¡Ámame Como Yo Te Amo! ¡3! - ¡Chica Mala Vs. Niña Buena!

1. Lenceria

-¿A qué universidad vas a ir?- Le pregunto mientras me acomodo en la parte trasera de la moto.

-No lo sé.- Me quita el casco y me da un largo beso, jugando con mi lengua y mordiendo mi labio. Me deja atontada y me besa la frente, agarra mis manos para que las coloque en su cintura.- Tengo algo mas importante en mente ahora mismo...- Noto como le tiemblan las manos.

¿Más importante? ¿Qué puede ser? Intento imaginármelo pero no saco nada en claro así que decido preguntarle.

-¿Y qué e...?

-¡¡Agárrate!!- Dice saliendo disparada del garaje, de la sorpresa subo mis manos para agarrarme mejor. Pero me paso y acabo subiendo mis manos hasta sus pechos. Rápidamente las bajo. ¡¡Qué vergüenza!! Apoyo la cabeza contra su espalda, puedo sentir como respira y como su corazón bombea. Entonces me da dos golpes en las manos. Oh no, lo va a hacer... Aprieto fuerte y Alessa sube la rueda delantera mientras acelera. La adrenalina se me dispara.

-¡¡Yeaaah!!- Grito nerviosa, asustada y emocionada por la experiencia. Noto como su corazón también bombea a un ritmo descontrolado y la pequeña risa que se forma en su garganta.

En la librería

-Podría enseñarte a utilizar la moto.

La miro fijamente, embelesada en sus ojos y completamente feliz por atraer todas las miradas del lugar. Alessa ha puesto su brazo sobre mis hombros y no pienso quitarlo de ahí. Nunca. Jamás.

Alessa no tarda en saber lo que quiero y como no recuerdo que es lo que me ha dicho me viene bien el beso que me da. Lento y con lengua. Cuando abro los ojos y veo que... Bueno él %90 por cierto de los hombres se han excitado. Y los demás no estaban mirando. Con un subidón de autoestima subo al piso de arriba, hacia la sección manga.

-Estoy pensando en coger uno yaoi, uno yuri y uno shoujo.

Suspiro. Si me agacho Alessa quitara su mano...

-¿Qué clase de manga son?- Frunce el ceño.

-¿No conoces el yaoi? ¿Ni el yuri? – Parpadeo varias veces. ¿En serio?

Se acerca a mi oído y susurra.

-Los he oído alguna vez pero a mí me va mas el hentai.- Del escalofrió se me cae el manga al suelo y Alessa lo recoge sonriendo.

-No juegas limpio...

-Nunca.- Me besa en la mejilla.- Pero te encanta.

Rápidamente miro si hay alguien mirando y como veo que no hay nadie le lamo discretamente bajo la barbilla. Un punto débil de Alessa. Ella se tensa por el escalofrió.

-Tú tampoco juegas limpio.

Sonrió.

-Pero te encanta. - Le digo desafiándola con la mirada. Ella se lame los labios y baja su mano hasta mi cadera, la presiona contra ella.

-¡Ajam, ajam!- Me tenso y me giro drásticamente para ver a Vero sonriendo.- No en público por favor.

Voy a hablar pero Alesaa de un rápido movimiento nos coloca a ambas detrás de una cortina, donde se supone que es el almacén de la librería. Me atrae hacia ella y yo le rodeo el cuello. Me coloca contra la pared. Alguien abre la puerta, podría ser alguien de la tienda pero realmente no me importa. Alessa me está besando, es más, su lengua está haciéndome gemir.

-Es privado.- Dice Alessa sin mirar a Vero.

-Vale, lo pillo pero necesito ir con Sara. Y... ¡Por favor para! Una cosa es que me lo cuente y otra verlo.

Alessa deja de besarme y yo me hundo en la miseria.

-Sara ¡nos van a cerrar!- Dice Vero nerviosa. Su nerviosismo hace que me dé cuenta de la situación. Alessa y yo con la ropa revuelta y con una postura... Bueno... Sugerente. Rápidamente me separo y salimos del almacén. Alessa hace un puchero cuando me alejo.

-Vamos.- Digo agarrando la mano de Alessa. Es como si tuviera mono de ella, necesito que este tocándome en todo momento. Se ha vuelto mi adicción.

Nos reunimos con Dani, y nada más llegar Vero le planta un buen beso en los labios. Me mira y me saca la lengua. Yo sonrió y Alessa me abraza más.

En la entrada del centro comercial

No puedo dejar de sonreír, Alessa lleva más de diez minutos ronroneando como un gato mientras su nariz me acaricia el pelo. Sus brazos rodean mi cintura y se unen en mi estomago. Vero y yo queremos comprar ropa nueva así que hemos decidido venir al centro. Dani dice que Mark y Joshua van a venir para comprar juegos con él.

-No parece que les importe que lleguemos tarde.- Dice Dani. Levanto la vista, Alessa ríe en mi cabeza. A lo lejos veo a Mark contra la pared y a un Joshua muy feliz en los brazos de su hombre. Tienen las cabezas muy juntas pero sin tocarse, Mark se mueve rápido y muerde el labio de Joshua. Joshua no se queda corto y ataca a Mark también. No me doy cuenta de que estoy sonriendo hasta que miro a Vero, que sonríe también.

-¿Que pasa tíos?- Pregunta Dani rompiendo la atmosfera de Joshua y Mark, que se separan rápidamente. Vero y yo nos miramos y suspiramos. Estúpido Dani... Entonces me doy cuenta, Alessa no tiene las manos en mi estomago. Me giro radicalmente y se me cae el alma a los pies. No está. Ella no está.

-Relájate.- Dice Vero al notar mi nerviosismo. - Ha dicho que iba a mirar algo y que nos fuéramos adelantando.

-Yo... No me he dado cuenta...- Barro con la mirada el centro pero no la veo.

-¡Es perfecto! Vamos.- Dice Vero arrastrándome hasta la tienda de lencería.

-¿Que ocurre aquí?- Dice Joshua apareciendo de la nada. Cuando ve mi cara lo entiende todo. Una sonrisa le ilumina la cara.

Me siento incomoda en una tienda así, nunca antes había estado en una. Vero y Joshua me traen diferentes prendas y accesorios. Solamente pensar en ponérmelo hace que quiera huir de aquí. Pero por otra parte, si a Alessa le gustara... ¿Qué clase de cara pondría?

Entonces veo un sujetador y unas bragas de encaje negras, que se atan a las medias y con una fina capa que se ata como si fuera una chaqueta. Es del estilo de Alessa, completamente.

-Ese.- Le digo a Vero señalándolo.

-Bueno, yo voy a ir con Alessa.-Dice Joshua. - Os daré tiempo para elegir más cosas. ¡Y coge uno rojo! ¡Da buena suerte!- Grita mientras se va. Yo me sonrojo.