Dark Heart

Capítulo VI

Valentina:

"Siempre he temido no saber lo suficiente para sobrevivir en un mundo tan cruel como este." -Little violet.

Los anteriores días he aprendido dos cosas, la primera es que Ian Thompson es una mierda de persona o solo conmigo mejor dicho. No lo entendía, es decir no es que yo le haya hecho algo para caerle mal. Ni siquiera he tenido la oportunidad de fastidiarlo para que lo lleve a tomar la decisión de odiarme, odiaba que ese tema me molestara tanto ¿Qué me importa si le caigo bien o no?, la segunda es que el problema es que me importa... y mucho. Eso es un mierda, pero es más mierda que sus amigos me caigan tan bien, hace apenas unas semanas que los conozco y aunque no son los chicos más dulces del mundo son agradables y fáciles de querer, cada uno tenía su encanto y eran tan diferentes que me preguntaba ¿cómo podían ser tan buenos amigos sin chocarse? pero luego recordada a Nat y a mí y nuestras diferentes personalidades y la respuesta se responde sola. Ellos se complementan.

El día de hoy estaba siendo una mierda, no tenía absolutamente nada que hacer dándole rienda suelta a mis pensamientos, no quería pensar pero desde hace unas semanas unos ojos azules no salen de mi mente, no puedo dejar de preguntarme por qué me odia o porque simplemente no le caigo bien. Por más vueltas que le dé no logro obtener respuestas y es que una persona no podía odiar a alguien sin razón aparente ¿no? me levante de mi cama frustrada y empecé a arreglar mi habitación como por quinta vez en el día mantenía mi mente vacía y eso era más que suficiente para mí. Luego de que mi habitación y toda mi casa este brillante le envié un texto a Natasha preguntándole si podíamos tomar un café, no tuve respuesta por lo que especule que aún estaba en la universidad.

Estar sola en casa era una total mierda y así tenia tanto de que pensar, aquellos pensamientos que tenía guardados bajo llave salen a la luz atormentándome, y no puedo hacer nada para remediarlo. Luego de dar vueltas por mi casa me dirigí a mi habitación y me acurruque en mi cama no sin antes ponerle seguro a la puerta, luchaba por mantener mis ojos abiertos pues quería reservar las pesadillas solo para la madrugada donde me era inevitable mantenerme despierta, sería una mierda tener dos veces en un día aquellas pesadillas. No lo soportaría.

Aporreos en la puerta me despiertan de mi asqueroso sueño lo cual agradezco aunque sé que lo que sigue será aún más desagradable.

Mi padrastro el hombre que se pasaba la mayoría del tiempo gastando el poco dinero que traía mamá a la casa en un viejo bar gastando todo el dinero en alcohol, era aterrador vivir con él, cuando bebía se ponía agresivo lo que resultaba en gritos y golpes para mi madre que se comporta como una total estúpida sumisa que se deja golpear y gritar, la última vez que me intente interponer termine en la casa de Nat con un moretón en la mejilla derecha aquello me afecto de tal forma que desde ese día no dejo de tener pesadillas.

Los aporreos en la puerta no se detenían y yo estaba maquinando un plan para salir de aquí, veo la hora en mi celular 12:50 de la madrugada. Generalmente esto sucedía cuando mi mama no estaba, cuando tenía que tomar turnos dobles que últimamente era cada vez más seguido, sabía lo que seguía. Tenía que irme la última vez que esto paso rompió la puerta y estaba aún más furioso lo que hizo que sus golpes fueran más fuertes de lo habitual y yo estuviera más traumada.

Pero ¿Cómo rayos iba a salir de aquí?, el apartamento se encontraba en un tercer piso y ni de broma iba a saltar no quería que él me golpeara pero tampoco quería suicidarme; los aporreos eran cada vez  más fuertes agrietando la cerradura de la puerta. Sabia que tenia  que actuar rápido.

Así que hago lo primero que se me ocurre entro al armario que aunque no tiene mucha ropa es un buen lugar para esconderse, solo espero que este lo suficientemente borracho como para irse a su estúpido bar y dejarme tranquila.

La puerta estalla y sé que ya está dentro de la habitación mientras yo me siento y me pongo en posición fetal,  mi cuerpo tiembla sin control y creo que mi corazón se puede salir de mi pecho, envuelvo los brazos alrededor de mis costillas, tratando inútilmente de dejar de temblar.

Me siento estúpida y derrotada cuando la puerta del armario sea abre de golpe y el olor a alcohol inunda mis fosas nasales dándome ganas de vomitar.

Por favor, Por favor

-¿Creíste que no te encontraría? ¿Acaso soy un maldito imbécil?

No soy capaz de responder.

Sus manos agarran bruscamente y al instante se que tendré un moretón allí. 

Me tira en el suelo y el impacto hace que me quede sin aliento, ni siquiera me da tiempo a recobrar el aliento cuando uno de sus pies impacta en mis costillas. 

Mi cuerpo se sacudía con sollozos, y respire de alivio cuando abandono mi habitación. 

Trataba desesperadamente de dejar de llorar ya que las sacudidas de mis sollozos hacían que las punzadas de dolor sean mas fuertes e insoportables.

Por favor ya basta... 

...

-Ese maldito desgraciado, ¿Por qué no te vienes a vivir conmigo?

-Sabes muy bien, porque no puedo dejar a mi madre sola, Natasha.

-Te entiendo pero lo único que ganas es que él te golpee y te quite el dinero que ganas para ir a gastarlo a un bar de mala muerte, así que no entiendo que rayos es lo que estas esperando.

-Solo estoy esperando a que mi madre se dé cuenta.- En cuanto las palabras abandonaron mis labios me di cuenta de lo estúpido que sonaba. Casi podía reír.

- ¿PARA QUE?-El grito de Natasha me dejo atónita.- Se lo has dicho un millón de veces y has tratado otros mil millones de veces de convencerla, ¿para que si ella sigue totalmente convencida de que se aman? A veces valentina no puedes proteger a todo el mundo, a veces simplemente tienes que tratar de sobrevivir, porque algún día cuando tu madre entre a la casa después de un turno de medianoche y te encuentre muerta tal vez se dará cuenta de su error o seguirá totalmente convencida, no lose, en realidad lo único que sé es que no podemos esperar a ese momento debemos actuar y tu estúpida vas a venir a vivir conmigo porque no lo soporto más, verte así me duele y mucho a veces no podemos proteger a todos, pero si puedo protegerte ¿por que desaprovecharlo? Solo estoy tratando de actuar antes de la catástrofe.

Después de su pequeño discurso sus ojos están cristalizados y sé que se está imaginando mi muerte, ni siquiera sé que decir. 

No quería causarle dolor a Nat, pero es mi madre y no podía abandonarle, ¿Como explicárselo a Natasha sin que pareciera una completa estúpida o la Madre Teresa de  Calcuta?

Baje la mirada y una lágrima silenciosa se deslizo por mi mejilla, negué lentamente con la cabeza y ella entendió en silencio que nada de lo que ella dijera me iba a hacer cambiar de opinión.