Destino. Serie Arcuri #1

Capitulo 38

Nathan

Ethan, River y yo estábamos dentro del auto.

Tanto el padre de Katy como el de Dante se querían ver fuera de todo este asunto. Eran políticos importantes aquí en Italia y estoy seguro que si alguna vez deseaban ser presidente no les convenía que los mezclaran con el narcotráfico. Además era importante que dejáramos claro que una nueva generación se estaba apoderando del negocio y que no andábamos con medias tintas ni titubeábamos al momento de hacer los trabajos.

Cierro mis ojos atormentado, odiaba el hecho de la situación en la que estaba ahora con Alexa. Sé que yo había provocado todo esto, que yo la había empujado a que no me quisiera de vuelta. Pero la amaba, joder la amaba como no había amado a nadie más y me estaba muriendo por dentro porque no podía tocarla, no podía besarla, debía conformarme estúpidamente con el ser solo amigos aunque eso lo odiara como nadie tenía idea.

— ¿Pensando en mi hermana?—Dijo River.

—Odio todo lo que estamos pasando.

— Tu lo provocaste.

Yo sabía que había provocado toda esta mierda, el que ella se alejara de mí el que ella apenas me tolerara como amigo, pero el escucharlo de la boca de River solo me provocaba el querer romperle la cara.

—¿Y crees que no me maldigo día a día?

—No lo suficiente.

—Ni siquiera le he dicho que la amo, que si es mi última noche.

—Eso no pasara y lo sabes—Dijo Ethan.

—Lo sé.

Yo lo sabía, pero ella no lo sabía.

—¿Qué es lo que vez Chase?—Pregunto River sin bajar del auto.

El Audi RS7 de Ethan estaba blindado y esa fue la principal razón por la que habíamos viajado todos en él. No nos confiábamos de nadie en este negocio y con lo que estaba pasando era casi imposible confiar, porque nadie nos podía asegurar que no estábamos cayendo directo en una trampa.

—Todo está demasiado tranquilo River no me gusta nada.

—Estén atentos—Dio la orden River.

Chase era un perfecto francotirador y por ello no lo habíamos llevado. Dante estaba al mando de los refuerzos de llegar a necesitarlos. Mientras que Axel cuidaba la casa. Logan y Matt creían estar al mando de las chicas pero no era así. Las chicas eran importantes y debían estar protegidas con todo.

Logan y Matt eran dos chicos que realmente no estaban mezclados con lo que hacíamos, trataban de hacerlo, pero yo necesitaba más para mi primo y sé que Ethan pensaba lo mismo, ellos necesitaban ser personas ajenas a este mundo.

—En algún momento tenemos que bajar—Dije viendo a los otros dos.

—Vamos—Dijo River después de pensarlo por unos largos segundos.

Apenas había abierto la puerta unos segundos cuando una ráfaga de tiros cayó hacia nosotros.

—Chase, Dante—Escuche a River hablar.

Un perfecto trabajando salió de la boca de mis dos amigos y el fuego en respuesta no se hizo esperar, los tres abrimos la puerta del auto y respondimos de frente a los disparos. Deje mi cabeza en blanco y solo me concentre en responder al fuego y eliminar a cada obstáculo delante de mí, controle mis respiración y trate de no ir a ciegas cada vez que jalaba el gatillo, no quería herir a nadie de nuestra gente.

Un pequeño sonido llamo mi atención y también la de Ethan.

—¡Cuidado!—Girito Ethan.

Apenas habíamos tenido el tiempo suficiente para alejarnos del auto cuando este exploto, había quedado lo suficientemente cerca de la explosión para estar totalmente aturdido, no podía orientarme porque un continuo pitido sonaba en mis oídos, cuando me gire el impacto de dos balas me recibió.

Lo último en lo que pude pensar fue en que no le había dicho a Alexa que la amaba.

Alexa

Eran cerca de las dos de la madrugada cuando la casa se volvió una locura, la casa se llenó de hombres que entraron al despacho, parecía como que lo estuvieran preparando para un tipo de quirófano o algo por el estilo. De inmediato me espante. Si les había pasado algo me moriría.

Cuando vi entrar a River mi pecho descanso y corrí a abrazarlo, mi hermano estaba bien estaba aquí sin ningún rasguño, aunque su cara era de piedra cuando lo abrace.

—¿Y Nathan?—Pregunte viendo por encima de su hombro.

A pesar de que habíamos arreglado un poco nuestra situación, que habíamos quedado como amigos, me preocupaba su bienestar más que nada porque estaba enamorada de él y no encontraba sentido a mi vida si él no estaba. Necesitaba comprobar que el estaba bien y que esa sala no era para el.

—Alexa...—Dijo Mi hermano y me le quede viendo unos segundos. Entonces todas las piezas encajaron en mi cabeza, todo cobro sentido ante mis ojos. Pero no pude decirlo en voz alta al contrario me quede callada por mas tiempo del que desearía y mi hermano entendió porque me aferro mas a su cuerpo, pero en realidad fue Ethan el que comenzó a hablar.

—El auto exploto...—Comenzó Ethan de la forma menos sutil que pudo existir en esta vida. Porque de inmediato mil escenarios se plantearon en mi cabeza y ninguno de ellos era bueno y eso me aterraba.

¿Y si Nathan había estado dentro del auto?¿Y si...?

—Logramos salir pero al parecer toda esta emboscada era para Nathan, recibió dos tiro, Matt lo va a operar para sacarle las balas.

A lo lejos vi a Matt, quería correr hacia el exigirle que salvara al hombre del que estaba enamorada, pero no podía, no podía moverme de los brazos de mi hermano, simplemente me había quedado petrificada, no podía perder a Nathan, no podía perderlo así no sin decirle que lo amaba, no sin decirle que era mi vida que lo necesitaba en ella, no sin decirle que éramos el y yo para siempre, que me prometiera un por siempre.

No sin antes decirle que lo amaba.

Las siguientes seis horas fueron las más largas de toda mi vida, todos estábamos reunidos en la estancia. No podía dejar de pensar en todo y a la vez en nada. Nathan, de todos Nathan. Tenía su móvil en mi mano. En la pantalla había una foto que me había tomado mientras dormía. De nuevo todas las lágrimas corrieron por mis ojos. Nathan me había hecho sentir tanto en tan poco tiempo, hacía que mi corazón se acelerara con solo un roce y a pesar de que nuestra historia no era la más linda era intensa. Así éramos nosotros llenos de intensidad.

Matt salió del estudio de mi hermano y todos nos pusimos de pie de inmediato.

—La bala no toco ningún órgano vital, así que esta fuera de peligro con respecto a eso—Dice de inmediato mirándome a mi—Lo que me preocupa es el golpe en la cabeza, llame a uno de mis colegas neurocirujano. Le voy a llevar unas radiografías que le tomamos a Nathan. Pero por el momento todo esta bien. Lo logró.

Y solo así todo el peso de encima de mi se fue.