Capítulo 28

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–Rachel, despierta.

–Shh, deja...deja dormir. 

–Despierta...

–Mamá 5 minutos más- murmuré aún con los ojos cerrados y removiendo entre mis cobijas. . 

-¡DESPIERTA CHINGAR!- abrí mis ojos rápidamente y caí al suelo. 

-¡Que estúpida maña de levantarme así de feo!- espeté desde el suelo hacia mi estúpido hermano. 

–Ya chiquibeibi, ya es tarde, hay que ir a la escuela- quité las cobijas de mi rostro, me senté y miré raro a Andrew. –¿Qué pasa?

-¿Qué te pasa a ti?- pregunté divertida.- Me acabas de decir "Chiquibeibi", tenía años que no me decías así- sonreí  y  sus mejillas se tornaron rojas. 

-Querida hermana, este chico se ha enamorado- abrí mis ojos como platos, me levante del suelo y me avente en él. 

-¡Ya no vendrán más Plastizorras a casa! ¡Dios a escuchado nuestras plegarias!- exclamé divertida- Me alegro por ti Andrew, por favor dile a mi próxima cuñada que si te rompe el corazón yo le rompo la cara. Aunque lo más apropiado sería que si tu le rompes el corazón yo te rompo la cara. De todos modos en las dos salgo beneficiada.- reímos. 

-No lo haré- sonrío. 

–Vale, ahora lárgate que tengo que ponerme chula – sonreí y él comenzó a reír sarcásticamente. .

-Ambos sabemos que te da muchísima hueva arreglarte-  dice y yo solté una carcajada. 

-¿Cómo lo supiste?- reímos, Andrew se levantó de la cama y salió de la habitación. 

(...)

-¡Hola!- exclamé, él estaba bailando, cuando me vio abrió los brazos y sonrió, corrí hacia el y lo abracé. 

-Hola mi amor-susurró en mi oído. Mi cuerpo se estremeció cuando sentí sus labios en mi oído. 

-¿Lista?- preguntó y asentí divertida.

–Es hora– Darren se agachó y me subí a su espalda. Tomó impulso y comenzó a correr hacia la entrada del instituto. 

–¡Buenos días compañeros!–Exclamé divertida por todo el pasillo, mientras Darren iba como alma que lleva el diablo estallando a carcajadas. Muchos nos quedaban viendo raro y otros se reían. –¡ARRE BURRO ARRE!. ¡ZA ZA ZA Y A TROTAR Y A TROTAR!– gritaba desde la espalda de Darren corriendo a toda velocidad entre los pasillos. 

Después de las risas y burros, llegamos hasta nuestros casilleros y me bajé de la espalda de Darren. Me sentía completamente liberada y fuera de mí. Si me hubieran preguntado hace dos años si hubiera hecho esto habría dicho que ni loca. 

–Esto va a ser épico- exclamé emocionada.-Tenemos que dejar huella antes de irnos.–sonreímos.

-Hablando de eso, necesitamos ir de compras- sonrío y fruncí el ceño.

-¿Para qué?-cuestioné haciendo un puchero. Odio ir de compras.  

-Necesito saber de que color va a ser tu vestido para que compre mi camisa de ese color, necesitamos ir combinados en la graduación.-sonreí claramente con las mejillas rojas.

-Pero  aún faltan semanas para eso y además yo odio esas cosas ¿y si mejor nos quedamos viendo películas y atascarnos de golosinas?- sonreí y puse ojitos como el gato con botas, Darren rió y negó divertido. 

-No preciosa, tenemos que ir.– insiste. 

-Rayos- hice un puchero. Tomó mis mejillas y besó mis labios.- Siempre te aprovechas de mis pucheros.  

Mi Apuesta Favorita (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora