Creo en ti ||gemeliers||

Capítulo treinta y cinco.

Valeria.

Cuando mi hermano llegó a la habitación nos fuimos los tres a la piscina, hasta ahora que son las dos y media. Mis padres están trabajando por lo que estamos solos.

-¿Por qué no pedimos una pizza y comemos? - dice mi hermano y Jesús asiente tocándose la tripa.

-Oh podemos ir a comprar una y ir a buscar a Daniel, que por cierto ¿Dónde esta?

-Creo que en casa - dice Jesús.

-Pues vamos a ducharnos rápido y vamos a comprar la pizza - digo entrando en casa.

Nos duchamos rápido y nos ponemos algo comodo. Después cojo el coche y vamos hasta una pizzeria y compramos dos pizzas, después vamos a casa de los gemelos.

-¿Están tus padres? - le pregunto a Jesús mientras bajamos del coche, niega y me dice que están en casa de sus abuelos comiendo - vale - cojo una pizza y tras cerrar el maletero entramos en su casa.

-Voy a dejar las pizzas en la cocina - dice Jesús cogiendo las pizzas.

-Yo voy a buscar a Daniel - digo yendo al piso de arriba - ¡Danielo, hemos traido comida! - digo gritando.

Miro por todas partes y no esta, por último miro en la habitación de sus padres y madre mia, mejor no haber abierto la puerta.

-Ostia puta - digo cerrándola rápidamente.

Me tapo la boca de la vergüenza que tengo ahora mismo y me empiezo a descojonar en silencio.

-¿Pero quien se cree esta chica que es? ¡No me jodas! - oigo a Nerea dentro.

Bajo las escaleras a toda prisa y me siento en el sofa con mi hermano y Jesús.

-Estaban en plena acción - digo riéndome - que asco, por dios.

Segundos más tarde Nerea pasa al comedor y se me encara.

-¿Quién coño te crees que eres para entrar así? ¡Ni que fuera tu casa! - dice cabreada.

-Pues mira te iba a decir que lo sentía, pero te jodes tía, cuando tengas respeto me hablas - le digo levantándome del sofa.

-¿Respeto? Me tienes hasta los cojones, ¿por qué no dejas a mi novio de una puta vez?

-Mira rica - dice mi hermano levantándose del sofa - esos humos que gastas te los vas quitando, a mi hermana la hablas bien ¿vale? - dice con una sonrisa sarcástica - y ¿por qué no le dices eso a tu novio? ¿tienes miedo de que te deje?

-Bueno, Nerea es hora de que te vayas - dice Jesús - otro dia quedais.

-Osea que me echais de aquí, joder, perfecto, nosotros que somos amigos de toda la vida, y llegan estos - nos señala - y perdeis el culo.

-Nerea vete a la mierda - digo cabreada al borde de cogerla por los pelos.

-Pero - dice riéndose - ¿de que vas calva de mierda?

Oh no, cariño, la has cagado pero bien.

Me lanzo a ella y la cojo por el pelo mientras me cuelgo de ella.

-¡Val dejala es subnormal! - dice mi hermano cogiéndome por la cintura.

-¡No, déjame que yo a esta la mato! - digo tirando de su pelo con más fuerza.

Jesús coge a Nerea y logra separarnos.

-¡Val, ¿pero que haces?! - dice Daniel asomándose por la puerta del comedor.

-Dejame Antonio - le pido.

Me suelta y me coloco toda la ropa.

-Jesús nos vemos mañana - le digo.