Capitulo 2

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Capítulo 2.

Las palabras de Ignazio sorprendieron muchísimo a su padre que no podía creer lo que escuchaba, ¡Sí aceptaba volver a estudiar con esa simple condición! Eso era lo mejor que el señor Boschetto había escuchado pero no significaba que la actitud de su hijo no le extrañara mucho.
¿Por qué me pides trabajo para Víctor? ¡No! Mejor pregunta aún... ¿Por qué Víctor quiere trabajar? Disculpa lo que te voy a decir hijo pero él es peor que tú - Fue la reacción muy bien fundamentada de su padre, ¡Víctor era mucho más holgazán que Ignazio! -
¡Padre! Nunca es tarde para... tomar el buen camino, ¡Sólo dale trabajo aquí en la juguetería! Él la ama - Seguía insistiendo Ignazio -
¡Él la amaba cuando desde los 0 a 10 años venía cada vez que quería a tomar todos los juguetes que se le antojaban! Después le interesaron las chicas y no volvió por aquí - Exclamó su padre firmando unos documentos que tenía en su escritorio -
¡Bueno sí! Pero ahora necesita trabajar y...
¿Necesita trabajar? Ignazio tanto él como tú no necesitan trabajar pero igual los vamos a obligar el padre de Víctor y yo, ahora vete hijo que tengo mucho trabajo - Dijo el señor Boschetto despidiendo a su testarudo hijo -
¡Por favor! Dale trabajo - Continuaba Ignazio poniendo carita de cachorro, ¡Ésa cara nunca falla! -
¿Pero por qué justo aquí en la juguetería? Bien podría pedirle trabajo a su propio padre en una de sus empresas - La verdad el señor Boschetto no entendía nada de nada -
¡Él... no quiere que lo traten como el hijo del jefe y definitivamente eso pasaría! - Buen argumento Ignazio pero aún no convence a su padre -
¡Eso jamás pasaría! Ni a él ni a ti los conocen los empleados pero ya para que me dejes trabajar en paz dile a Víctor que lo espero mañana temprano - La razón era simple, ¡Ya no soportaba las molestias de Ignazio! Y además... ¿qué tan malo sería? -
¡Gracias padre! - Exclamó Ignazio sonriendo como nunca y saliendo directamente a tratar de convencer a su amigo "el verdadero Víctor Pérez" ¿Aceptará? -
¡Ni loco que te pasa! Tu viaje a las playas de Cancún afectaron tu cerebro o no ya sé... ¡Tragaste agua de mar! ¡Te pasaste con el bronceado! - Decía Víctor que no entendía nada de lo que Ignazio le decía -
¡No! Primero Cancún es un hermoso lugar ¡un paraíso! Segundo, es muy importante para mí que me apoyes en esto - Decía Ignazio juntando las manos como súplica -
¡No quiero ir a trabajar a la juguetería! - Le decía Víctor con cara de afligido y con mucha razón -
¡No irías a trabajar a la juguetería! Sería yo, ¡Sólo me prestarías tu nombre! - Aclaraba Ignazio la situación que le había explicado una y otra vez a su amigo -
¿Por qué haces esto? ¿Qué necesidad? ¡Te llevarán preso por robo de identidad! ¡Y a mí por encubrirte! - Dijo Víctor muy estresado, su amigo lo ponía en problemas increíbles -
¡No pasará nada! Además...
¡Además qué Ignazio! No necesitas trabajar, ¿Y si alguien te reconoce? - Continuaba Víctor negándose rotundamente a la idea de Ignazio -
¡Nadie me conoce en la juguetería! Sólo la secretaria y siempre está arriba en la oficina de papá, los empleados solo saben que el dueño tiene un hijo pero nadie me conoce, yo iba muy pequeño y seguro nadie me recuerda ¡He cambiado! No me reconocerían si queda algún empleado que me vio de pequeño aunque lo dudo, ¡Todos son nuevos! - Trataba de calmar y convencer a Víctor, ¡Ya casi lo lograba! -
¡Digamos que acepto tu juego! En todo caso ¿Por qué lo haces? ¿Cuál es tu objetivo? - Buena pregunta la de Víctor, ¡Responde Ignazio! -
¡El objetivo es ella! ________ es... diferente... además no me reconoció quiero saber si puedo hacer amigos como alguien normal, sin que sepan quién soy, si soy agradable, si puedo ser una persona que todos amen por quién es no por lo que tiene - Las razones de Ignazio tocaron el corazón de Víctor que entendía muy bien esas palabras -
¡Es conmovedor pero ella lo sabrá tarde o temprano! ¿Y qué pasará entonces? Además... ¿Y si te enamoras? - Ésa era una pregunta excelente -
¿Qué? ¡No! ¡Sólo estoy jugando! - Respondió Ignazio quitándole importancia al asunto -
¡Ella te ha impactado como nadie lo ha hecho Ignazio! sí es "diferente" la chica debe ser un sol de encanto, ¡Ten cuidado! Le has mentido desde la primera palabra que le dijiste - Víctor tenía razón pero Ignazio no le daba crédito a las palabras de su amigo -
¡No es para tanto! Sólo quiero saber si le caigo bien como alguien normal, no como Ignazio Boschetto hijo del empresario de juguetes más grande de todos y súper ultra millonario - aunque eso no convencía a Víctor comprendió la curiosidad de Ignazio y decidió seguirle el juego -
¡Bien! Si tú lo dices ¡Acepto! Te presto el nombre, voy a ver a tu padre, que me dé el trabajo y bla bla bla bla, pero de una vez te digo... ¡Sí esto se complica seré el primero en decir la verdad! - Dijo Víctor algo serio, la verdad era razonable, Ignazio también lo estaba implicando -
¡Como quieras! Pero no te preocupes, ¡Es un juego nada más! Sólo estoy bromeando, cuando compruebe mi teoría me desaparezco, te devuelvo el nombre, regreso a mi mundo de fiestas y lujos y nada pasó - Dijo Ignazio dándole la mano a su amigo todavía incrédulo del "Majestuoso" plan de Ignazio, él estaba seguro que algo pasaría -
¡Ignazio! ¿Y si la chica se enamora de ti? ¿Desaparecerías igual? ¿Serías capaz de abandonarla? - Preguntó Víctor algo intrigado por la respuesta que su amigo le daría -
¡No voy con la intención de enamorarla! ¡Sólo seremos amigos! Al menos sabré que es mi amiga por mí, no por mi dinero, ¡Nadie se enamorará de nadie Víctor! Es linda pero no es mi tipo - Contestó Ignazio guiñando un ojo y tomando una bebida fresca que le ofrecían, para él todo resultará perfecto, en verdad esperemos que todo salga como él dice y nadie sea lastimado -


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Holaaasss chicass como estan?
Estoy volviendo otra vez con esta novelaa🎉 espero y les guste❤

-Nan

Un Juego... Llamado AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora