La vida de Lorelay

Capítulo 27

– ¡Despierten! – gritó alguien entrando a mi habitación.

 Gruñí y tapé mi cabeza con la almohada. Sentí a Eppy a mi lado hacer lo mismo.

 – ¡Vamos chicas! ¡Despierten, esto es una emergencia!

 Es Addie. Suspiré muy sonoramente y me incorporé.

 – ¿Qué quieres? – pregunté de mala manera.

 Se sacó su chaqueta de cuero – la misma que tenía anoche – y se sentó frente a mi. Sigue vestida igual que ayer.

 – Epperly, despierta – sacudió sus piernas.

 – ¡Oh mi Dios! ¡Déjame dormir Maddison! – exclamó sentándose.

 – Esto es urgente – dijo muy seriamente. Bueno, lo más serio que a Addie le sale.

 – ¿Qué es? – pregunté.

 – Desperté en una cama que no era la mía.

 Con Eppy nos miramos el mismo tiempo y reímos.

 – Eso es algo que todos en la fiesta teníamos por seguro.

 – ¿Qué? ¿A qué te refieres? – preguntó desconcertada.

 – Todo el mundo los vio besándose e irse juntos de la mano.

 – Espera... ¿Saben con quién me fui?

 ¿Está bromeando?

 – ¿Tu no lo sabes? – preguntó Eppy confundida.

 – ¡No! Desperté desnuda en una cama que no es la mía, escuché la ducha por lo que supuse la persona con la que pasé la noche estaba bañándose. Aproveché el momento, me vestí lo mas rápido que pude. Tuve que usar mi nombre con el taxista porque no tenía un centavo. Vine directo hacia aquí como puedes notar – dijo señalando su vestimenta.

 – Santo cielo... ¿No recuerdas con quién? – pregunté preocupada.

 – Nothing. None. Nada. Cero. Null. N-

 – Entendimos – interrumpió Eppy.

 Addie suspiró.

 – No recuerdo nada.

 – ¿Cuál es el último recuerdo que tienes? – pregunté.

 – Uhm... lo último que recuerdo es estar en un sillón tomando un trago con Simon.

 – Sí... ese fue el quinto.

 – ¿El quinto?

 – El quinto vaso – expliqué.

 – Ah... ¿Van a decirme con quién me fui o no?

 Miré a Eppy en busca de una respuesta. Ella solo se encogió de hombros. Volví a mirar a Addie.

 – Robin Johnson.

 Ella quedó boquiabierta. Tapó su cara con las manos y se tiró espaldas a la cama.

 – No lo puedo creer.

 – Si bueno... créelo – dijo Eppy en un tono algo duro.

 Codeé sus costillas.

 – No seas tan dura – susurré.

 Ella volvió a encogerse de hombros.

 – Lorelay no sabes lo que- – entró Liam a mi cuarto, pero dejó de hablar en cuanto vio a Maddison – oh... hola Addie – sonrió falsamente.