VOLVIENDO A VIVIR

Capítulo 19: "Volviendo a vivir"

(Penúltimo capítulo)

El chofer del bus anuncio la siguiente parada y dos jovencitos y un anciano bajaron en un lugar lleno de mucha vegetación.

De aquí tenemos que seguir a pie, dijo el joven de cabello alborotado tomando la mano de la bella jovencita que llevaba una pequeña maleta consigo. Los jóvenes caminaron seguidos por el anciano.

1 hora después:

Este lugar es hermoso, dijo la jovencita mirando la pequeña cabaña y corriendo en medio del campo lleno de flores hasta que llegó a un lugar donde había un lago.

Gokú la siguió y se quedo observando a lo lejos a la pelinegra que contemplaba el escenario como tratando de buscar en su memoria recuerdos de ese bello lugar.

-.Recuerdo.-

Muchos recuerdos vinieron a su mente, todos junto a Gokú y algunos con su padre, pero hubo uno que le hizo acordarse de aquel hermoso lugar.

Un par de jovencitos después de degustar sus alimentos decidieron sentarse al pie de un árbol a mirar el hermoso paisaje.

Es muy tranquilo, en un lugar así me gustaría vivir, dijo la pelinegra.

¡Eh¡, pero pensé que te gustaba vivir en la gran ciudad y en tu casa, dijo el jovencito.

No Gokú a mí me gustan más los lugares pacíficos, sin tanto bullicio, pero por los negocios de mi padre no se puede. Pero sabes ahora que estoy contigo eso ya no importa ya que yo seré feliz donde tú estés, dijo la bella joven con una sonrisa.

Entonces construiré una casa aquí para ti, para que cuando nos casemos vivamos juntos aquí, ¿qué te parece princesa?, dijo el jovencito acariciándole el rostro con sus manos.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

La bella pelinegra giro y vio a Gokú frente a ella, le dio una linda y cálida sonrisa, corrió a abrazarlo y le dijo: lo recuerdo todo, todo, dijo con una gran sonrisa mientras lágrimas empezaban a caer a través de su bello rostro.

No llores princesa, dijo el joven de cabello alborotado limpiando las lágrimas con la palma de su mano.

No lloro de tristeza, sino de alegría mi amor, al fin lo recordé todo, dijo al jovencita.

Al día siguiente: "Mansión Ox"

¿Cómo que mi hija no llego a dormir?, decía furioso el gigantesco hombre.

Señor pensábamos que la señorita se encontraba en su habitación pero todo está en perfecto orden, solo encontramos esta carta dirigida a usted, dijo una de las empleadas entregándole la carta.

El padre de Milk, tomo la carta y se fue a su despacho, se sentó en su escritorio y abrió el sobre y empezó a leer la carta.

Carta

Querido papá:

De seguro al leer esta carta ya te abras enterado de mi partida.

Te quiero mucho papi y por ese amor que se que muy en el fondo me tienes espero y comprendas mi decisión. He decidido renunciar a todo bien material que me una a ti, ya me puse en contacto con un abogado y pronto se te hará llegar un documento en donde renuncio a mi herencia, no quiero nada que impida poder ser libre para amar, si esa es la condición para poder yo elegir al amor de mi vida y estar junto a él, no quiero nada material; tampoco quiero que intentes impedir nuevamente mi felicidad, ¡amo a Gokú Son¡, el nunca tuvo la culpa de que yo lo amase, no lo odies por ello padre. Me voy con él y su abuelo lejos de la ciudad aún lugar dónde libre de tus prejuicios podamos ser felices, como bien te dije tu siempre serás mi padre y yo siempre seré tu hija, pero no quiero nada material solo quiero tu amor y comprensión con eso me basta y sobra para poder ser completamente feliz, porque al lado de Gokú soy inmensamente feliz, pero me faltas tú padre el otro hombre que más amo en el mundo para tener la felicidad completa.

Padre yo siempre me mantendré en contacto contigo y te perdono por todo el daño que le causaste a Gokú, porque aunque como padre cometiste muchos desaciertos también tuviste grandes aciertos conmigo al criarme solo cuando enviudaste.

Te amo padre y déjame ser feliz es lo único que te pido.

Milk Ox

El gigantesco hombre doblo la carta y gruesas lágrimas empezó a derramar por sus mejillas.

Montaña Paoz:

¿Qué tal dormiste?, preguntaba con una sonrisa un jovencito de cabello alborotado una bella pelinegra.

Muy bien, tu cama es muy suave, dijo la jovencita con una bella sonrisa. ¿Y tú?, dijo al joven.

Bien princesa, este mueble es muy cómodo, dijo el joven acercándose a la jovencita para darle un dulce beso, que no duro mucho pues su abuelito, había ingresando a desayunar.

Horas más tarde:

Un par de jovencitos se encontraban al borde de un lago pescando.

Mañana iré a un pueblo vecino a buscar trabajo, dijo el joven de cabello alborotado.

¿Podemos ir juntos?, necesito comprar mi vestido para la boda, dijo feliz la jovencita.

Claro princesa, dijo Gokú mirándola tiernamente.

Empresa Ox:

¿Y no piensas hacer nada?, decía molesto un hombre de cabello de flama y bigote.

No, la dejare que viva su vida, no quiero perder a mi única hija, dijo el gigantesco hombre con tristeza.

Pero ese pobretón...

No hables más así de él, es el hombre que mi hija eligió para compartir su vida aunque no me guste es su decisión y ya no pienso seguir interfiriendo entre ellos dos y tu tampoco lo hagas, dijo el gigantesco hombre con firmeza.

Mansión Brief:

¡Alo¡, decia una linda peli azul.

Bulma amiga, soy Milk.

Amiga ¿dónde estás? Tu padre me llamó para preguntarme si sabía algo de ti, dijo la peli azul.

Estoy con Gokú y su abuelito en Paoz, dijo la bella pelinegra.

¿Paoz?, dijo Bulma.

Si amiga recuerdas que una vez te conté que mi primer aniversario con Gokú me trajo aquí, dijo la pelinegra.

Milk, ya recordaste todo, dijo con alegría Bulma.

Si amiga, dijo la pelinegra. Bulma llamaba para invitarte a mi boda dijo feliz la jovencita.

Milk le comento a Bulma todos los detalles de lo que había pasado para que tomara la decisión de irse de su casa, también hablaron de la boda y le pidió discreción con su padre pues ella no quería que él se entere de dónde estaba.

No te preocupes amiga no le diré nada y felicidades amiga por tu boda y qué bueno que ya recuerdes todo, decía con alegría Bulma.

Gracias Bulma, dijo la pelinegra al otro lado de la línea telefónica.

Milk, entonces nos vemos para ver lo de tu vestido, decía emocionada la peli azul.

Montaña Paoz:

Una bella pelinegra cortaba la llamada telefónica, mientras una gran sonrisa se formaba en su rostro y un pensamiento le vino a la mente: Ahora si seré tu esposa Gokú, pensaba la bella jovencita.