El regreso de Severus

2K 136 4
                                    

EL REGRESO DE SEVERUS

SEVERUS SNAPE

El dolor era algo muy subjetivo, al menos en mí, llegando a pasar horas y horas tirado en el mármol negro de la mansión Malfoy después de horas de tortura supongo que me habían hecho un hombre fuerte, el veneno de Nagini que me sumergió en ese delirio por semanas también hablaba de mi temple, inclusive cuando tuve que llegar a violar, torturar y matar me hicieron un ser frío y hasta insensible, pero si algo me dolía y no soportaba era verla a ella llorar.

Y ahí estábamos en la habitación, ella acariciando con sus manos temblorosas su vientre cada vez más pronunciado, parada en la esquina de la habitación con sus ojos rojos y su nariz hinchada de tanto limpiarla, sus rizos desordenados sobre sus hombros y con ese amor tan puro y grande pero mío, ahora también me observaba con odio y dolor.

Sobre una pequeña maleta colocaba pantalones, camisas, túnicas, un par de botas, pociones, todo lo necesario para la partida, había colocado un hechizo silenciador a la puerta para que Andrea no escuchara llorar y gritar a su madre.

- No puedes dejarme.

- No te estoy dejando, intento mantenerlas a salvo – le respondí entrecortado, intentando que ella escuchara mis razones y las apoye como siempre lo había hecho.

- Puedes hacerlo desde aquí.

- No Hermione, no puedo hacerlo y ya lo hemos visto, mientras estés aquí en la casa todo marcha bien pero allá afuera el peligro es inminente para ti y nuestros hijos.

- Entonces yo voy contigo – la senté en la cama limpiando sus lágrimas y besando sus manos, acaricie su vientre mientras hipaba por el llanto y nuestro hijo comenzó a moverse despacio sintiendo mis movimientos de las manos.

- ¿Lo sientes? – le pregunté con ese continuo movimiento de su vientre – Antes de ti no había nada que yo amara... no había algo que valiera la pena en mi vida, ahora de pronto te tengo a ti y nuestros hijos y todo cambia, empieza a tener valor, el sentido de seguir viviendo y luchar... sé que haría cualquier cosa para cuando nazca mi hijo sea en un lugar libre donde pueda jugar y reír sin el miedo de salir y que lo puedan matar, cuando estábamos en guerra separados sólo lo hacía para que tú tuvieras la posibilidad de que fueras libre y ahora que va a nacer nuestro hijo esa fuerza con la que continué la guerra se incrementa, Andrea es muggle y corre más riesgo... toda mi familia corre peligro, por un lado el mundo mágico los señala por el simple hecho de ser quien soy y por otro lado los mortifagos siempre los perseguirían, para ellos yo soy un traidor... siempre has sido una mujer inteligente y valiente, necesito que lo seas una vez más por favor, siempre te encontraba inquebrantable en aquel sillón de piel esperándome y haciendo lo que te correspondía, tienes que hacerlo una vez más ¿si?

- No, no puedo hacerlo, tú no tienes idea del miedo que me invadía cada vez que salías, cada vez que me tocaba quedarme y no saber si regresarías o no, para Voldemort eras indispensable pero para ellos no Severus, eres un traidor para ellos y no buscaran otras cosas más que matarte.

- Hermione son sólo simples cobardes y carroñeros, me estas subestimando y me ofendes – le dije en broma pero ahora no logré sacar ni una sola sonrisa.

- No quiero quedarme, iré contigo.

- Hermione ¿y si nos agarra el parto a media batalla? No puedo arriesgarlos así entiéndeme.

- ¿Y por qué no me entiendes tú a mí? – me gritó bastante molesta.

- Claro que lo hice, cuando intenté llevarte después de lo que te ocurrió en la mansión Malfoy pero te fuiste – cerré la maleta y la hice pequeña para colocarla en mi pantalón, me puse la túnica sintiendo sus manos sobre la prenda jalándome despacio haciendo que todo eso me doliera más que a ella.

Siempre te estaré esperando Severus... (Sevmione)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora