Mi maestro, Mi estudiante.

Capítulo XXVIII

Me sorprendió el echo de que Yamcha estuviera frente a mi.

-¡Hola! ¿Interrumpo algo?-

-Yamcha ¿Qué haces aquí?- preguntó aún sin creer que este aquí

-Veo que si interrumpo-

-De ninguna manera. Mi nombre es...- la oración no fue finalizada a causa de que Yamcha arremetió contra mi primo. Propinandole un golpe en la nariz llegándolo a tirar

-No cabe duda que eres una puta como todas. No sé cómo fuiste capaz de engañarme, pero claro el idiota soy yo por estar contigo- pronunció con rudeza en sus palabras.
Sin esperar a que continuará agarre un vaso y se lo arroje bañándolo con el líquido que contenía esté, seguido de una bofetada de mi parte

-Imbécil, no te permito que te expreses así de Bulma- Pronunció con dificultad Damian colocándose frente a mí -No sé quién te crees y ni me interesa pero de una cosa si te advierto. No te vuelvas acercar a Bulma-Dijo mi primo tomando una servilleta para detener su hemorragia sosteniendo a la vez mi mano para llevarme a fuera del restaurante

-¿Estás bien?- pronunció con dificultad al estar afuera.
Trato de retener mis lágrimas que exigen salir

-Si, gracias... será mejor que llamé a Chester- en unos minutos estábamos en la camioneta con Chester al volante. Chester era el chofer personal de Damian

-¿Se encuentra bien señor?-pregunto el conductor

-Si, no te preocupes...-

-De ninguna manera. Chester, llevanos al hospital- Comento preocupada por el golpe que recibió por parte de Yamcha

-Como diga señorita Bulma-

-No, de ninguna manera. Tú sabes que odió los hospitales- Hablo relajado acompañado de un toque de burla en sus palabras

-Pero...- trate de protestar

-Prima, ¿Estás bien?- Pregunto Damian acariciando mi mano suavemente

-Si... gracias-

-Hemos llegado al hospital- Después de varios minutos rogándole a mi primo, por fin accedió a entrar para que lo revisará un doctor.
Al ingresar en dicha institución fuimos atendidos amablemente por las enfermeras junto con alguno que otro doctor los cuales procedierón a realizarle unos exámenes para verificar que todo estuviera en orden, mientras que esperábamos nos dispusimos a platicar de cosas triviales.

-No olvides el trato-

-No te preocupes, lo cumpliré. Sólo voy a solicitar permiso para faltar una semana-

-Me encantará conocer el lugar. Gracias por el tour...-

-Bueno, ya tengo los exámenes. Para su fortuna joven no fue nada grave y por lo tanto no hay de que preocuparse- Diagnóstico el médico a mi primo

-¿En serio? ¡Muchas Gracias! Doctor- el hombre solo nos sonrió
-No se preocupe señorita, es mi trabajo... sólo le recomendaré que cuide bien de su novio.
Y entonces dice usted ¿Qué se golpeó con un poste cierto?- en ese instante por inercia ambos nos miramos con complicidad como si de una broma de críos se tratase

-Eh, ¡si!- respondí. Mi primo no me quiso imvolucrar en el incidente y por ello invento la fantástica idea de que al caminar chocó con un poste por estar con el celular asunto el cual pienso que no nos creyeron.

-¿Ya me puedo ir?- Preguntó Damian sonriente

-¡Claro! Bueno, yo me retiro. Cuidense muchachos... por cierto, procura no usar el teléfono en las calles cuando vayas caminando- recomendo por último el médico antes de retirarse

-¿Puedes creer que aún nos digan eso?-

-¿Decir Qué?- preguntó desorientada

-El hecho de que nos crean pareja-

-Con una prima tan bonita como yo, es obvio que crean que eres mi novio- Comenté riendo

-Lo mismo yo pensé-

-¿Admites que soy hermosa?-

-No, admito que también soy extremadamente sexy- reímos los dos yendonos del lugar.

De camino a casa Damian y yo pensábamos en una gran historia para que nadie sospechara lo que en verdad sucedió al irse ellos. Así que creímos que inventar un "asalto" y un primo defensor pienso yo, fue la mejor forma de librarnos de una situación bochornosa. Al final de cuentas ya no tendré que protestar para defender nuevamente a Yamcha ya que este fue el final de nuestra relación, adiós al noviazgo de años, meses, días y de horas.
Trataré de enfocarme en la empresa y mis estudios. Intentaré de saltarme el programa estudiantil para encargarme lo antes posible de la empresa y empezar con los negocios de la Capsule Corporation.

-Buen día director. Quisiera solicitar un permiso para faltar una semana-

-Bulma que alegría verte. Y claro que te lo entregaré pero la cuestión es que, te pido que se lo solicites uno a uno a tus profesores para que ellos te otorgen trabajos y no te atraces con tus deberes- Lo difícil no fue pedir el permiso al amigo de mi padre si no lo que vendrá ahora, pensé con un suspiro al salir de la oficina.

Hasta ahora llevo cuatro líneas del tiempo, dos maquetas, ocho resúmenes, leer un libro, once páginas del libro de ecuaciones, tres cuestionarios ¡Estupendo! Ahora solo me falta hablar con un maestro.

-¡Bulma!- Se acercó corriendo Goku junto a Milk

-¿Ah? ¿Qué sucede?-

-Ya te enteraste que vamos a hacer un proyecto en la clase de Vegeta- Dijo atemorizado del proyecto

-¿Qué?- Dije viendo a la novia de mi hermano

-Lo que pasa es que cuando ustedes fueron a ver al director en la clase de Vegeta, pues... El nos dejo un proyecto enorme que si no lo entregamos prácticamente reprobaremos su materia. Por eso el formó los equipos y si uno no cumple todos reprueban- Aclaró

-Pero eso no es justo. Se supone que iba a tomarme una semana libre y ahora no podre- Después de aclararles lo sucedido la noche anterior y lo del tour a mi primo pues sólo me quedaba una cosa por hacer y yo quería evitar. Hablar con Vegeta personalmente.

-Suerte con el Señor gruñón- Comento mi amiga

-Oye Bulma, ¿Recuerdas que te dije del expediente?- Asentí en afirmación iniciando mi caminata para hablar con el socio de la empresa de mi padre. Estaba decidida no me iba a intimidar por él, ni por ningún otro hombre.