I N E V I T A B L E CAPITULO: O27.

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NARRA JOE
Pase junto a Ally una tarde maravillosa, no tenía dudas de que pelearía por ella, tenía razón, era muy pronto para hablar de amor, pero si de amar se trataba estaba dispuesto a todo, era la única persona que me había hecho sentir tanto y en tan poco tiempo, era increíble lo bien que se sentía su compañía...
Al caer la tarde Holly y yo la dejamos nuevamente en su departamento y luego fuimos rumbo a la casa de Nicholas, dado a que la pequeña niña que convivía conmigo deseaba con todas sus fuerzas visitarlo.
-¡Estuvo increíble! Jugué con unos niños y trepamos un enorme árbol... - Holly contaba lo ocurrido durante el almuerzo una vez que llegamos a la casa de mi hermano menor -
-¿en serio? - Nick rió observándola fijamente, ella se encontraba sentada en su regazo - tuviste cuidado de no caer, ¿verdad?
-sí, siempre tengo... y joe se quedo con Allyson adentro, creo que ellos dos son novios. - dijo con seguridad -
-no somos... - respondí dejando de leer aquella revista - todavía.
-luego hablaremos de eso hermano - Nick arqueo una ceja y continuó jugando con su sobrina -
Ellos juntos mostraban la mayor química existente, se reían, se hacían bromas y simples chistes que solo entre ellos conocían, logré comprender ahí lo importante que era esa niña para mi hermano y también comprendí que ella sería más feliz con el que conmigo, tal vez el debió ser su padre, no yo, hubiese sido lo más lógico.
Al caer la noche Holly se quedo dormida sobre el sillón, mientras Nick le contaba una historia, de esas cuando todos éramos solo niños, yo me hacia el ocupado para no entrometerme, simulaba leer o responder correos en la notebook, pero en realidad escuchaba todo y así como escuchaba recordaba detalles de la infancia que se habían borrado de mi mente con el correr de los años.
-hermano, creo que será mejor que me vaya, Agatha ira a verme y... sabes cómo es, se enojara si no estoy ¿te quedas con ella? - señale a la niña que dormía plácidamente en el sofá -
-no hermano, tienes que presentársela a Agatha, sabes que reaccionara mal si no se lo dices...
-se lo diré, pero... si no lo toma bien, entonces - me interrumpió -
-si ella te quiere, te acepta tal cual eres y con todo lo que implicas... holly ya es parte de tu vida.
-hermano, tu complicas mi vida ¿Cómo me la llevo? Esta dormida... - me cruce de brazos frente a ella -
-solo cárgala hasta el auto - me respondió con naturalidad -
-¿y si se cae?
-no busques excusas, te la llevaras y punto.
Mi hermano no daba nunca el brazo a torcer, no pude convencerlo y termine conduciendo hacia casa con Holly dormida en el asiento trasero, temía que se callera o que al pasar un bache fuerte despertara, esperaba llegar a casa con ella aun dormida, si la dejaba en su habitación tal vez Agatha ni la notara, sería lo mejor por ahora, ya tenía mucho problemas y verdaderamente no quería ganarme otros nuevos.
Saque a holly del auto cargándola con cuidado y algo de inseguridad, temía tropezar o algo por el estilo y terminar haciéndole daño, ella se aferro a mi cuello mientras buscaba las llaves para abrir la puerta, no pude evitar sentirme extraño, era una terrible sensación y un gusto amargo que sabia a culpa, remordimiento... no dejaba de cuestionarme como hubiese sido la vida si mi decisión hubiese sido otra...

La deje durmiendo en la cama, la cubrí con la colcha y luego de apagar la luz baje a recibir a mi novia que se encontraba tocando el timbre.
-Joey, corazón... - sujeto el cuello de mi camisa acercándose para darme un beso -
-Agh, ¿Cómo estás? - le respondí intentando apartarme -
-extrañándote - me besa - extrañando tus besos, tus caricias - sus labios rozaban los míos con sensualidad -
-yo también te extrañe - sujete su mano - ven, ¿Por qué no entramos? - hice que se sentara en uno de los sillones de la sala -
-¿Qué pasa joey? Estas raro... - pregunto extrañada -
-sí, es que. - tome aire, no tenía idea de cómo comenzar esto - no me siento bien, estoy algo enfermo, ¿Sabes?
-oh - se levanto para sentarse a mi lado - creo que se cómo ayudarte - sujeto mi nuca con firmeza para besarme, pero me aparte sutilmente -
-no, es que, en serio, no quiero... no estoy bien - me levante - no creo que sea buena idea hoy, ¿sabes? Preferiría estar un rato solo...
-pero casi ni tenemos tiempo de vernos, joey... - sujeto mi mano - extraño tenerte conmigo, es duro vivir casi al otro lado de la ciudad y decidir venir a verte al menos los fines de semana sin que tu quieras recibirme...
-lo siento, en serio... no sé si me entiendes, tengo muchas cosas en la cabeza ahora y... necesito descansar un poco ¿De acuerdo?
-te entiendo, bebe... - dijo al fin resignada - entonces cuéntame que te tiene así...

InevitableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora