Aprender a amar

Capitulo 42

Los pasos de sus tacos agujas eran lo único que se escuchaba en toda la empresa, las luces estaban todas apagadas y el edificio parecía abandonado por el eterno silencio que había.

Entra a la que era su oficina y se encuentra con todo vació, cierra los ojos por un instante y recuerda todos los momentos vividos con Mariano en esta habitación.

Lagrimas amenazaban a salir, pero ella fue mas fuerte y trato de tranquilizarse.

Su vestido negro era una combinación perfecta con el oscuro de los pasillos, como el oscuro de su corazón.

Mañana ya partía para España y estaba decidida a no volver nunca mas, estaba pensando en comprar una casa y ya instalarse ahí para siempre. Su amorosa familia y amigos le habían hecho una fiesta de despedida, en la que rieron y lloraron, pero entendieron a Mariana en la decisión que tomo.

Ahora le tocaba despedirse de la empresa, la empresa en la que creció y vivió momentos inolvidables.

Va hacia el ultimo piso, en donde solían hacerse las reuniones. Cuando llega puede ver la gran mesa con sus sillas al entorno de ella, acaricio el asiento en donde siempre se sentaba su papa Coco a dar los mejores discursos que vio en su vida, era un hombre muy admirable y eso iba a extrañar de el.

Se acerca hacia los grandes ventanales, que se mantenían abiertos, dejando entrar el viento veranil de la noche de sábado, mira hacia la hermosa ciudad de Buenos Aires y no puede evitar romper en llanto. Iba a extrañar cada pequeña parte de su ciudad natal y lo que contiene ella.

Suspira entrecortado y seca sus lagrimas, después del ultimo sollozo. Ya era tiempo de irse.

Y cuando se esta por ir, se encuentra con la persona menos esperada: Mariano Martinez.

En sus ojos puede notar que esta igual que ella, estaban tristes los dos, aunque Lali pensaba que irse seria lo mejor, pero estaba muy equivocada.

-Que raro verte acá y a esta hora.- habla ella, después de unos segundos, tratando de disimular que había llorado.

-Que raro verte a vos también.

-Este lugar me trae varios recuerdos y quería venir por ultima vez.

-Me entere que te vas a vivir a España.

-Como sabes?

-Franco me invito a tu despedida, pero yo no hubiera aguantado estar ahí.

-Supongo que yo tampoco hubiera aguantado que estés ahí.

-Al igual que yo no aguantaría perderte...- suelta de repente, rompiendo el hielo, Lali lo mira desconcertada.- Porque te vas?

-Yo no me puedo quedar acá y no tenerte a mi lado, prefiero no verte mas y mantener mi cabeza en otro lado.

-Y te pensas que a mi no me pasa lo mismo que vos?

-No, eso es lo que pienso...- dice fríamente.- Desde el día en que yo me tome el avión, desde ese día lo pienso...

-Y porque pensas así?- esta vez las lagrimas de ambos fueron inevitables.

-Porque vos no fuiste a buscarme...- le contesta.- Y eso me dejo mas que claro que ya no querías saber mas nada conmigo.

-Estas confundida La...

-Confundida?

-Si, porque hay una parte que no sabes.

-Ah si? Y cual es la parte que nose?

-Antes de que te vayas vino Peter Lanzani a hablarme, me explico todo lo que yo no deje que vos me explicaras y me hizo comprender que vos me amabas desde el primer día.

-Y entonces?- le pregunta, el baja la cabeza, era muy decepcionante decirle esto.

-Yo fui a buscarte pero el avión ya había despegado...- confiesa Mariano y ella se tapa la boca del asombro, no podía creer lo que estaba escuchando.- No llegue a tiempo.

-No puede ser.

-Te falle.

Los dos se quedan en silencio, Lali estaba muy confundida, no sabia que hacer después de lo que le acaba de decir Mariano y el necesitaba que ella le diga que se iba a quedar e iban a volver a intentarlo.

De pronto su celular suena, interrumpiendo el silencio.

-Hola.- contesta ella.

-Hola Lala, perdón la hora, pero necesitaba decirte que el vuelo de mañana se adelanto y vamos a salir a las nueve de la mañana, si?

-Si, si, no hay problema Marula, a esa hora voy a estar lista.

-Dale, yo te voy a pasar a buscar, que descanses La.

-Vos también.- y corta, volviendo a mirar a Mariano

-Era Maru...- le dice, volviendo a guardar su celular.- Me aviso que el vuelo de mañana se adelanto, así que me tengo que ir para descansar un poco.

Mariano no sabia como reaccionar ante eso, el amor de su vida se estaba yendo y el no hacia nada al respecto.

Pudo emitir palabra cuando ella pasa por su lado, decidida a irse.

-Y pensas irte después de lo que te dije?- le pregunta el.

-Yo no me puedo quedar.- le dice, volteándose, para mirarlo a la cara.

-Porque?- no obtuvo respuestas.- Mariana yo se que fue un error mio no escucharte y dejarme llevar por mis inseguridades, pero después comprendí todo y te fui a buscar, si solo hubiera llegado unos segundos antes todo esto seria diferente. Dame aunque sea una razón por la cual te queres ir, si la tenes, te juro que no te voy a molestar mas...

-Mariano...- lo interrumpe ella, al borde del llanto.

-Y tenes que saber que si te acercas un poco mas a mi, no te voy a dejar ir.