Sólo un juego (h.s.)

Capítulo 13

Harry
La cama se sacudía por cada embestida que le daba a Emily.

Joder.

El sexo con ella era realmente bueno.
Sus piernas estaban enrolladas en mi cadera mientras yo estaba sobre ella. Emily gemía de una forma tan placentera que me hacía exitarme más.

-¡Harry! Estoy a punto de... -me dijo al oído.

-Solo aguanta un poco más -le dije mientras que ella para poder aguantar más me mordía el hombro.

Al fin. El momento de éxtasis había llegado, me quede dentro de ella por unos minutos recostado sobre sus pechos y admirando la vista por la ventana y al mismo tiempo oliendo su perfume.

-Todo es tan bueno contigo -dije divertido mientras salía de ella y me quitaba el preservativo.

-Tu haces buenos los momentos -se mordió el labio inferior tan sexy que me daban ganas de comérmela a besos.

-¿Quieres un baño? -pregunté u ella asintió, por lo que tomé su mano y la guié hasta el baño.

Abrí la regadera por las dos llaves para que el agua estuviera templada. Nos metimos en la ducha y tomé a Emily por la cintura pegandola a mi mientras depositaba besos sobre sus hombros.

-Harry, basta -dijo seria.

-¿qué sucede? -la giré para quedar frente a frente aunque a decir verdad yo era más alto que ella por lo que yo tenía que mirar hacia abajo.

-Harry, solo para ¿entiendes? -me dijo en tono grosero.

-Mierda Emily, te acabo de dar el folladon de tu vida y te pones con este carácter de mierda -dije tensando mi mandíbula y apretando mis puños.

Bien Styles, eres un idiota.

-Eres un imbécil -dijo Emily con rabia y sentí mi mejilla arder y punzar, me acababa de abofetear y salió de la ducha.

-Zorra -escupí bajo pero lamentablemente fue lo suficientemente fuerte como para que ella me escuchara. Me maldije por eso.

Me senté en el piso y junté mis rodillas a mi rostro, verdaderamente era un tarado.

Después de quedarme bajo la regadera por poco más de dos horas podría jurar, salí para poder arreglar las cosas con Emily.
Salí y sus cosas no estaban, ay maleta no se encontraba en la habitación, me enrolle la toalla en mi cadera y salí a buscarla por el resto de la cabaña y no estaba por ningún lugar.
Rápidamente tomé mi celular y le marqué.
Una, dos, tres... Siete... Once... Quince veces o más lo intenté y Emily no contestaba.

Me pusé rápidamente ropa y salí a buscarla. No la encontraba, la neblina era densa y no podía ver casi nada. El cielo estaba a punto de iluminarse por los primeros rayos de sol.

¿Qué acababa de hacer?

Regresé a la cabaña y me dediqué a guardar todo y salir en el auto.
Me pusé en marcha. Iba muy lento para ver si podía ver a Emily por la carretera pero no la encontré, le envié varios mensajes de texto y mensajes de voz pero no respondía a ninguno.

Llegué a la ciudad y decidí estacionarse en una cafetería.

Entre y me senté en la barra, pedí un café y unos huevos estrellados. Estaba tan metido en mis pensamientos mientras metía el alimento a mi boca, hasta que me pareció escuchar la risa de Emily. Volteé para buscarla y en definitiva, en el rincón de la cafetería estaba ella y peor fue mi sorpresa al saber que estaba con él.

Emily
Después de lo que me había gritado Harry decidí guardar todas mis cosas e irme de la cabaña.

Eres una ilusa Emily, todo te sale mal... Todo.