"El Mundo es un Pañuelo"

Confesiones I

Pueden escuchar la canción cuando quieran, pero yo recomiendo en el Flashback.

SAM'S POV
— buenos días solecito...— dije despertando a Felipe con un beso en la barbilla.

Él pasó un brazo por detrás mío y me abrazó.— buenos días linda—. Me sonrió y me dio un beso en la frente.— ¿sabes? Debimos haber cerrado el blackout... El sol me está matando.

— ¿qué hora es?— pregunté mientras me desperezaba.

— van a ser las once.

— vaya, que es temprano. Cam ya debe estar despierta.

— claro, súper— dijo alargando la palabra— temprano. ¿Quieres que vaya a desayunar así o me das mi camisa?

— no creo que a Cam le importe ver tu torso desnudo.

— pues a mí sí me importa.

— que lastima—. Me levanté de la cama y él se levantó casi al mismo tiempo para salir a corretearme. Salí corriendo por el corredor y llegue hasta el estudio. Al final me agarró por la espalda y me tiro al sofá. Le sonreí y lo besé.
En esas una puerta se abrió. Luego salió Cam del cuarto de Jane con el pelo mojado. Ambos nos reincorporamos y le sonreímos.

— espero que no te moleste Sam, pero tomé una ducha en el baño de Jane.

— está bien, ¿les parece si vamos a desayunar?— ambos asintieron y nos dirigimos a la cocina. Mientras yo cocinaba Cam y Felipe hablaban alegremente.

— en verdad, gracias por dejarme quedar anoche aquí.

— el placer fue todo nuestro— le dijo Felipe.

— bueno, bon appétit— dije poniendo frente a ellos un plato con huevos, jamón, y tostadas.

— ¿dónde está mi tocino mujer?— preguntó Felipe demandante en forma de juego.

— a Cam no le gusta, y no me iba a poner a cocinar tocino solo para ti. Así que se comen esto.

Me senté junto a Felipe dejándolo en el centro entre Cam y yo.

Cam se quedo un segundo en silencio, me miró de arriba a abajo, luego se aclaró la garganta y dijo— Sam, no crees que estás un poco ¿descubierta?— dijo señalando a mis piernas desnudas.

— no es como si estuviera "totalmente" desnuda.

— pues a mí no me molestaría— dijo Felipe a lo que le pegué un codazo en el estómago.

Soltó el aire y se quejó— ya me dolían bastante las piernas, ahora también el abdomen, gracias Sam.

Cam y yo nos miramos y estallamos en risa.— ¿por... Por eso caminabas tan raro?— preguntó Cam sin aire por la risa.

Felipe se sonrojó y acertó con la cabeza.— Al veces— reí— se me olvida que eras...— Cam y yo volvimos a reír— que eras virgen.

— ¿a...a ti, no te duele?— pregunta él rojo como un tomate.

Yo respiré hondo aguantando la risa.— Si, pero no tanto. Yo no era virgen.

— ¿entonces por qué te duele?— preguntó Cam.

— porque hace años— dije alzando más la voz— no me acuesto con nadie.

— entonces eso cuenta como si fueras virgen de nuevo— dijo Felipe un poco menos rojo.

Volví a reír— no—. Me sequé una lágrima y me levanté— me voy a duchar—. Felipe se paró justo después de mí.— ¡sola!

Felipe se volvió a sentar— ¿Sam, Cam, pueden no decirle esto a Alex?