡No!

Ruben frena.

—Yo.. uhm, será mejor que no se lo digas a Miguel—el ojiverde lo observa expectante—Ya sabes, es mejor que Billy esté en la ciudad y puedas darle una gran golpiza p-por meterse con lo que es tuyo, ¿no crees?—pregunta con una sonrisa tronchada.

—Tienes razón, Bravo.

Alejandro suspira aliviado.

Mentir es malo, y Alex iba a irse directo al infierno por eso. 





[Spam: He publicado una nueva novela; Metro Station]

Hickeys|| RubelangelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora