Karamatsu no podía creer lo que veia.
¡"Un ghoul! ¡Una mujer ghoul!"
Era la primera vez que veia una de esas criaturas en persona... Lástima que no pudo admirarla mucho tiempo porque esa joven tan hermosa y letal se acercó a una increíble velocidad hacia él, quedándose frente a frente y agarrando con una mano la solapa de su pijama, para acercársele a su rostro con una notable furia.
El de azul estaba más sorprendido que asustado.
-¿Por qué...? – Dijo la ghoul con una voz casi quebrada. - ¿Por qué hueles a ella?
Ni siquiera tuvo tiempo de contestar cuando un puñetazo le dio de lleno en la mejilla.
Lo lanzó a unos metros...
"¡Qué fuerte!" Llegó a pensar, una chica de ese tamaño y con tremenda fuerza... Era una ghoul, por supuesto.
Había mencionado que olía a alguien... ¿Acaso ella estaba viniendo hacia él porque su olor la atrajo?
-¡¿Por qué hueles a Karako?! ¡¿Qué le hiciste?! – Volvió a gritar abalanzándose sobre él.
Pero Karamatsu no quería ser golpeado de nuevo y no tuvo problemas en esquivar una patada que se le era dirigida.
-¡Espera! – Llegó a decir con las manos levantas. - ¡No sé de qué hablas!
Era la verdad, no conocía a la tal Karako, pero aparentemente tenían el mismo aroma. Pensó que quizás tenía que ver con su transformación a ghoul, pero ni él sabía cómo había pasado... Tenía que explicársele, pero lástima que para la mujer, eso no sería fácil de hacerle entender.
-Por supuesto... - La ghoul emanaba un aura de peligro que hizo que el de azul se le erizaran los vellos. – Me dirás todo lo que sabes... - Sus ojos que ya estaban negros y rojos comenzaron a brillar más. – O sino... - Karamatsu notó como cerca de los hombros de esa chica, en su espalda crecía algo parecido a unas alas negras y purpuras.
Estaba maravillado, por un momento, pensó que así debían de verse los ángeles... Pero cambio de parecer cuando vio el filo de una especie de esquirla dirigiéndose hacia él.
Apenas pudo esquivarla.
"¡Estuvo cerca!" Pensó cuando la vio incrustada en el suelo de cemento.
Escuchó el sonido de las sirenas de la policía, la chica levantó la mirada y tanto la esquirla como su Kagune de alas desaparecieron en partículas.
Apenas se había levantado del suelo cuando la joven volvió a aparecérsele de frente.
Lo último que pudo ver antes de perder el conocimiento fue su puño dirigiéndose hacia él.
-...Pero si es lindo ¿no creen? – Oyó unas voces cerca de él.
-No lo sé, es algo muy raro...
Karamatsu estaba despertándose, algo adolorido en la cabeza, pero ya tuvo golpes peores antes.
-¡Oh! ¡Está despertando! – Dijo una voz femenina.
El Matsuno de azul pensó que algo iba mal cuando abrió los ojos y vio negro, cayó en cuanta unos momentos después que tenía una venda puesta. Trató de moverse pero se sentía fuertemente atado, todo su torso y sus brazos se sentían comprimidos.
Estaba en un suelo de madera y el penetrante aroma de 5 personas diferentes le llenó los pulmones. Uno era familiar, de avellanas, mientras que los otros 4 le eran desconocidos, pero si tenían algo en común todos ellos: se sentían demasiado bien, un olor que en vez de provocarle hambre, le hacía poner ansioso y acalorado.
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Matsuno Ghoul
Terror¿Qué harías si te conviertes en una criatura que se alimenta de personas? ¿Como lo sobrellevarías? Karamatsu Matsuno nos lo muestra.