Alexa
No había podido pegar el ojo en toda la noche, toda mi noche se había basado en las investigaciones que estábamos haciendo. No había colgado el teléfono con Carter hasta altas horas de la madrugada. Se sentía como que vivía una mentira o que gran parte de mi vida no la sabía. Guarde todos los archivos de mi portátil dejándolos en una USB y borre todo. Carter había dicho que todo estaría fuera de la red en menos de 3 horas así que tenía que hacer mi respaldo.
No tenía ánimos de comer nada pero sabía que si no bajaba Lyn subiría y me bajaría a punta de golpes, era verdad la conocía sabía que lo haría. Así que decidí bajar por mi propia voluntad antes de que algo malo pasara.
—Buenos días —Dije cuándo entre al comedor y me senté en el lugar asignado para mí.
—Buenos Días— Repitieron los hermanos Maroni cuando tome asiento en la mesa.
—Te vez terrible Alex—Dijo mi amiga haciendo una mueca.
—Mala noche —Dije simplemente y comienzo a comer la fruta que está servida en mi plato.
—Aun sigues pensando en ese idiota —Dijo Lynette poniendo los ojos en blanco—Ya supéralo el jamás se enamoró de ti.
No podía explicarle a Lyn realmente porque había pasado tan mala noche, en realidad ni siquiera había pasado Nathan por mi cabeza en toda la noche pero era algo que no podía decirle, además que me molestaba un poco el tono con el que me decía las cosas, es como si tuviera coraje.
—Bueno gracias por el apoyo, amiga —Dije resaltando la última palabra.
—Lo siento, solo digo la verdad —Dijo encogiéndose de hombros.
—Llevas diciéndome esa verdad por más tiempo del que quiero recordar.
—Por dios cálmense —Dijo Axel —Son amigas, primero tu Lynette no sabes porque paso mala noche.
—Ahora la defiendes—Dijo Lynette realmente enfadada—No lo puedo creer.
Después de todo al parecer no era la única pasando mala noche.
—No la estoy defendiendo solo quiero tener un desayuno tranquilo. Yo tampoco tuve una buena noche.
—Un momento...—Lynette cambia su cara en segundos cosa que me hace pensar que mi amiga era una bipolar—... No será que ustedes dos... anoche—Eleva las cejas con picardía.
—Definitivamente tu estás loca—Dije sorprendida al creer que mi amiga puede pensar eso de mi.
No se como es que Lynette podía pensar eso de mi, no tenia mucho tiempo que había terminado con Nath. Definitivamente no iba a correr a los brazos de su hermano.
—Solo era una hipótesis—Dijo encogiéndose de hombros y volviendo a comer—Lo siento.
Axel y yo nos volteamos a ver y después vimos a Lynette que siguió como si nada comiendo su desayuno tranquilamente. Realmente comenzaba a plantearme en mi cabeza que mi amiga tenia serios problemas en esa cabeza.
—Estás loca—Dijo Axel diciendo las palabras que se presentaban en mi cabeza y estaba tentada a decir.
—No, no lo estoy —Dijo dando un sorbo al jugo que estaba bebiendo.
Después de eso el desayuno transcurrió en total silencio por parte de los tres y de cierto modo lo agradecí ya que me dolía la cabeza y con las tonterías de mi amiga me dolía aún más.
Necesitaba un poquito de paz, así que después del desayuno subí a mi habitación a tomarme un descaso de las locuras de Lynette.
Lyn a veces podía ser algo ocurrente pero esta vez pensar que su hermano y yo habíamos tenido algo que ver. Muy apenas había tenido que ver con Nathan y eso porque sentía algo por él, que jamás había sentido en mi vida. No me iba a acostar con alguien a dos días de conocerlo.
ESTÁS LEYENDO
Destino. Serie Arcuri #1
Teen FictionNo puedes detener el tiempo, tampoco puedes cambiar el pasado. Pero puedes cambiar el futuro. O eso es lo que Alexa Arcuri pensó. Realmente no sabemos que es lo que nos lleva a tomar las decisiones, pero ninguna de ellas nos lleva a un camino incorr...