1 (EDITADO)

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Londres, Inglaterra:

Y ahí estaba Lenay en la calle pidiendo en la calle un poco de dinero y llevarlo a casa. Por qué si no lo hace se llevaría un golpe por parte de mi su padre y una amenaza de muerte por parte de su madre.

- señor... una monedita por favor....- el dueño del coche bajo sus ventanas. Lenay alzó a la vista. Un señor de cómo 30 años, venia en una camioneta con y por dentro estaba muy lujosa.

- anda, ten niña... toma esto y ve a casa...- sonrió.

- uh... gr-gracias señor...- agradecí y él sonrió de nuevo.

- oh vamos.- rió.- no soy tan viejo, solo tengo 30 años.- me analizó de arriba a abajo y mordió su labio inferior.- me llamo Henry.- extendió su mano. Iba a darle la mano pero la camioneta siguió su camino y me dejo con la mano ahí al igual que ese señor

Seguí haciendo mi trabajo. Pero...

¿Quién es Lenay? Bueno, es una chica de 16 años cumplidos chaparrita, ojos azules. Con un corazón de cristal. Dulce, tierna, y que con cada piropo que le hacían se sonrojaba. Jamás ha tenido novio, por lo tanto era virgen, y obviamente los hombres aprovechaban eso, pero su amiga siempre llegaba a tiempo de que otra cosa pase. Pero con gustos.... Peculiares, cuando estaba en casa, se ponía onesies de Hello Kitty, tenía unos cuantos de cebras y de gatitos, tenía algunos peluches y chupetes y biberones.

Le gusta que la mimen y le compren lo que ella pide. Desde que ella nació jamás la quisieron sus padres, sus papas le pegaban por qué hacía algo mal o a veces por diversión. Se la pasaba llorando consolada por su mejor amiga desde hace ya casi 4 años, ella es única y especial para Lenay.

Lenay cursa primero de preparatoria, le da miedo pisar la entrada, por qué sabía que la irían a molestar y abusar de ella. Mellisa siempre se mantenía su lado para que nada le pase.

Por qué con los mejor amigos/as de ella nadie se mete. Y si lo hacen, que se cuiden.
Pero, cuando ella faltaba a clases. Los tipos de ahí abusaban de eso, saben que soy frágil y me no me puedo defender al menos que Mellisa este ahí.

Pasando a la actualidad. Lenay se encontraba en la puerta de su casa, dudando de entrar o no. No tenía mucho dinero, solo tenía 200 dólares que es solo lo que pudo conseguir en todo el día. Qué pudo haber hecho ella para que sus padres la tratara de esa manera? Ella no lo entendía, pero si seguían así, sería mejor irme de la casa.
Todo su cuerpo estaba temblando, no de frío. De miedo. Dejó salir un suspiro y entero a la casa. Su madre estaba ahí, sentada en el sillón.

- al fin llegas.- dijo fríamente y levantándose del lugar.

- si... aquí está.- le entregue el dinero. Iba a subir a su habitación pero la mano de su madre la detuvo. En ese momento ya estaba sudando. No de nuevo.

- ¿doscientos dólares?.- preguntó con cierta furia en su cara.

- s-si.... y-o... es.. es... l-o... único que pude conseguir....- bajo la mirada.

- ¡¡Pues no es suficiente!!.- alzo la voz haciéndose y sintiéndose la más pequeña en ese momento. Lo único que sentio fue un gran golpe en su mejilla, tanto que se callo en el suelo. En es momento ella ya se encontraba llorando.

- ¡¡¡ERES UNA INÚTIL!!!! NADA PUEDES HACER BIEN!!.- gritó y la levanto del suelo para volver a tirarla con fuerza al suelo.- ¡¡Vete a tu habitación y no salgas de ahí!! estupida!.- sin que Lenay lo piense salió a su habitación. Eran las 4 de la tarde y el frío en Londres era intenso.

Llego a su cuerto y se lazo en su cama, lo único que podía hacer en ese momento era llorar y llorar. Tenía pensado en llamarle a Mellisa, pero ella se encontraba en otro país por sus padres.
- ¿Por qué?...- sollozó.- Que hice.- se levanto de la cama y buscó su pequeño chupete favorito, era la único que la mantenía tranquila. Se puso su onesie de de conejito y fue a su cama aún sollozando, pero era menos.
Se acostó y abrazo a su peluche y empezó a maldecir y pensó en lo que había hecho mal. En que había hecho ella para que sus padres la tratarán de esa manera.

(...)

Papeles y más papeles en todos lados. Un trabajo como criminalista no es tan fácil. Por todos lados habían crímenes que resolver, cansado, si. Pero eso para Germán no le importa. Ama ese trabajo. El dinero a él jamás le falta, basta y sobra. Cuando sus padres murieron le dejaron absolutamente toda su fortuna a él y a su hermano querido Diego. Tenía una mansión gigante, solo para dos personas, el y Diego.

¿Quién es Germán? Bueno, es un joven realmente guapo, de solo 26 años, decidió estudiar criminología, ya que su padre lo era y después de estar investigando esa carrera, le gusto. Y encontró una universidad aquí en Londres . totalmente soltero, está consiente de las mujeres tras el. Pero jamás le importó. El está bien así.
Germán es alto, mide aproximadamente 1.84, ojos cafés y con una sonrisa y risa hermosa. Tiene bueno cuerpo. Es bueno con la gente, le gustas ayudar. Donar algo de dinero a la gente que lo necesita.

My little girl Donde viven las historias. Descúbrelo ahora