Bulma, eres la mejor prima que tengo, decía el joven pelinegro, abrazando a su prima.
Tonto, soy la única prima que tienes, pronunciaba riendo la peli azul.
¡Gracias Bulma!, no sabes cuánto me ayudaran los números de mis amigos para encontrarla, decía con una sonrisa el joven de cabello alborotado.
Pero Gokú ella está comprometida, respondió con preocupación la peli azul.
Si lo sé, pero de igual modo necesito que sepa los motivos por los que me fui por tanto tiempo, dijo Gokú.
Hay Gokú, mejor porque no me acompañas a comprarte algo como regalo por tu retorno a las artes marciales, acotó la peliazul.
Está bien Bulma vamos, necesito distraerme un poco, dijo Gokú, saliendo de su mansión junto a su prima.
En la carretera:
Estas segura que es por acá, decía el joven de cabello alborotado mientras manejaba su auto.
Si es esta, respondió la peli azul, señalando una vistosa tienda de lunas con atractivos trajes de todo tipo de deporte que lucían en la entrada.
Gokú estaciono su auto y ambos jóvenes entraron a la tienda. Bulma y Gokú iban recorriendo los pasadizos de la tienda cuando un pequeño ya conocido por Gokú apareció entre los pasillos.
¡Hola pequeño!, dijo Gokú acercándose a acariciarlo.
Hola señor, decía el pequeño niño.
Gohan, ¿Dónde estás?, escucho el joven y el niño volvió a correr hacia el mismo gigantesco hombre del parque.
Bulma está viendo algunas vitrinas cuando alguien le dijo ¿le puedo ayudar en algo señorita?, Bulma levanto la vista y se mostro asombrada ante la presencia de quien su primo tanto buscaba.
¡Eh¡, estoy mirando, dijo nerviosamente la joven.
No se preocupe cualquier cosa estoy al fondo para ayudarla, respondió cortésmente la pelinegra.
Bulma miro a todos lados para encontrar a su despistado primo pero no lo hayo en la tienda, entonces salió fuera de ella.
Aquí estas tonto, dijo molesta.
¿Qué tienes?, ¿por qué me tratas?, así, ¡ah¡, ya se no encontraste nada para mí, no te preocupes prima, pronunciaba el joven de cabello alborotado.
No tonto escúchame con atención, dijo la peli azul, haciendo una pausa para agregar con una amplia sonrisa en su rostro: Adentro esta la persona que tanto buscas, ella trabaja aquí.
¡En serio! pronunció Gokú, volviendo a la tienda desesperado y mirando a todos lados cuando la vio al fondo de la tienda con unos libros. Entonces empezó a caminar lentamente mientras la observaba, estaba nervioso, tenía miedo de que volviera a pasar lo mismo que el día anterior, luego de algunos minutos llego frente a ella.
¡Hola Milk!, me da mucho gusto volver a encontrarte, pronunció Gokú.
El mundo de Milk, se le vino abajo al volver a escuchar su voz, levanto su rostro encontrándose nuevamente frente a él, su cuerpo templo, ¿no sabía qué hacer?, esta consternada ante la presencia de él, el hombre que a pesar de que la uso no podía olvidar.
Milk, necesito hablar contigo, aclarar muchas cosas, agregaba Gokú con nostalgia en la voz.
No tenemos nada de qué hablar, dijo la bella pelinegra con la mayor firmeza que pudo.
Cuando en eso el pequeño niño que venía de la mano del gigantesco hombre se soltó de él y corrió hacia su madre.
Mami, mami, decía el pequeñito, ante la mirada preocupada de Milk y la sorpresa de Gokú.
¿Qué pasa cariño?, respondió Milk con dulzura.
Tengo hambre, acotó el pequeñito sobándose la barriguita, mientras Gokú se ilusionaba con la idea de que ese niño era suyo, tenía que ser suyo no tenía dudas de ello, además se acordó lo que aquella señora le dijo cuando fue a buscar a Milk a su antiguo departamento.
-.Recuerdo.-
Hay un lazo muy grande que te une a ella, no puedo distinguirlo bien pero es algo que no se puede romper, dijo la mujer mirando al jovencito que se mostraba intrigado.
-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-
El joven al acordarse se le formo una gran sonrisa y miro embelesado a Milk y su hijo.
Milk, tomo alzo al pequeño y le lanzo una mirada de odio a Gokú e ingreso dentro de un pequeño cuarto que había en la tienda.
Joven yo lo puedo atender, dijo el gigantesco hombre.
¡Eh¡, si, respondió Gokú llevándose cualquier artículo sin impórtale de que deporte sea con tal de que el gigantesco hombre no sospeche nada.
Gokú salió fuera del local, dónde Bulma lo esperaba.
Hablaste con ella, dijo la peli azul.
No Bulma, pero me entere de algo, pronunció el joven con una gran sonrisa al tiempo que agregaba: ¡Tengo un hijo!
La peli azul lo miro asombrada tratando de asimilar aquella noticia inesperada, pues su primo era menor que ella y le esta diciendo que era ya padre.
Bulma te molestaría volver sola a casa, llévate el auto si lo deseas, dijo el joven, sacándola de sus pensamientos.
No hay problema primito, pronunció la peliazul, haciendo una pausa para agregar mientras tomaba su celular y empezaba a marcar un número en el mismo: Ahora llamo al chofer de la casa a que venga a recogerme.
3 horas después:
Milk, miraba preocupada su reloj, papá ya me voy, cuida a Gohan; dijo preocupada la pelinegra, mientras cogía sus libros y su cartera y salía apresurada de la tienda. Qué bueno que ya no este, pensaba la joven, al estar fuera.
Gokú había preferido ocultarse con su auto para que Milk no lo viera en cuanto la vio salir subió a su auto y lo estaciono frente a ella.
¿Qué quieres?, ¿ya no quiero saber nada de ti?, dijo molesta la pelinegra, al darse cuenta que quien estaba dentro del auto que impidió su avance era el joven de cabello alborotado.
Tenemos mucho que hablar, respondió Gokú con firmeza, bajando rápidamente del auto y acercándose a ella.
No tengo nada que hablar contigo, agregó molesta la joven tratando de parar un taxi.
Gokú le bajo la mano y le dijo sosteniéndole la mirada: Yo sí, porque yo ¡te amo!, además tenemos un hijo ¿no?, o ¿me lo piensas negar?
Tengo prisa, tengo clases, pronunció Milk, para librarse de él que la tenia sujeta de las manos.
Está bien, ¿pero dime cuando hablaremos? y ¿a qué hora?, dijo el pelinegro.
El fin de semana en la tarde, pero ya suéltame voy a llegar tarde y tengo examen, agregaba la pelinegra.
Está bien mi amor, dijo Gokú, haciendo una pausa para acotar mientras la acercaba a él: Pero si no cumples yo volveré a buscarte.
Luego de ello no dándole tiempo de reacción la beso, tras algunos segundos se separo lentamente de ella y agregó: ¡Te amo¡
Milk, no le dijo nada, solo lo miro con rencor y corrió lo más lejos que pudo de él para que no la viera llorar, mientras decía con voz quebrada: ¿por qué volviste Gokú?, ¿por qué?
En la Universidad:
Milk, ¿Qué te pasa?, decía la rubia, haciendo una pausa para acotar: ¿Cuándo llegaste te vi triste? Y ahora que te vuelvo a encontrar sigues igual, ¿acaso está enfermo Gohan?
Amiga, ¿no te ha dicho nada Krilin, pregunto la pelinegra.
No le he visto aún amiga, como he estado en exámenes y él con ese campeonato, respondió la rubia.
Gokú ¡volvió¡, dijo la bella pelinegra, mientras unas gruesas lágrimas se escapaban por sus mejillas.
Dieciocho ante la confesión solo abrazo a su amiga dándole consuelo.
![](https://img.wattpad.com/cover/67809976-288-k367328.jpg)
ESTÁS LEYENDO
SIEMPRE TU
RomanceMilk Ox una bella joven a tenido una mala experiencia con su primer amor, dejándola destrozada y sin ganas de volver amar, cierto día conoce a un joven que le devolverá la ilusión de volver a creer en el amor, pero el destino se encargara de volver...