"El Mundo es un Pañuelo"

Rompieron

SAM'S POV
Cuando la persona con la que estás acostumbrada a llorar en su hombro te hace llorar, ya no sabes qué hacer.
Es algo que no le deseo a nadie.
Y agradezco al cielo que Felipe no haya sido esa persona, sino Alex, su hermana, la persona que me está abrazando en este momento. Y Cam. Y todas mis amigas.

Coloqué los brazos al rededor y le devolví el abrazo. Luego me separé y le di una sonrisa— Larguémonos de aquí.

Cam's POV
Iba caminando mientras buscaba a Scott quién se me había perdido entre la multitud, y mientras buscaba pasé cerca a la Mesa donde estaba sentada la gente con la que vino Sam. Pretendí no conocerlos cuando una mano me agarró de la muñeca y me sentó en su regazo.

— ¿Puedes soltarme Víctor, por favor?— pregunté molesta. Él sonrió y me acercó aún más a él.

— Ya Cam, no finjas que te molesta.

— Es que no finjo, Víctor suéltame— traté de decir calmada para no armar un escándalo.

— Solo un rato, va a ser divertido— dijo acercándome a su boca.

— Que estas ebrio, ¡ya suéltame!— dije tratando de golpearlo, pero él era más fuerte que yo y no soltó su agarre. Iba a empezar a gritar cuando un puño le dio en toda la boca a Víctor, y este como reacción me soltó. Me levanté de un brinco antes de que otra cosa pudiera suceder, y me volteé para ver a la persona que me había salvado.
Cuando vi a Scott ahí no pude evitar sonreír.

Víctor se iba levantando mientras se limpiaba la poca sangre que había salido de su labio partido.— ¿¡Qué te pasa!? ¿¡Estás demente!?

— Sabía que eras idiota, pero no esperaba que fueras tan lento. ¡Mantente alejado de ella!— respondió Scott enojado, luego me tomó de la muñeca y me arrastró entre la multitud hasta un cuartito de aseo.

— ¡Ay Scott, me duele!— le dije soltándome de su agarre, era la misma muñeca que Víctor había tomado. Él me soltó y se volvió mirando a la pared detrás de él.— Gracias, por salvarme, no sabría que había hecho—. Esperé respuesta pero al no llegar pregunté:— ¿Scott?

Él se volteó a mirarme, rojo de ira.— Cam— su tono era serio y molesto— ¿tú de verdad me quieres?

— ¿Cómo qué si te quiero? Por supuesto que si.

— Entonces, ¿por qué dejas que él te hago todo eso? Y no me digas que es la primera vez, porque sé que ha pasado más veces.

— ¿de qué hablas? Scott, no es mi culpa lo que él haga.

— No, pero podrías defenderte.

— ¡Lo intenté! ¡tú me viste!

— No fue lo suficiente.

— Scott, ¿qué estás tratando de decirme?

Él tomó aire por unos segundos y levantó la vista para mirarme directamente a los ojos.— Quiero terminar contigo.

Fue como un vaso de agua fría en el cuerpo— ¿qué?

— Si Cam, yo necesito estar con alguien de quien esté seguro que es mía y solo mía.

Sentí como las lágrimas salían de mis ojos, y lentamente se resbalaban por mis mejillas, mire al suelo para que no las pudiera notar, pero una se deslizó y cayó al suelo.— ¿Entonces todo lo que dijiste hace unas horas, fue mentira?— le pregunté levantando la vista.

Su rostro se llenó de sorpresa ante mi pregunta— no— susurró. Luego se acercó y me besó en la mejilla— lo siento Cam—. Dijo y salió por la puerta dejándome sola.