Y aquí estoy, una vez más, repitiendo sentimientos, experimentando dolores de pecho. Otra vez estoy al borde, no al borde de la nada, de la muerte o algo parecido, sino al borde de mis propias emociones, deseando ser alguien más, tratando de encontrar esperanza en las palabras de aquellos que creen en la felicidad, en la vida color de rosa y llena de unicornios.
Quizás es sólo que a mí me tocó vivir de este modo... aún así nunca, juro que NUNCA en la puta vida, lo voy a entender; nunca voy a dejar de preguntarme por qué si existe un Dios me permitió experimentar desde pequeña tanto dolor en mi pecho, tanta desesperanza y tantas toneladas de realidad. Nunca lo voy a entender, y quizá haya gente que diga que es una prueba, quizá digan que fue por algo, pero nada, nada en la vida justifica sentirse echo polvo, nada justifica querer vivir, creer, soñar, anhelar y luego azotarte de frente con la realidad, con una realidad que atrapa y carcome, de la que no se puede simplemente huir, huir de ese tipo de realidades no funciona, no cura, sólo hace más daño.
Hoy estoy aquí, como tantas otras veces, deseando sólo sacar y sanar.
~ 28/05/16
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Son frases, son textos...
Poetry...son pedazos de corazón que se van desprendiendo. Recoplicación de textos cortos, la mayoría inspirados en sucesos que ocurren en mi día a día.
