Everything You've Come to Expect [Alex Turner, TLSP, AM] COMPLETA

Epílogo. Everything You've Come To Expect

¿Alguna vez te has preguntado qué hechos tuvieron que ocurrir simultáneamente para que conozcas a alguien? Si algo cambia, todo cambia...

ALEX:

–Miles, iré a desayunar algo y luego te veré en tu departamento ¿está bien?

–Está bien, Alex. Nos vemos más tarde –colgó

Entré a una pastelería, en el centro de Londres, por suerte, estaba pasando desapercibido. Me acerqué al mostrador y vi lo que había. Nada me apetecía... Estaba a punto de salir. Sin embargo, ella llamó mi atención, una chica, que tenía unos ojos preciosos y una sonrisa hermosa. Me acerqué a una de las mesas, y tomé cualquier cosa, me formé para pagar para verla más cerca.

– ¿Podría tener una de esas galletas de fantasma también? –dije

–Seguro –sonrió

– ¿Hace mucho que trabajas aquí? –traté de entablar una conversación

–Algún par de meses, llegué a Londres hace no mucho. Disculpa, mi inglés no es muy bueno.

–El mío tampoco –reí–. Tienes unos 'hermosos colores' en los ojos. ¿Son pupilentes?

–Muchas gracias... y no, en realidad padezco heterocromía sectorial... ¿Sabes? Pensé que serías más... digamos, no sé, no quiero ofenderte.

– ¿Engreído? ¿Arrogante? –hice una pausa.

Significaba que ella sabía quién era. Todos pensaban lo mismo.

–Entonces... ¿me conoces? ¿Sabes quién soy? –continúe

– ¿Quién no lo haría aquí en Londres?

–Aún hay sitios tranquilos ¿sabes? Creí que estaba pasando inadvertido.

–Bueno, si comenzaba a gritar como cualquier fan girl, te alejarías rápidamente; y estamos en el centro de la ciudad, así que probablemente el simple hecho de pedirte una foto haría que todos vinieran en tu búsqueda... Al menos así tengo una oportunidad...

Ella me miraba con interés. Quería conocerme igual que yo a ella, parecía un niño pequeño, emocionado y nervioso.

– ¿Una oportunidad para qué? –estaba desesperado por saberlo

– ¿Sería mucho pedir un autógrafo?

Hice una mueca ¿en serio eso era todo? ¿Su interés en mí era como famoso?

–Lo lamento, no quise incomodar, aquí está tu cambio. Ten un lindo día

Reí, estaba nervioso, no quería parecer excesivamente interesado en ella, pero lo estaba.

–Eres muy agradable­ –dije tomando el recibo–. Supongo que no te molesta que te firme en el ticket ¿verdad?
¿Tienes un bolígrafo?

–Por supuesto –me dio el bolígrafo–. Muchas gracias, Alex –dijo sonriendo de una manera hermosa

Tomé la pequeña hoja y escribí mi número en ella.

­–Aquí tienes

–Muchas gracias –dijo

–Quédate con el vuelto... hmmm ¿Cuál es tu nombre?

–Adriana

–Muy bien Adriana, fue un gusto, hasta pronto –extendió su mano.

–Adiós, Alex ­–sonrió.

También sonreí, esperaba que abriera el papel y tuviera la reacción que deseaba ver en ella. Pero no lo hizo... Lo sostuvo en su mano, pero no lo reviso. Estaba nervioso... La moneda estaba en el aire y tendría que esperar, algo me decía que valía la pena esperar por ella. Salí y la miré de nuevo desde el aparador, era hermosa. Sus ojos y su sonrisa me hipnotizaban, me hacían sentirme como hace mucho no me sentía...

– ¿Llamarás? –murmuré mientras continúe por la calle, alejándome de esa tienda...

 
Recordé ese día mientras la miraba caminar vestida con una tela de seda color uva que encajaba perfecto con su piel, el sol veraniego bañaba su hermosa figura, sus pies se hundían ligeramente en la arena y ella caminaba descalza, pero con seguridad junto al mar de reflejos verdes que combinaban con sus ojos.
El aire costero voló su cabello detrás de su cabeza, mientras caminaba hacia mí hablando y sonriendo. No le prestaba atención. Su imagen era perfecta y no quería romper mi visión.

–Mi amor ¿te interrumpo?

–Perdón hermosa... Te observaba y no escuché lo que dijiste

–Estaba diciendo que sigues mirándome así, no te desharas de mí fácilmente

–Es lo que pretendo... Ven aquí, mi amor

– ¿Algún día te imaginaste que estaríamos aquí? –suspiró sentándose a mi lado

–Sí, muchas veces

– ¿En serio?

–Sí, te imaginé siendo mía, muchas noches en las que no estuviste conmigo

–Fueron muchas... Pero eso quedó atrás

–Estuve pensando en lo que dijiste, sobre que nuestra vida va a repetirse

–Es sólo una posibilidad...

–Ahora que te tengo aquí, deseo que sea verdad, la posibilidad de amarte en un espiral sin fin...

– ¿Y si no sucede?

–Sucederá... Pero en caso de que me equivoque... Te amaré con mucha intensidad lo que quede de esta única vida

–Siempre estoy en desventaja contra ti, Alex... No puedo ni quiero dejar de amarte

– ¿Sabes algo? Esperé por ti desde el momento que salí de la tienda, esperando que llamarás esa misma noche... Podría esperar por ti siempre

Ella me miró y sonrió con algo de melancolía en su mirada.

– ¿Esperabas que llamara? –expresó con sorpresa

–Esperaba que pudieras ser mía de todas las maneras posibles...

–Bueno... Me tienes

–Y no pienso dejarte ir nunca más

–Yo te seguiré siempre, te lo juró... Si tú esperas por mí, yo siempre te buscaré...

Nos dimos un dulce beso y la sujeté entre mis brazos. Lo pensé fugazmente ese primer día, aunque era una locura en ese momento. Pero ahora, todo era realidad. Sí, valía la pena esperar por ella...
Ella era todo lo que había llegado a esperar...

❤Fin