Se pasó toda la noche dándole vueltas a lo que había pasado esa noche después de cenar en la cocina. Por más que se comía la cabeza con el asunto, no podía imaginar qué es lo que se le había pasado por la mente a ese hombre para que hubiera hecho eso.
Parecía que aún le quemara el semen sobre su camiseta, lo había notado como si hubiera traspasado la piel, y quería quitarse de la cabeza la imagen de su suegro masturbándose delante de sus narices y corriéndose encima de él.
No sabía por qué lo había hecho, si era por establecer dominancia, porque tenía alguna enfermedad que le hacía tener enajenación mental o que simplemente aquella era una de las pruebas que le había mencionado Derek, pero vaya prueba rara: masturbarse delante del novio de su hija para ver si salía huyendo era algo bastante absurdo.
Estaba decidido a demostrarle a aquel tipo que no era de los que se amedrentaban, y que dijera lo que le dijese iba a seguir con Lily. No era nada parecido a su ex mujer, que se había desvivido para que Stiles estuviera cómodo y feliz.
Aquel hombre estaba decidido a hacerle pasar por un infierno, pero su determinación le empujaba a seguir adelante, a pasar aquel fin de semana de forma que su suegro lo dejara en paz y que pudiera finalmente seguir con su novia.
Quería ducharse, pero tenía miedo de encontrarse con Derek en el camino al baño. No quería vivir con ese miedo, así que esperaría que Lily se despertara para caminar tranquilamente por la casa sin que su suegro le acosara.
***
A pesar de haberse corrido en la camiseta del chaval, sentía que aún seguía estando cachondo. Le gustaría volver a tenerlo delante, y a ver qué tal se manejaba con la boca. Ya que no sabía defenderse con ella, quizás podría sacar la lengua para recibir su polla.
Suspiró deshaciendo la cama. Era de dormir poco, esa era la verdad, pero aún dormiría menos teniendo en mente al chico pálido con lunares. La forma en la que le había mirado mientras se masturbaba... no sabía catalogarlo.
¿Quizás interés? ¿Curiosidad? Del pánico estaba seguro, pero si algo te da miedo no lo miras fijamente sin apartar la vista de aquello... no, Stiles estaba interesado, o simplemente nunca había visto nada de eso.
No sabría interpretar su expresión, pero la dominancia que había ejercido sobre el castaño le había gustado. Aquel chaval había nacido para ser alguien sumiso, dominado.
Sintió escalofríos recorrerle su columna al imaginarse más escenas en las que Stiles predominaba en su mente sin ropa, tan sólo con la boca abierta...
Vale, quizás se estaba obsesionando un poco con que el chico se la chupara, pero la verdad era que tenía unos bonitos labios para ser cerrados con un poco de carne... aunque quizás era que estaba tan en shock que no podía reaccionar, a lo mejor la siguiente vez sí que reaccionaba.
Ya vería.
***
-Stiles, te he hecho el desayuno, ¿bajas? -preguntó Lily asomando la cabeza por la puerta de su habitación. El castaño había dormido fatal, y había estado toda la noche obsesionándose por culpa de aquella paja acabada en su camiseta. Se incorporó a toda prisa.
-Sí... sí, ya bajo.
Su novia se fue, y descubrió avergonzado que se había desnudado durante la noche por el calor que había pasado con sus sueños, y una erección mañanera entre las sábanas. Resopló por el problemilla y se levantó, comenzando a vestirse.
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Daddy-in-law (+18)
Random▶Historia finalizada◀ CONTENIDO HOMOERÓTICO: si no te gustan las historias boyxboy con sexo explícito, no leas. || S T E R E K || Stiles Stilinski y Lily Hale llevaban siendo vecinos desde que nacieron. Residentes en Beacon Hills, ninguno de los do...