Aprender a amar

Capitulo 25

El evento ya estaba finalizando, todos los invitados se estaban retirando y la familia de Lali eran uno de esos.

-Lali, ya nos vamos.- aparece Franco, mientras ella charlaba con Mariano y otros colegas.

-Ya?- la morocha estaba obligada a irse con ellos, ya que Franco no había traido su auto y tenia que ir en el de su hermana.- No quiero irme todavía, hubieras traido tu auto- y una de esas discusiones entre hermanos estaba comenzando.

-Mariana, el evento ya finalizo, cuanto tiempo mas te queres quedar?

-Deja Franco, yo la llevo.- habla Mariano.- Te llevo a tu casa, queres?- le pregunta mirando a su novia tan linda.

-Dale.- acepta ella al instante, totalmente embobada con su novio.- El me lleva Franco.- le dice a su hermano, mientras le entrega las llaves de su auto.

El hermano mayor de los Esposito, los miro totalmente dudoso, ya estaba sospechando que entre su hermana y Mariano había algo, pero no quería garantizar nada.

-Okey.- habla Franco.- Buenas noches entonces, ya me voy.

Franco se despide y los colegas que estaban hablando con ellos, también lo hacen y ya no quedaba casi nadie en el salón.

-Te parece si vamos?- le propone ella, ya que no era necesario quedarse mas tiempo mas ahí.

-Si, dale.

Se dirigen al estacionamiento y Mariano como todo caballero que es, le abre la puerta del auto a su querida novia.

-Gracias bombón.- le dice ella y antes de subir le roba un beso.

Mariano sube, después de cerrar la puerta del copiloto y pone en marcha el auto, dirigiéndose a la casa de Mariana.

Llegaron a la casa de Lali (que Mariano no conocía) y esta se ofreció a mostrarle la casa para que la vaya conociendo.

La morocha le mostro casi toda la casa, pero le faltaba la habitación. Se dirigieron hacia ahí y ella ni siquiera se molesto en prender la luz porque sabia lo que se venia.

-Y mi habitación.- dice Lali a ahora su novio que estaba atrás de ella. Se queda parada en frente de la cama, mientras sentía los pasos de Mariano acercándose mas y mas a ella.

Los pasos pararon y la morocha podía sentir la respiración de Mariano pegar en su cuello, su piel se erizo cuando el toco su hombro, para después apartar el pelo que le caía por este. Mariana no decía ni una palabra, solo se dejaba llevar por lo que sentía.

-No tengo sueño todavía.- habla Lali, haciendo el chiste de que iban a ''dormir'' en la cama que se encontraba frente a ellos.

-No vamos a hacer eso.- le dice Mariano, tomando el control.

El morocho coloca su manos en el vientre de Lali y sin mas que decir empieza a dejar besos húmedos en el cuello perfumado de su amada.

La petiza siempre fue gauchita en esto, pero en ocasiones de amor sentía que debía ser mas gauchita de lo que siempre fue.

Toma de la camisa blanca de Mariano y lo obliga a Mariano a acostarse en la cama, mientras ella se subía encima. Sus intimidades se rozaban y eso les hacia sentir mas placer de lo normal, ya varios gemidos salían de sus bocas y demasiada ropa entre ellos, molestaba.

El morocho sin dejar de besar los labios de su amada novia, busca el cierre del vestido plateado y cuando lo encuentra lo baja desesperadamente. Mariana quito la camisa de su novio, casi rompiéndola, abriéndola de par en par de un solo tirón. Desprende su cinturón y quita el pantalón del morocho sin dejar de besarse y acariciarse. Mariano con un simple movimiento hace que Lali que de aprisionada bajo el, sin mas salida.

Se quitan la ropa interior que restaba y finalmente fueron uno, convirtiéndose en la primera noche en la que hicieron el AMOR.

-Te amo Mariana.- le dice el morocho, mirándola a los ojos.- Te amo como nunca ame a nadie.

-Yo también te amo Mariano.- le dice ella, con sus ojos cristalizados, pero sin borrar esa sonrisa de felicidad que le causaba su amado.- Te amo mucho.

El sonríe junto a ella y la besa nuevamente.

Se acuesta en el pecho de Mariano, abrazando su torso, mientras el acariciaba su espalda desnuda y se tapan con las sabanas blancas.

-Que hermosa noche me hiciste pasar.- habla Mariana, mientras hacia ''dibujitos'' en el torso marcado de el.

-Y vos a mi.- la sigue el y deja un beso en su cabeza.- Novia.- agrega, sonriendo.

-Que lindo suena eso..- dice y levanta su cabeza para mirarlo, su felicidad era de otro mundo y la sonrisa no se le borraba de su rostro.

-Sos vos, mi amor.- y le roba un beso de su boca.

-Sabes que estaba pensando..- dice ella y se separa de su novio para apoyar la cabeza contra la pared.

-Que.- dice el, prestándole atención.

-Que ahora que estamos juntos podemos decirle a mi familia y que ya seas parte de ella.

-Mmm.- el morocho no estaba tan convencido de la propuesta de ella.- No te parece un poco pronto?

-Para nada..- le contesta a ella.- Quiero gritarle al mundo que sos el novio mas hermoso del mundo. Entendes que te amo?

-Yo también te amo, chiquita.- le dice el y acaricia la mejilla de su novia.- Y entonces cuando le pensamos decir?

-Este fin de semana, podes?- propone ella.

-Obvio que puedo.

-Bueno, entonces yo organizo todo y te aviso.- dice ella y se sonríen entre si. Eran la pareja (recién formada) mas hermosa que podría existir.

-Dale, ahora durmamos..- le dice el y se vuelven a colocar en la posición que estaban. Se dieron un ultimo beso de buenas noches y el sueño se había hecho presente en ambos.

''Si amas de verdad el tiempo esta en tus manos''