Elena salio de la casa dirección a las caballerizas cuando vio algo que llamo su atención, sus ojos se estrecharon observando a una muchacha que lloraba. Y junto a ella, Lorenzo Barquero, que parecía estar furioso. El se alejo de ella dejándola sola, allí de pie como si nada
-¿Estas bien? –Se acerco despacio a la chica y alargo el brazo para tocarla
-Disculpe doña, no quería molestar –limpiándose las lagrimas de las mejillas ella quiso marcharse
-Espera –Elena se interpuso en su camino -¿Qué es lo que te ocurre?
-No es asunto suyo –La chica se puso a la defensiva
-Estas en mis tierras llorando y por lo poco que he podido observar uno de mis trabajadores es el culpable de tus lagrimas –Elena la miro suspicaz –Creo que mi preocupación es natural
-No quiero que se preocupe, todo esta bien –La miro con tristeza y agacho la cabeza
-Te entregaste a Lorenzo Barquero –No fue una pregunta, sino una afirmación. Ella había sentido esa vergüenza, ese temor en el pasado y tambien por uno de los Barquero
-Yo, ¿Cómo? –sin poder controlarse rompió a llorar
-Tranquila muchacha –Elena la abrazo con ternura –No eres la primera y seguro tampoco la ultima a la que un Barquero engaña
-No es eso –Ella sollozo –Estoy embarazada
Elena se aparto mirándola sorprendida, ahora entendía el enfado de Lorenzo Por Dios era un Barquero, jamás se haría cargo de ese niño Esa chica estaba sola, tan sola como ella lo había estado
-¿Cuál es tu nombre? –Le sonrió con dulzura
-Clara –ella frunció el ceño -¿Por qué Señora?
-Bien Clara –Elena la miro decidida –Vas a estar esta tarde a las cuatro en mi hotel, en el restaurante te estará esperando un hombre llamado Roberto. El te conseguirá trabajo en la Capital y arreglara todo para que puedas marcharte cuanto antes ¿Tienes familia?
-Una hermana pequeña –Clara la observaba sorprendida
-Bien pues os iréis juntas –Elena asintió –Cuanto antes te alejes de Lorenzo Barquero mejor
-¿Por qué me ayuda? –Clara negó con la cabeza
-Porque me traes recuerdos –aunque la situación de esta chica era peor, si ella hubiera salido embarazada no sabia que habría sido de su vida –Todo estará bien, tu solo tienes que estar en el hotel
-Gracias –Tomo sus manos con fuerza –Nunca podré pagárselo
-Solo cuida de ti y de ese niño –Elena le sonrió –Eso será el mejor agradecimiento
Elena espero a que la chica se marchara y entonces regreso de nuevo a la casa para hablar con Roberto y pedirle que se encargara de ayudarla. Sin embargo en su camino se encontró con Lorenzo
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La Doña
RomansaEl pequeño Pueblo de Palmer, no era muy grande y menos conocido Nadie podía pensar que alguna persona importante se interesara en el. Pero así sucedió, una mujer, que poco a poco se fue adueñando del pueblo. Los Barquero, los patrones del puebl...
