Tu Amor Derribó Mis Muros

Lágrimas sanadoras

Pasaron varias noches, en las que dormimos juntos en su recámara o en la mía, hablando por horas, compartiendo sueños, vivencias y recuerdos de misiones en común, era sorprendente lo que Steve podía recordar. Podía ver un mapa y memorizarlo con sólo un vistazo, y planear una estrategia y ganar la batalla.

Es un líder nato, siempre preocupado por su gente, siempre buscando lo mejor para todos los que están bajo sus órdenes.

Entonces una noche, cuando recordábamos lo que pasó con su amigo Bucky, el Soldado del Invierno, y como tuvimos que escondernos en casa de Sam, le confesé que ese día lo ví sin camisa y me encantó lo que vi. Se sonrojó y sonrió de lado, me dijo que no se dio cuenta y que no fue su intención que lo viera.

Le dije que ese día me empecé a dar cuenta de lo que sentía por él. Que había sido muy especial besarlo y verlo, y luego luchar junto a él.

Mr dijo: "Nat, me gustas mucho. Eres la mujer más hermosa que visto en esta época, nadie se compara contigo. Eres astuta, inteligente y eficiente en todo lo que haces. Me vuelves loco Natasha Romanoff, por lo que eres y por cómo eres conmigo. Te amo, y quiero demostrarte mi amor en todas las formas posibles. Es decir... Romanoff, quiero hacer el amor contigo..."

"Steve, ¿estás seguro? ¿Me consideras digna de ser la primera mujer en tu vida? Yo también quiero hacer el amor contigo, pero quiero que sea muy especial, porque es tu primera vez..."

"Nat, por el simple hecho de estar contigo, lo será. Ya verás. El sábado iremos a cenar, y después, haremos el amor de la manera más romántica que podamos imaginar. Quiero que sea inolvidable para tí también, porque será tu primera vez conmigo. Y por el profundo amor que nos tenemos. ¿Estás de acuerdo Nat?"

Woow, claro que estoy de acuerdo. ¿Quién no estaría de acuerdo en tener una cita romántica y después hacer el amor con el Capitán Rogers? No puedo creerlo, seremos por fin una pareja en toda la extensión de la palabra. No puedo esperar al sábado. Lo bueno que hoy es jueves.

Después de ponernos de acuerdo para entregar nuestros cuerpos el uno al otro, nos besamos por mucho tiempo como acostumbramos, pero esta vez algo es distinto. Esta vez sabemos que pronto daremos el siguiente paso. Que nuestra relación cambiará para siempre, que estaremos más unidos que nunca.

Dormir con él es un privilegio que trato de valorar, pues no sé cuánto tiempo pueda disfrutar de su cercanía y su olor, ese exquisito olor que me tiene alucinada, y que busco por instinto en las pocas noches que dormimos separados, y yo uso sus camisetas para sentirlo cerca de mí.

Lo amo. Es el amor de mi vida. Es la primera vez que un hombre me hace sentir el deseo de tener un hijo con él. El dolor vuelve a veces y se clava en mi pecho, y yo trato de sobreponerme, y lloro mientras me baño, o mientras entreno sola, o cuando salgo a la pista a correr... No quiero que Steve sepa que sufro por eso, me da vergüenza admitir delante de él, que nunca podré darle un hijo, aunque él ya lo sepa.

Voy corriendo con los audífonos a todo volumen, escuchando The Reason de Hoobastank,

y llorando abiertamente, tratando de sacar el dolor de mi alma, cuando siento que alguien me toca en el hombro y dejo de correr para ver de quién se trata.
Es Sam Wilson. Me ha visto llorando y está preocupado por mí.

"Nat, sé que eres una persona muy reservada y que no comentas tus cosas con nadie. También sé que eres la novia de mi mejor amigo, y que se aman de verdad. Eso me hace muy feliz. Pero Nat, te he observado durante varios días, y lloras constantemente. Steve no se ha dado cuenta, porque él te deja ser libre, confía en tí, y te ama. Pero yo sí lo he visto, y me preocupa muchísimo. Sólo quería decirte que si necesitas un amigo, alguien con quien hablar, aquí estoy. Y soy una tumba, además mantengo a raya a la brujita escarbamentes que también te ha estado observando. En fin, Nat, sólo quería que lo supieras. Te dejo seguir entrenando..."

"Espera, Sam. Necesito hablar con alguien. Son cosas que Steve ya sabe pero que no quiero estarle recordando. Sam, soy estéril. Y no fue mi decisión. Y te juro que nunca, nunca me había importado hasta ahora. Steve es el primer hombre al que he amado realmente. Es el primero con el que deseo tener un hijo. ¡Y no puedo Sam, no puedo! Eso es lo que me pasa... No te preocupes por mí, estaré bien. Sólo necesito asimilar mi realidad y volveré a ser la de antes..."

Sam me abraza, me da un beso en la frente, y se va a continuar su entrenamiento. Yo vuelvo a correr y veo la hora, es tarde y tengo que arreglarme para mí cita con El Primer Vengador.

Fui de compras con Wanda para escoger mi vestido, zapatos y hasta un nuevo perfume me compré. Quiero estar perfecta para él.

Me emociona tanto saber que hoy seré suya por fin. No puedo esperar. Será la cena más larga de mi vida, pero me parece hermoso que Steve haya pensado en llevarme a cenar primero, en ser tan romántico y caballeroso como sea posible, y hacer de esta noche algo inolvidable.

A las 8 pm en punto tocan a mi puerta. Abro, con mi vestido rojo vino, y me quedo boquiabierta cuando veo a Steve con traje, corbata y zapatos elegantes. Se ve increíble. Hasta se me quitó el hambre...

Volvemos a la Base, entramos y nos dirigimos a mi habitación. Estoy temblando... Yo, Natalia Alianovna Romanov, que nunca le he tenido miedo a nada, estoy hecha un manojo de nervios. Pero él también tiembla... Hasta que comenzamos a besarnos y entonces, todo cambia...

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¡Hola! Espero que estén disfrutando la historia.
Los dejo en suspenso por unos días, pero prometo que el próximo capítulo será súper hot. Díganme cómo lo quieren, se aceptan sugerencias. Recuerden que es la primera vez del Cap.

Saludos desde México.