MI NAUFRAGIO DE AMOR

Pequeña Plática

Lapis se había ido, tuve que quedarme en la cueva detrás de la cascada. Sin provisiones, sin nada que me cubra...¡nada!

Sólo veía como caía el agua de la cascada. Y entonces mis momentos reflexivos regresaron ¿que pasaría si jasper estuviese aquí? Ella también es mucho de estar en ciudad y no creo que soporte un ambiente tan tranquilo como este.

Saqué mi cuaderno, mi lápiz y empecé a dibujar otra vez mi sueño lejano. Empecé dibujando otra vez el anillo de compromiso, después como me imaginaba mi vestido. Sería de falda amplia, corsé de cruce en la espalda y con zapatillas plateadas. ¿que pondría de centros de mesa en la fiesta? Quizá unos floreros con piedras preciosas en este. ¡sería genial! Se vería hermoso igual que lo demás pero no tanto como para superar como me vería yo.

-que es eso?-lazuli estaba a un lado mío. ¿cuando llegó?

Yo la ignoré, Así como ella me había ignorado.

-que es eso?- volvió a preguntar ahora señalando mi intento de dibujo del vestido.-¿para que es?

Yo no dije nada.

-¿por que estás enojada?

-oh quizá por que alguien me dejó sin decirme nada.

-Había algo raro rondando, fui asegurarme de que no fuera algo malo. Odio los cangrejos.

-¿eso que tiene que ver?

-son muy revoltosos. ¡Pero ya! Dime que es eso.

-es un vestido.-respondí cubriendo mis dibujos.

-¿un vestido? Para que se utiliza?

-para...vestir en ocasiones especiales .

-¿que  ocasión especial tienes?

-yo...por ahora ninguna.

-ninguna?

-ninguna!-dije apenada.-ahora dejame seguir dibujando.

-yo sólo utilizo ropa en ocasiones especiales también.

-en serio?-dije sarcástica aunque también un sonrojo se apoderó de mí ya que... en serio, no usaba si quiera algún corpiño que le cubriera.-no me había dado cuenta.

Lapis pasó por detrás mío y me dio un pequeño abrazo. Me quedé petrificada por un momento. Sus manos estaban tocando mis brazos, sus manos a pesar de que están mojadas son suaves y podía sentir la calidez de estas. Apoyó su mentón en mi hombro, aún trataba de ver que estaba dibujando.

-que haces?-volvió a preguntar.

-nada, ya te dije.-cerré mi libreta.-¿quieres dejarme en paz?

-te molesta?

-claro! Te estás metiendo en cosas que no son de tu incumbencia!

-quiero saber sobre tus costumbres humanas. Y esa libreta está llena de saberes humanos.

-no muchos.

-dejame ver!-estiro su mano para agarrar mi libreta pero se la retiré lo más que pude.-solo un poco.!

-no! Lazuli, no! Es sólo mi libreta y sólo yo puedo ver.

-en serio?

Me agarró de la muñeca y empezó a jalarme, pasé el cuaderno a mi otra mano pero aún así me seguía jalando.

-¡ya dejame lazuli!-le reclamé molesta.-no te voy a enseñar nada de este cuaderno.

-Segura?.-me tiró de espaldas y me quitó la libreta.

-es trampa!!

-claro que no, fue una pelea justa.

-mentira!-traté de recuperar mi cuaderno pero fue en vano.-¡damelo o si no, no te explico nada!

-hagamos un trato.-escondió el cuaderno detrás de ella.- te devuelvo tu cosa esta si tu me dejas en claro todo lo que tengo que saber de humanos.

-que?! No! Yo soy la que tiene miles de preguntas sobre las sirenas. ¡No me amenaces!

-ummmm...dejame pensarlo...-empezó a hojear la libreta.- Mira cuanto escrito. Que es esto? ¿que dice? Esto es raro. ¿son números?

-dame mi libreta!!-grité enfadada y traté de levantarme pero no lo logré, ella me lo impedía.- está bien! Te explico lo que quieras!

-si!-dijo emocionada y de inmediato me devolvió mi cuaderno dejándolo caer en mi cara.- anda ya!

-bien.-de mala gana me senté.-¿como que quieres que te explique.?

Todo el tiempo se fue en esa plática tan extraña. Era como platicar con una niña pequeña. Cosa que yo decía ella sacaba una pregunta. Era entretenido, debo admitir que era algo simpático hablar de la propia especie.

Lazuli me debatía demasiadas cosas, preguntaba luego por algunos asuntos difíciles de explicar y más cuando se trataba de cualquier relación entre humanos.

De mi libreta casi ni hablamos muchos temas, si acaso yo sacaba temas de ahí, como todos mis inventos planeados. Varios le sonaban raros y creo yo se burlaba de algunos.

Ella me preguntaba sobre varias cosas que escuchaba de tierra firme, pude notar que le gustan las historias fantásticas. Cosa que me daba risa, ya que a juzgar de lo que me decía, le encantan las historias que tenían que ver con princesas y hadas, increíblemente cree que son historias reales. Inocencia en su máximo esplendor, pero tampoco puedo desmentirla ya que... bueno, ella es una sirena y yo no puedo dudar que existan hadas. Pero con respecto a sus creencias sobre las tramas de las historias eran demasiado debatibles.

Pero la plática se tornó algo incómoda cuando...tocamos el tema de los "príncipes".

-es ridículo!-le dije.-¿¡como puede ser que sólo por un torpe que conocieron hace un día su vida mejora?!

-bueno. Puede ser, la vida suele ser así.

-claro que no! De por si, todas las princesillas andan de urgidas. El primer patán que se les cruza y se sienten perdidamente enamoradas. Además de ser unas interesadas, las que eran plebeyas se buscan un príncipe, cuanta casualidad. ¿¡por que nunca una princesa se enamora de otro príncipe?!

-por que ¿donde estaría el conflicto amoroso? La idea de una plebeya con un príncipe es ese, la trama y conflicto.

-existen diversos problemas en una pareja. Además de que siempre es príncipe, y las pocas princesas que existen ¡nunca se casan! Ahora todas suelen ser "independientes." No digo que esté mal pero se me es exagerado.

-¿tu sabes de alguna historia que trate de una princesa que se enamore de una chica?

-...no.- respondí dudosa.- ¿por que?

-nunca e escuchado de una historia así.

- será por que no es muy tomada en cuenta una historia así. Supongo que existe alguna pero no a de ser una historia popular.

-Por más que escuché historias sobre un príncipe y una princesa...me gustan más las historias que hablan de dos chicas que se enamoran.

Oh cielos...no estoy preparada para responder algo así.

Yeeeeeiiii ya llegué! Espero que les guste este apestosin capítulo ;P