2 (EDITADO)

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3 de la madrugada, Lenay de levanto de su cama, tallo sus ojos y bostezo. Ella ya quería sufrir, solo quería vivir en paz. Ella tomó la decisión de irse de la casa, preferiría vivir en la calle y sobrevivir por su cuenta pidiendo dinero a personas desconocidas a que estar viviendo con sus padres, al fin y al cabo siempre le decían que se vaya de la casa. Lo irían a buscar, de eso estaba segura. Agarro dos pequeñas maletas y empezó a meter todo lo que tenía ahí. No sin olvidar su pez dorado. Su única compañía.

Salió de la habitación sin hacer ruido y se dirigió a la de sus padres, lo bueno es que ellos están profundamente dormidos y ni con un ruido de un trailer los despertaría. Busco la cartera de su padre y tomo el dinero que estaba ahí.

De nuevo sin hacer ruido, salió y se dirigió al suyo, para agarrar las maletas y su pez para después salir de la casa.
Respiró aliviada ya que jamás va a tener que volver a ese infierno, mucho menos a la escuela.

Recorrió las calles solitarias de Londres. Hasta visualizar un parque, camino ahí y se sentó en un banquito. Hasta que se quedo dormida.

(...)

- Nos volvemos a encontrar.- dijo Germán mientras apuntaba con la pistola a un tipo.- ¿Sabes? Ya nada ni nadie te va a poder salvar.

La chica a la que el tipo le estaba apuntando a la cabeza estaba llorando del miedo. Solo quería estar en paz.

- Pero ella es mía.- respondió aquel hombre.

- Varios años en la carcel, ¿te parece? Por violacion.- guardo la pistola.- Llévenselo.- agarraron al tipo y se lo llevaron. Germán camino a la chica y trató de calmarla cosa que logró.

- ya, está bien. Nadie te va a lastimar, ¿Si?.- se alejó de aquella mujer.- Ahora, ve y descansa un poco, ese tipo estará varios años en la carcel, no te preocupes.- me levante del suelo y ella imito mi acción.

- gracias...- fue lo único que dijo. Asentí con una sonrisa y salí de aquella casa.

Llego a casa, y cuando entro....

- ¡¡DIEGO!!.- exclamó al ver a su hermano en aquella escena y se volteó.- ¿¡Que haces!?.- exclamó.

- oh.... yo es...- Germán lo interrumpió

- solo... cámbiate, ¿quieres? Y lleva a esa chica a su casa.... esas escenas no están permitidas en esta casa... ¡¡TIENES LA TUYA!!.- se volteó y se relajó al ver a la pareja vestida nuevamente, miro su reloj y marcaban las 4 de la madrugada. Germán estaba realmente cansado.

- lo siento...

- si, si.... llévala su casa... ¿¡qué haces ahí parado como idiota!?

- oye ya... calma las carnes hermano...

- solo... agh...- sin más Germán corrió a su habitación, se puso algo más cómodo.

Apenas toco la cama y se quedó dormido completamente.

My little girl Donde viven las historias. Descúbrelo ahora