Capítulo 15

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La nave comenzó a aterrizar, nosotros los Autobots nos habíamos levantado de nuestros respectivos asientos y formado frente a la gran compuerta (rodeados de los militares), que se abriría en unos minutos.

Aterrizada la nave por completo, la compuerta de la misma fue abierta, permitiéndonos la salida de ella. Pero antes de yo salir junto a los demás Autobots, Chris me llamó para decirme algo importante.

-Madelein... Mademoon.

-Calma, puedes decirme por mi «primer » nombre. - Le interrumpí, con una leve sonrisa.

-Bien, Made... Puedes estar tranquila ahora, mis hombres y yo nos encargaremos de protegerlos a ti y a los demás Autobots. No te sientas intimidada si algún miembro del gobierno estadounidense, que no sea parte de la BBSA, aparece... Ten en mente que estamos para ayudarlos y protegerlos ahora-. Me explicó. Su voz sonaba gentil, y sus palabras sonaban reales, me alegré mucho de que Chris se hubiera arrepentido de todo lo malo que hizo en el pasado.

-Gracias Chris... De Spark, te lo agradezco.

El militar asintió.

-Ahora, ve con los Autobots. Llévalos a tu base, refugialos-. Me dijo por última vez ese día.

Yo continué sonriendo y procedí a salir de la nave, reuniéndome con los Autobots afuera, observando un escenario que parecía de guerra. Mi anterior base estaba allí, o por lo menos lo que quedaba de ella. El lugar me trajo los recuerdos de cuando los estadounidenses nos atacaron e hirieron a mi «padre», sentí terror de encontrar aún el cuerpo sin vida de él. Caminé hasta el último lugar donde lo vi, no estaba allí, sentí un fuerte dolor en mi Spark que, por reflejo, me hizo colocar mi mano en mi pecho. Si estaba muerto realmente, los militares que quedaron con vida seguramente se lo habían llevado. Los Autobots observaron la zona sorprendidos, pensé incluso que creían que era ese el lugar donde nos refugiaríamos. 

Smokescreen me observó y se acercó a mí, él sabía que yo no estaba del todo bien.

-¿Mady?

Volteé a verle, aún con mi mano en mi pecho y mis ópticos llorosos. Smoke me abrazó de manera consoladora.

-Aquí... aquí fue donde supe todo y... donde mi... padrastro... fue asesinado-. Le expliqué, con mi voz un tanto quebrada por el nudo que sentía en mi garganta. 

No quería mostrarme más débil de lo que realmente era, menos frente a todos los demás Autobots. Por ello, me sequé las lágrimas y me acerqué al grupo de Autobots reunidos a unos metros de mí. Smokescreen me siguió.

-Este... no es el lugar exacto, le dije al comandante Chris que nos trajera a este lugar para no darle las coordenadas exactas de mi base actual- les expliqué-. Hace falta que continuemos por carretera hasta nuestro refugio verdadero.

-Es muy arriesgado aún conducir, Mademoon. Nos rastrearán y ubicarán más rápidamente.- Dijo nuestro líder, notablemente preocupado por todos nosotros.

Le sonreí.

-Respeto mucho su preocupación, Optimus, y le agradezco que también se preocupe por mí. Pero, no fue solo una razón por la que le pedí a Chris que nos trajera a este lugar.

Caminé hasta la ubicación de un contenedor enterrado bajo la base ahora destruida. Aparté los escombros que se encontraban sobre el contenedor, mostrándolo, y lo abrí con facilidad, sacando de allí unos artefactos pequeños. Los Autobots me siguieron y observaban lo que yo hacía. 

-Estos son, los que yo llamo: AR-20. Anti-rastreadores. Estos desvían las ondas que emiten los rastreadores de cualquier tipo. Nos hará pasar desapercibidos en la carretera, hablando desde la perspectiva de los rastreadores, por supuesto. 

Smokescreen sonrió al ver estos artefactos, le encantan este tipo de cosas.

-Se colocan en la parte exterior de sus modos alternos, y no deben preocuparse por si se ven, estas cosas tienen la capacidad de camuflarse en cualquier superficie-. Expliqué.

Entregué un Anti-rastreador a cada Autobot, y mientras observaban el artefacto, Smokescreen me tomó del brazo y me llevó a unos pocos metros más lejos de ellos.

-Mady... debo preguntar ¿Por qué el beso?

Me sorprendí ante su pregunta, había olvidado por completo el beso que le dí en su mejilla anteriormente. Pensé rápido en una respuesta.

-Q-quería desviar tu mente de cualquier cosa que estuvieras pensando en ese momento... - Fue lo único que pude responder. Y la verdad, no había metido.

En el rostro de Smokescreen apareció una sonrisa de lado, características de él.

-Claaro, y yo soy discípulo de Unicron-. Me dijo.

Juro que por mi mente pasó la idea de golpearle fuerte en su costado, pero sonaba muy infantil y eliminé el pensamiento. Observé a los demás.

-Es... hora de partir-. Le dije un tanto nerviosa, no volteé a observarlo, solo me dirigí junto a los Bots y me transformé en el Chevrolet Corvette, mi modo alterno, al mismo tiempo me coloqué el Anti-rastreador. Todos los demás hicieron lo mismo.

-Bien Mademoon, guíanos-. Me dijo Optimus Prime mediante el comunicador. Observé por medio de mi retrovisor cómo Smokescreen se acercó hasta posicionarse justo detrás de mí. Aquello me puso aún más nerviosa.

Comencé a acelerar, guiando a todos los Autobots hasta la carretera que nos llevaría directamente hacia nuestro verdadero refugio, evitando al tiempo ser rastreados por el artefacto que, gracias a Primus, aún se hallaba entre lo que aún quedaba de mi anterior base. Aquello nos ayudaría a llegar sanos y salvos hasta nuestro destino...

Transformers: MademoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora