capítulo 28

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-¿Sabes que estamos en serios problemas no es así? -habló uno de los cuatro hombres que habían agredido a Emily.

-Obviamente no -resopló Miley y rodó sus ojos.

-Mira, si te llegan a hacer algo, no digas nada de nosotros, tu nós mandaste, es más, nosotros tres ni la conocemos, sólo él -dijo otro hombre y señaló al chico más joven.

-¿Qué importa si la conozco o no? Los cinco estamos en esto ¿Verdad Miley? -preguntó el más joven, de sonrisa encantadora y cejas pobladas.

-¿Pueden callarse? No soy ninguna soplona, si algo llega a pasar solo tendré problemas yo, ustedes no, así que dejen de llorar y lárguense de aquí -dijo Miley fastidiada por los comentarios que aquellos chicos hacían, les aventó un sobre lleno de dinero a cada uno y los cuatro salieron del lugar.

Miley sabe que está en problemas, Harry tiró la puerta de su casa, leyó el mensaje, no podía salvarse de esto.

Emily.

Regresé a casa al día siguiente, como dijo el doctor, no fue nada grave, solo los golpes y el susto.
Le dije a la policía que me habían asaltado, yo no quería meter en problemas a Miley, estamos a punto de entrar a la universidad y no será bueno que llegue con antecedentes criminales ya que muchas universidades no te aceptan si tienes ésta clase de antecedentes. Era mejor no decir nada, después hablaría con ella y sé que todo se va a arreglar.

Pero ¡claro! Harry abrió su linda y perfecta boca, les dijo todo a los oficiales, la policía se molestó conmigo y me pidieron que dijera la verdad o si no Harry se metería en problemas por ser "un chico mentiroso"

No me quedó más remedio que confesarlo todo, les conté de su primera amenaza e incluso les dije que habían pintado mi coche, pero que de eso no estaba muy segura.
Con mi declaración fue suficiente para que la fueran a buscar esa misma noche pero no la encontraron.

Dijeron que Miley se dio a la fuga, pero yo sé que no es una chica tan tonta, primero se ocultará con alguna de sus amigas y después hará una entrada triunfante.

Así que supongo que está con Melanie o Chelsea...

Harry.

Miley se dio a la fuga, en cuanto me enteré de ésta noticia manejé hasta su casa, la puerta seguía igual, no había cambios dentro de su casa así que supongo que ni ha venido en todo el día.

Le llamé tres veces seguidas, volví a llamar y me contestó.

-Miley ¿dónde demonios estás? -pregunté de inmediato.

-Tranquilo, estoy con Chelsea -dijo sin preocupación -Y no, no me estoy dando a la fuga, se que la policía me está buscando.

-¿Cómo lo sabes?

-Tengo mis contactos -respondió coqueta y supe que estaba riendo del otro lado del teléfono.

-Entonces ¿por qué te escondes? Será peor si te resistes

-Solo estoy despidiéndome de mis amigas, sé que serán unos meses en prisión -dijo y me colgó.

Me subí al auto deprisa, avisé a la policía que fueran a mi casa que yo pronto la llevaría.
Manejé en total silencio hasta la casa de Chelsea, eran rumbos un poco solitarios, Chelsea vivía a las afueras de la ciudad. Pasados unos 20 minutos llegué a su casa, las luces estaban encendidas y afuera había dos chicas, la rubia y la de cabello negro.
Me bajé y me acerqué a ellas.

-Te dejo corazón, no olvides visitarme -dijo Miley en cuanto llegué y abrazo a Chelsea.
La agarré del brazo y la hice caminar hacia el auto.

-¿Y los cuatro hombres que la golpearon? -le pregunté serio mientras conducía a mi casa.

Sólo un juego (h.s.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora