Mi Apuesta Favorita (editando)

Capítulo 22

Estúpido sol, mis ojos, ¿No crees que es suficiente con que use lentes? ¿Acaso me quieres dejar ciega?

–No quiero levantarme–giraba por toda mi cama logrando que perdiera el equilibrio y mi rostro impacto contra el suelo. –Auch– me quejo. Tenía tanta flojera que me quedé así por cinco minutos, me acomodé quedando boca arriba y resoplé.

Hoy tengo que leer un poco, ya se acercan los exámenes finales.

Me levante del suelo y me dirigí al cuarto de baño, me quite mi pijama y mi ropa interior, entre a la ducha, prendí la llave y deje que las gotas de agua empaparan mi cuerpo, me quede inmóvil aproximadamente un minuto hasta que reaccione y me coloqué el jabón. Me enjuague mi cuerpo y salí de la ducha, seque mi cuerpo con la toalla y me la enrollé. Salí del cuarto de baño y me dirigí al armario, tome mi ropa interior y una pijama, me vestí y cepille mi cabello.

Salí de la habitación y me dirigí a la de Andrew, abrí la puerta, corrí y me avente encima de el.

–Ya vienes a molestar otra vez- susurró debajo de sus cobijas.

–Yo se que me extrañas–quite las cobijas de su cara y le di un zape en su frente. Frunció el ceño, se sentó en su cama y froto los ojos, me volteo a ver y en un segundo a otro se encontraba a horcadas de mi haciéndome cosquillas.

–¡Basta!- grite entre carcajadas- ¡Para! ¡No puedo respirar! ¡Ya!–como pude me levante y lo empuje logrando que cayera de la cama, controle mi respiración y me asome a ver al suelo, comencé a reírme fuertemente, Andrew se encontraba en una posición muy graciosa, su espalda estaba en el suelo y sus piernas estaban hacia arriba.

–Estú-pida–murmuró.–Me de-jaste sin a-ire.– dice con dificultad tratando de levantarse.

–Dulce Venganza–sonreí divertida y me levante de la cama, baje las escaleras y camine hacia la cocina, abrí el refrigerador y tomé algunas zanahorias, las lave y le quite la cáscara, las partí a la mitad y se las di a Scuishi,  Tome dos platos, leche, cereal, y lo serví en los platos.

–¡Andrew! ¡Ya esta el desayuno!–grite, regresé a la cocina y me senté en uno de los bancos. Andrew se sentó a mi lado y miró su plato.

–¡Qué buffet!– dice con sarcasmo tratando de no reír.

–Calla, todavía que te serví.- bufé y comencé a comer mi cereal.

–Oye, ¿puedo hacerte una pregunta?.-murmuró.

–Ya la hiciste.

–Esa no cuenta, tonta.– dice mirándome mal, alcé los hombros restándole importancia.

–Esta bien–dije divertida.

–¿En serio te gusta Darren?–deje de masticar y lo miré.–Sé sincera, soy tu compañero de panza.– Terminé de tragar y decidí decírselo de una buena vez, después de todo él es mi mejor amigo.

-Sí- susurré.

–Ten mucho cuidado hermanita, conozco a los tipos como el, son de los que solo quieren pasar una noche contigo y luego te mandan a la mierda.–Me miró directo a los ojos.–No quiero que te lastime como lo hizo Taylor, no puedo cuidarte mucho en la escuela, casi siempre nos toca horarios distintos, además me da mucha flojera ir a romperle la cara.–dijo divertido y reímos.

–Todo estará bien, lo
Prometo. Te amo, Salamandra- sonreí con ternura hacia mi hermanito.

–Te amo, Grinch–me corresponde con la sonrisa y me abrazó.

Terminé del almorzar y lleve mi plato al fregadero.

–Voy a leer, no me molestes.– Me acerque a Andrew y planté un beso en su mejilla.