14: A otro nivel

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Stiles se quedó a solas en el baño. Le dolía el culo, y tenía pinchazos en toda la columna. Además, sentía cómo el semen que Derek le había dejado dentro empezaba a deslizarse entre sus piernas. Se sonrojó en la soledad de aquella habitación. No es que le hubiera gustado: le había encantado. Un hombre rudo como Derek estaba a otro nivel, una sumisión a la que no estaba habituado lo había dejado completamente hipnotizado.

Notaba el calor de sus mejillas, su corazón golpeteando, el estómago engarrotado de nervios... definitivamente, no sabía si se debía a que seguía afectado por el alcohol, pero había sido el mejor sexo de su vida.


Cerró el grifo cuando vio que el nivel del agua era el suficiente como para que él se metiera en la bañera, por lo que metió los pies. La temperatura era tibia, y suspiró largamente. Se abrió los cachetes, sintiendo la calidez del semen de Derek caer, pero no se retiraba del todo, por lo que con dos dedos empezó a meterlos y sacó los restos de la corrida.

Aquello le estaba dando morbo, verdaderamente el estar lleno del moreno lo excitaba, por lo que jadeó en voz baja cuando terminó de quitarse el semen de su interior. Se sentó en el fondo de la tina y resopló, echando su espalda en ella. Aquel jacuzzi era de otro mundo.


Cuando se relajó un poco, cogió el bote de champú y se lavó el pelo, enjuagándoselo y tomando la esponja de Derek con media sonrisa, disfrutando del tejido contra su piel, que estaba sobreestimulada por el violento roce del moreno mientras follaban.

Se lavó con rapidez, suspirando en voz baja cuando se rozó el trasero y su entrada, muy irritada, y por fin salió de la bañera, poniéndose de pie y envolviéndose en la toalla. Se secó con cuidado y vio que no tenía ropa alguna en aquel baño, y en el cuarto de Derek no encontraba su ropa.


Resopló y se dirigió al piso de abajo con la toalla alrededor de la cintura, yendo hacia la cocina de la casa, viendo la espalda desnuda de Derek, que sólo llevaba ropa interior negra. Tragó saliva, viendo cada uno de los músculos marcándose mientras realizaba un movimiento tan sencillo como remover lo que tenía la sartén, y se quedó hipnotizado con el tatuaje que tenía en el centro de la espalda, casi debajo de la nuca.

Se acercó lentamente, sabiendo que el moreno había oído que estaba allí detrás de él, y tocó su piel, delineando las tres espirales con el dedo índice. Una sonrisa se le dibujó en el rostro al oír el suspiró de su suegro, que al cabo de unos segundos retiró la sartén del fuego, y sirvió sendas raciones de lo que había preparado.


Derek enarcó una ceja cuando se dio la vuelta y lo vio sólo en toalla, con el cabello aún húmedo por la ducha, y sonrió ladinamente, inclinando su boca sobre la clavícula y lamiendo una gota de agua que allí descansaba. Stiles tomó aire y se mordió el labio, sentándose a continuación en uno de los bancos de la cocina.

Comenzaron a comer de sus platos, bastante aliviados de coger energías después de tal sesión de sexo, y disfrutando de las dotes en la cocina de Derek, que era todo un gourmet. El rato del entremés en medio de la noche pasó tranquilamente, en un cómodo silencio, hasta que Derek lo interrumpió carraspeando levemente.


-Lily y tú os volvéis el lunes -comentó limpiándose la comisura de la boca con una servilleta. Stiles negó con la cabeza y tragó el bocado que tenía en la boca.

-No, nos vamos el domingo.

-Te estoy diciendo que no. He hablado con ella y le he dicho que el domingo nos vamos con un amigo mío a pescar.

-Y no existe tal amigo, ¿verdad? -repuso el castaño enarcando una ceja.

-Oh sí, claro que existe. Lo que pasa es que he obviado la segunda parte. Mañana al final almorzáis en casa, y por la tarde, tú y yo nos iremos al lago que hay en las afueras. Mi amigo Peter tiene un barco, y le he dicho a Lily que iremos a tomar cervezas los tres, y el domingo pescaremos y volveremos por la noche. No le he contado que Peter también tiene a alguien como yo te tengo a ti.

-¿A qué te refieres?

-Un "jovencito" -comentó haciendo las comillas con media sonrisa-. Pero Peter está casado, así que lo ve a lo mejor un rato a la semana, así que esta es la excusa perfecta. Iremos los cuatro al lago a "pescar".

-No sé si quiero que follemos y justo en el cuarto de al lado estén los otros también...

-¿En el cuarto de al lado? -preguntó Derek confuso, riéndose a continuación-. Qué va, qué va. Te he dicho que mis fantasías están a otro nivel.

-¿En la misma habitación?

-¿No quieres? -dijo con sorpresa el moreno, como si le chocara que Stiles no fuera igual de pervertido que él.


No lo era, pero iba a la zaga. Se imaginó la escena unos segundos en la mente: dos desconocidos follando frente a ellos, mientras que Derek se lo hacía aún más rudo que aquella noche... Apretó los labios, frunció el ceño y luego puso morritos, esbozando luego una sonrisa al ver lo atractiva que le parecía la idea.

Definitivamente estaba perdiendo el juicio.


-¿Y bien?

-Está bien. Pero nada raro -exigió Stiles frunciendo el ceño. Derek lo miró divertido, y soltó una pequeña risa.

-¿Nada raro? Vas a follar delante de dos desconocidos, Stiles. Eso ya es raro para cualquier persona normal, pero me alegro que tú ya lo consideres normal. Visto lo visto, poco a poco te estás convirtiendo en alguien como yo.


Derek se levantó, tomando ambos platos de haber comido y fregándolos, apoyándose luego en la mesa donde seguía Stiles sentado, jugueteando con sus dedos.


-¿Nos vamos a dormir un rato?


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Agradeced la idea de lo del lago a toro_c8 y a su mente tan enferma (bueno quizás más jjjj) como la mía. Espero que os haya gustado el capítulo.

Siento haber tardado en actualizar, pero estoy centrándome en dejar de reserva varios capítulos porque a final de mes no sé si podré escribir como ahora mismo, así que estoy escribiendo como loca para cuando eso pase os deje sin capítulo mucho tiempo.

Votad y comentad, y gracias por leer <3

Daddy-in-law (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora