Capítulo 12

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-¿Mady?- La voz del militar me sacó de mis pensamientos.

-Chris... -Dudé en decirle mi ubicación, pero, como dije anteriormente... no había marcha atrás- Estoy en la Antártida, he encontrado a los Autobots y ... Los he activado, necesito que... por favor me ayudes a llevarlos a mi país-. Quise hacerle pensar que confiaba del todo en él, aunque la realidad era otra.

Un silencio al otro lado de la «línea» , luego de mis palabras, se hizo presente, un silencio que duró apenas segundos, pero que me asustó tanto que llegué a pensar en cortar la comunicación y decirle a los Bots presentes que huyéramos de nuestra posición. Pero, mi pensamiento fue desechado en parte cuando Chris respondió.

-Enseguida envío una nave, una lo suficientemente espaciosa para Autobots como ellos.

Sabía que el militar tenía conocimiento de cuántos Autobots estaban aquí, pero lo que puedo asegurar él no sabía, era que yo ahora era una de ellos.

-Necesito cortar la comunicación, dame tus coordenadas y llegaré lo más pronto posible con la nave y varios de mis hombres-. Continuó.

-De acuerdo, las coordenadas son las siguientes...- Le envié las coordenadas, y, por seguridad, lo hice con una combinación de varios códigos existentes. Las coordenadas lo llevarían a un lugar cercano de la cueva donde estaban ahora los demás Autobots, aunque desde el lugar donde llegaría, no se podía avistar del todo la cueva, ni mucho menos a sus «inquilinos».

-Manténgase en esa posición, estaremos dentro de poco en el lugar -. Dijo, finalizando la comunicación.

Tengo que admitir que sentí un gran miedo recorriendo mi cuerpo, no confiaba del todo en Chris, ya muchas cosas habían sucedido confiando en él, y los Autobots en la Antártida era una de ellas.

-...Bien, vienen en poco tiempo, les indiqué un lugar cercano a la cueva-. Le dije a nuestro líder.

-Enterado- me respondió-. Es hora de volver.

Asentí. Ratchet comenzó a caminar hacia nuestro destino, yo le seguí; Smokescreen iba detrás de mí y por último, siguiéndonos, estaba nuestro líder. No puedo evitar decir que, en persona, se puede sentir y observar el gran liderazgo que posee Optimus, es algo que no se puede expresar en los documentos secretos que poseo, allí no se describe con exactitud. Optimus es el tipo de líder que preferiría morir antes de perder a alguno de sus soldados, cuida de las espaldas de todos, es un gran amigo y muy confiable, nunca, ni siquiera pasaría por su procesador, traicionar a alguien. Pero, supongo que es innecesario describirlo.

Nos encontrábamos a medio camino ya, el suelo estaba congelado, el mismo camino que usé para transportar a los Autobots hasta la gran cueva, resbaladizo. No comprendí por qué los Bots no se resbalaban, tal vez estaban acostumbrados, o usaban un mecanismo que los mantenía de pie en superficies resbaladizas, pero yo me resbalaba cada cierto tiempo, odiaba eso. De pronto, di un paso en falso y resbalé; por suerte, Smokescreen estaba aún detrás de mí y antes de tocar el hielo con mi cuerpo entero, él me sostuvo, evitando la fuerte caída. Mi Spark latía con rapidez, había sido grande el miedo que tuve al resbalar debido a que pensé iba a romper el hielo y todos caeríamos a la fría agua. Gracias a Smokescreen, no sucedió.

-¿Estás bien, Mady?- Me preguntó preocupado.

-S-si-. Le respondí.

Optimus se acercó, preguntándome si me había lastimado, le respondí negativamente, estaba bien. Agradecí su interés por mi bienestar.

Continuamos nuestro camino, y en poco tiempo avistamos la cueva. Caminamos unos minutos más hasta llegar a ella, nuestro organismo nos avisó que era inminente la llegada de la congelación. Por suerte, la fogata aún seguía encendida, avivado al parecer, por los Bots que ahí se encontraban. Nos acercamos a ella para tomar algo de calor.

En menos de media hora, Ultra Magnus pudo observar una nave llegando al lugar, aún no aterrizaba. Yo sabía que Chris había llegado e iba a aterrizar en las coordenadas dadas, me preocupaba lo que pensara ante no observar a ningún Autobot presente en aquella ubicación, y por ello, decidí salir de la cueva, pero antes de seguir hasta la nave, Smokescreen me detuvo.

-Mady, ¿estás segura?

-... Debo sacarlos de aquí.

-Eso no me convence.

-Smokescreen, por favor... trato de ayudarlos... y...

-Lo sé... Está bien, confiaré en ti, de todas maneras, si llega a suceder algo no podrás evitar que te defienda.

-No lo evitaré-. Sonreí.

-Y algo más... detenme si notas que estoy a punto de atacar a ese militar, estoy seguro que al ver su presencia explotaré.

-Jeje, te detendré si veo alguna señal en tu rostro, calma. Ahora, debemos irnos.

Todos los Autobots se reunieron junto a mi, faltando Bumblebee, quien luego de apagar la fogata, se nos unió. Era hora de irnos, comenzamos a avanzar hasta la gran nave...

Transformers: MademoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora