-Cada jueves le doy a pato el pez un sándwich de mermelada-
-¿Pato es un pez?-
-y hoy no hay mermelada. Y entonces mi hermana me dijo que le diera un sándwich de atún, no le puedo dar a pato atún-
-¿tu sabes lo que es atún?-
-¿pez? ¡Es pez! ¡Si pato come pez sería una ABOMINACIÓN!-Me sentía niña chiquita viendo su caricatura favorita, pero por favor ¿quién no ama Lilo & Stitch?
Mi móvil comenzó a vibrar, rodé los ojos fastiada y com ganas de matar a la persona que interrumpiera mi tarde de Lilo y Stitch. Dejé las palomitas en la mesita de noche, le puse pausa a la película y contesté la llamada.
-¿Hola?-
-Hola preciosa- saludó Darren.
-¿Qué quieres?
-Escuchar tu voz- murmuró.
-Pues ya lo hiciste, estoy en medio de un asunto muy importante.
-¿Tu asunto muy importante es ver Lilo & Stitch?– pregunta con una pequeña risa, abrí mis ojos como platos, me levanté de la cama y caminé hacia la ventana.Y Ahí estaba colgado en el árbol como el aborto de mono que es. Sonrió divertido y le mostré mi hermoso dedo mayor. Lleve el móvil a mi oreja.
-¿Te gustó la sorpresa?- murmuró divertido. Darren comenzó a caminar hacia la ventana, pero dio un paso falso y resbaló, cayendo del árbol e impactando fuertemente en el suelo haciéndolo gemir de dolor.–¡Darren!- grité asustada, salí corriendo de mi habitación, baje las escaleras, salí de casa y corrí hacia el árbol.
–Darren- exclamé, me agaché y lo tomé en mis brazos.- Despierta.- murmuré asustada, mi corazón latía a mil por hora, mis ojos comenzaban a llenarse de lagrima al ver que Darren no abría los ojos. Comencé a moverlo fuertemente hasta que una pequeña sonrisa se hizo notar.
-Hueles a palomitas- susurró en mi oído, abrí mis ojos y me levanté del suelo furiosa
-¡Maldito imbécil! ¡Casi me matas de un susto!- llevé mi mano a mi pecho y Darren comenzó a reír.
-Veo que aún te preocupas por mí.- sonrió pícaro y rodé los ojos, trato de levantarse y chilló de dolor.
-Solo por la buena persona que soy te ayudaré.- me acerqué a él y lo ayudé a levantarse.
–Demonios, mi pierna– gimió de dolor al acomodar su brazo en mi hombro,nos comenzamos a tambalear y cayó encima de mi.
-Mi es-estómago- murmuré sin aire. Cerré los ojos. Darren se hizo a un lado para poder levantarme, caminamos hacia el auto y lo llevé al hospital.
-Eres la persona más idiota que he conocido en toda mi patética existencia.- susurré intentando no reír.
-Ese era mi Plan B por si no contestabas el móvil.- rió. -Extrañaba lograr sacarte una sonrisa.- murmuró y borré mi sonrisa de inmediato.
Prendí el estéreo para no tener que hablar con él y sentirme más incomoda de lo que ya estaba.
(...)
-Aquí es- habló, aparqué el auto afuera del hotel donde se hospedaba. Tomé sus muletas y lo ayudé a bajar.
Caminamos hacia el hotel y entramos a su habitación. Lo ayudé a acomodarse en el sofá.
-Debo irme- susurré, iba dar un paso para dirigirme a la puerta pero Darren me tomó del brazo.
-Quédate.- susurró, lo miré directamente a los ojos, mis mejillas comenzaron a calentarse. Me atrajo hacia él y caí encima. Sus labios rozaban con los míos, ni uno apartaba la mirada del otro, y yo sentía yo moría por dentro. Las malditas abejas asesinas se apoderaron de nuevo de mi estómago. Darren acarició mi mejilla dulcemente.
ESTÁS LEYENDO
Mi Apuesta Favorita (editando)
Ficção AdolescenteDéjame contarte una historia, una historia conocida por muchas personas en todo el mundo. Diferentes adaptaciones, diferentes palabras, diferentes descripciones. Pero una misma situación. Déjame contarte una historia cliché, una historia como mucha...