"Shock". Esa es la única palabra medio agradable que se me viene a la mente mientras miro repetidamente las cuatro páginas a todo color de la revista. Reportaje central presidido por una fotografía mía sentada en un sofá rojo y mirando sonriente y ávida de fama a la cámara.
“Pero, ¿de dónde demonios se han sacado esa foto?, ¿qué clase de persona cree Alex que soy como para soltar este tipo de barrabasadas? O lo que es peor, ¿qué clase de persona es Alex Hunt que cree toda la mierda que se vierten en estas páginas? "
En ellas, se relata una historia propia de telefilme de domingo por la tarde: joven y apuesto actor se enamora perdidamente de la pobre inmigrante española, madre soltera.
Según la " exclusiva", Alex y yo vivimos un idilio desde hace meses, que habíamos mantenido en secreto para no herir a Giselle, pero, debido a mi estado de " buena esperanza" habíamos decidido hacerlo público.
“Embarazada. Yo. Si ellos supieran la horrible verdad..."
Llevo dos horas sentadas en la tapa del inodoro, encerrada en uno de los cubículos del baño. En algún momento paré de llorar para concentrarme en el sentimiento de ira que va ganando terreno en mí, al pensar en las posibles consecuencias que esto puede acarrear.
“Dios, ni siquiera me atrevo a salir de aquí..."
Un ruido sordo de golpes en la puerta me saca de mi ensimismamiento
— ¡Candy! ¡Es Kendra! No puede salir del colegio porque la prensa la ha acorralado— Grita Otto al otro lado de la puerta.
— ¿Pero qué demonios...?— salgo hecha una tromba, sin preocuparme de mi aspecto.
— Está en el despacho del director. ¿Quieres que vaya contigo?— Me pregunta Otto mientras me pasa los pulgares bajo los ojos.
— No...Voy yo — contesto inquieta.
— Cielo, ¿estás bien? Sabes que estamos aquí, ¿verdad? — Me dice un poco antes de que alcance el pomo de la puerta de salida de los baños.
— Sí, Otto. Gracias.
— Nos vemos en casa, ¿sí? Cualquier cosa, llámame.
Subo a mi coche de un salto y me dirijo todo lo rápido que puedo al colegio de mi hija mientras llamo a Basti.
— Basti, ¿estás cerca del colegio de Kendra?
— Pues sí, acabo de llegar a casa, ¿qué pasa? Es por la entrevista esa, ¿no?— reacciona Sebastian en seguida.
— Al parecer la prensa está en la puerta, necesito que vayas allí cuanto antes. Yo estoy en la autopista, voy para allá todo lo rápido que puedo— Contesto.
— Me estoy subiendo al coche. Nos vemos allí. Tranquila, cariño.
Cuelgo mientras siento latir con fuerza mi corazón en el pecho ante la incertidumbre. Mierda. Esta estupidez está empezando a pasar factura a mi entorno. Y encima el idiota pagado de sí mismo sigue creyendo que ha sido cosa mía. Tengo que apagar este jodido incendio como sea.
Durante un segundo, la imagen de Máximo se me pasa por la mente, seguida de un escalofrío.
“Tranquila, Ya no puede acercarse a nosotras"— me repito mentalmente mientras aparto esa última imagen de mi cabeza.
Bajo del coche apenas llego al colegio y cruzo entre la marea de personas que se sitúan frente a la verja metálica. Nada más llegar al portero automático la marea de personas comienza a arremolinarse a mí alrededor. Los flashes me atontan mientras las preguntas comienzan a ser disparadas al mismo ritmo
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3,2,1...Action!!
RomanceAlex Hunt es un joven actor norteamericano. Declarado el hombre más sexy del mundo, tiene fama, dinero, una novia supermodelo...y una adicción a las magdalenas de chocolate. Candela es una joven madre soltera que se establece en Los Ángeles y consig...