"El Mundo es un Pañuelo"

¿segundas oportunidades?

SAM'S POV
No se si fue buena idea lo que hice, digo, en parte no fue su culpa. Pudo haber hecho algo, pero no lo hizo, ¡pero pudo!
Me dirigí a las escaleras eléctricas para bajar al sótano e ir por mi auto. No quedaba mucho para llegar, pero mientras bajaba uno de mis pies se atascó en la escalera y perdí el equilibrio.

Aquí murió Samantha Anderson.

Bueno, o al menos eso pensé. Para mi suerte, alguien me había atrapado.

- mi Dios, ¿Sam estás bien?- preguntó la persona, al parecer masculina, que me habia atrapado.

Me volteé para ver quien era y por qué me conocía. Mi sorpresa no pudo ser más grande- ¿Ga..Gabriel?

Alex's POV.

- ¿Así que salió corriendo?

- Ya te dije que si Alexa-. Respondió Felipe enojado.

- No entiendo.

- Ni yo-. Me apoyó Savannah.

Estábamos en la cocina sentados en una mesa que solo utilizaba mamá.

- Salió corriendo y...-,se pasó las manos por el cabello nervioso.- ¿Qué tal si todo termina?

- Cálmate-. Le levanté la cara para que me mirara.- Sam es un chica, las chicas no siempre lo quieren todo, pero si tienen un novio no esperan ser un cero a la izquierda.

- No es un cero a...

- ¡Demuéstraselo!

Annah lo levantó de su asiento.- Se hombre.

- No es mi culpa ser tan guapo.

Annah lo cacheteo.

- ¡Auch!

- ¡SE HOMBRE!

- okay... Okay-. Se acarició la mejilla.- ¿Qué hago?

- Invítala al cine-. Propuso Annah.

- No. Ella no es así-. Intervine.

- ¿Cómo puedo lograr que este feliz?

- Cómprale un libro. Pero no solo el libro. Tráela a casa a las... nueve. Savannah y yo arreglaremos todo, no habrá nadie.

- No creo que eso sea...

- Calla. No van a ir a ninguna habitación. Les arreglaremos algo afuera en el jardín.

- Okay...- sonreí mirando a Savannah.

SAM'S POV.

Terminé de cenar y subí a mi habitación. Me recosté en mi cama y tomé mi móvil para jugar un rato.

Mientras jugaba sonaron unos golpecitos en la puerta.

Me levanté a abrir y allí estaba Felipe.

- Sam... yo.

- No digas nada. Vete-. Me dolía verlo.

-Me quiero disculpar-. Me tendió una bolsa cuadrada con el tamaño para ser un libro.

La aparté y se la devolví.- No.

- Pero... ¿quieres cenar?

- Ya cené. Y quede con alguien más.

Cerré la puerta y volví a mi móvil.

Escuche los pasos de Felipe irse y un auto llegar.

Felipe's POV.

El auto se estacionó. Era un deportivo rojo. Auto de niño rico.

Sam se asomó a la puerta mirándome con odio. Cuando el propietario del auto bajo Sam lo saludo con un gentil abrazo que yo hubiese querido recibir. Pero era Gabriel el que lo estaba recibiendo.

Tiré la bolsa con el libro dentro de un bote de basura y me fui de allí.

No iba a volver a casa con Alexa y Savannah cuestionando todo lo que paso.

Me fui caminando hacia unos pequeños lagos que habían dentro de los conjuntos. Me senté en el suelo y comencé a tirar rocas pequeñas al agua para ver como se hundian y jamás volvían a salir.

- Niño bonito con mal de amores.

La voz menos indicada para escuchar en este momento.

- Adiós Marina.

- No me despidas si no me has saludado-. Se sentó a mi lado.

- ¿Cómo es que aun recuerdas dónde vivo?

Posó su mano en mi muslo y aparté la pierna.-¿es en serio? Ella no esta aquí. Deja de fingir que te molesta- colocó su mano suavemente denuevo sobre mi muslo.- No olvidaría este lugar nunca... Donde veniamos a besarnos y jugabas con tus manos curiosas a esculcar bajo mi falda.

- Marina...

- Calla-. Su otra mano me halo de la camisa y junto sus labios con los mios. Sus labios creaban una curiosidad que me hacia querer más... más de Sam.

La empujé y me fui de allí escuchando como Marina maldecía a Sam y a todo lo que quiero.

Atentamente Alex y Sam