Delirium |Zayn|

15

Vero mueve sus labios y hace gestos en su relato, pero soy ignorante de lo que me dice ya que no la estoy escuchando. La culpa de besarme con el chico que le gusta y de paso haberle sido infiel a Mathew no me deja enfocarme. Había decidido confesarle lo que sucedió horas atrás en mi habitación pero sabía que no me lo perdonaría y perdería para siempre su amistad. Quiero llorar y retroceder el tiempo para no cometer semejante estupidez.

―Ey Mandy... ¿me escuchas? ―sacudo la cabeza y asiento― ¿estás bien?

―Sólo estoy cansada, no te preocupes ―le dibujo una sonrisa y no queda muy convencida pero deja el tema.

La campana suena y dejamos la cafetería para recoger nuestras cosas e irnos. Hoy salimos más temprano debido a que la maestra Rosalía se enfermó y ella nos da la clase de última hora.

― ¿Mathew te llevará a casa? ―Vero pregunta.

―Sí, así que nos vemos mañana ―me despido de ella y observo cómo se aleja en su coche.

Camino hacía una banca vacía y espero a que mi novio salga de clases. Me coloco los audífonos y selecciono la opción aleatoria de mi celular. Cómo si el destino me quisiera decir algo empieza la tonada de "I'm not the only one" de Sam Smith. Una lágrima resbala de mi mejilla y me la limpio con la manga de mi abrigo.

Debo ser valiente y confesarle la verdad a Mathew, pero... no me lo va a perdonar aunque le diga lo arrepentida que me siento y que no volverá a ocurrir. Sé que se lo diría a mis padres y ellos estarían decepcionados de mí.

―Necesito una señal de que es lo que debo hacer ―susurro viendo el suelo.

Tan pronto digo eso, el motor de una moto se escucha y observo cómo se estaciona alado de una camioneta. El conductor se quita el casco y es Zayn quién acaba de llegar. Mi corazón se detiene y sonríe en dirección a mí al verme, con el casco en mano se acerca y toma asiento a mi lado.

―Hey ―saluda con normalidad― ¿cómo estuvo la escuela?

Juego con mis dedos e ignoro su compañía. Miro la hora y faltan escasos minutos para que salga Mathew.

―Mandy, ¿Estás molesta conmigo? ¿Hice algo? ―me giro para enfrentarlo y él tiene el entrecejo fruncido. Revira los ojos y sonríe― ¿es por el beso, no?

Me ruborizo y desvío la mirada hacía cualquier lugar. Escucho como carcajea y dice mi nombre varías veces.

―Si es lo que te preocupa, te digo de una vez que sólo fue un beso. Nada más, no te mortifiques, no es tan grave cómo tener sexo preciosa ―picotea mi mejilla y se aleja al ver a todos salir.

No sé cuál es el sentimiento que me invade después de eso, enojo, tristeza o alivio. Es una mezcla extraña de los tres y no me gusta en lo absoluto. Entiendo que él sólo lo haya visto cómo una unión de labios y saliva pero... yo tenía más que perder que él, teniendo en cuenta que Vero está perdida por Zayn y Mathew tan enfocado en nuestra relación, demonios me siento peor que antes.

(...)

Mis padres, yo y Mathew estamos sentados en la mesa cenando, él acepto la insistente invitación de mi madre a pasar la noche con nosotros. Doy un bocado a la pasta y escucho lo que conversan, que es mayormente sobre el excesivo trabajo del señor Collins y las lecciones de costura que está tomando su mamá por las tardes.

―Tiene bastante tiempo que no pasas un día con nosotros muchacho ―mi papá palmea su espalda, un saludo de hombre o algo por el estilo― ¿harás algo este fin?

―Le comenté a Mandy que el domingo hay un almuerzo en casa de mis padres, ¿les gustaría asistir?

Ruego por que digan que están ocupados pero nunca niegan una invitación a los Collins, así que aceptan encantados.

El resto de la cena transcurre sin novedad y ya es hora de que mi novio se retire. Se despide de mis padres con educación y atrapa mi mano para llevarme a la puerta de mi casa, una vez fuera soy atacada por sus labios que me besan con brusquedad y desesperación. Sus brazos envuelven mi cintura y yo jugueteo con su cabello.

―Extrañaba besarte así ―pega su frente con la mía y besa mi nariz― sé que he estado distante pero la escuela me tiene así, ¿comprendes? Pronto me tendrás de regreso princesa.

―Eso espero ―lo abrazo y apoyo mi cabeza en su pecho.

Deja un beso casto en mi frente y se monta en el coche, para así acelerar y perderse al final del camino.

Entro de nuevo a casa y voy directo a mi habitación para prepararme para dormir, sin embargo, suena mi teléfono y es un whatsapp el que me ha llegado. Abro el mensaje y es zayn.

"¿Vendrás a la noche de películas el sábado?"

"Te equivocaste de persona lol"

Rápido aparece el escribiendo y llega el mensaje.

"No me equivoque de persona, mi mamá me comentó que te invitó pero no le has dado respuesta ;) "

Me golpeo mentalmente y ahora lo recuerdo. No quiero ser grosera e inventarle cualquier excusa para no asistir. Atrapo mi labio y escribo la respuesta.

"Dile que estaré encantada de ir, llegaré a las ocho de la noche. Descansa Zayn"

No espero respuesta y guardo el celular en mi bolso.

(...)

El fin de semana ha llegado más rápido de lo esperado y Vero ya estaba en mi habitación preparándose para la pijamada que organizamos cada viernes después de la escuela. Aún son las once y media, relativamente temprano para unas adolescentes.

― ¿Te invitaron al cumpleaños de Nancy? ―dice Vero estando de pie en mi cama. Un día de estos se dará un azote en el trasero que no podré con la risa.

―Sí, pero es mañana y estaré ocupada.

― ¿Así? ―se sienta y eleva su ceja― no me digas, ¿tiene que ver con Mathew?

La culpa de conciencia pesa sobre mis hombros y decido decirle la verdad, digo, no tiene nada de malo que vaya a ver películas en casa del chico que le gusta.

―Pues... tiene que ver con mi vecina de enfrente, la mamá de Zayn ―enfoca toda su atención en mi y su rostro ahora es serio― me invitó a ver películas en su casa.

―ah ya veo. ¿Irás aún con la advertencia de tus padres? ―golpea mi hombro― ya te estás convirtiendo en toda una rebelde.

Sonríe de oreja a oreja y no ha mal pensado la situación, me alegra y eso me dice que confía en mí.

Saco la bolsa de palomitas que están debajo de mi cama y algunas latas de soda, decidimos sabiamente que nada de alcohol está noche, quedamos escamadas desde la última vez. Reproducimos la película "27 bodas" desde Netflix y el resto es historia.