Capitulo 6: Nueva Experiencia

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En realidad su casa es muy limpia, incluso me detuvo en la puerta y pidió que pusiera mis zapatos en un pequeño estante. Eso no es raro en Corea, lo sé, lo raro es que me haya dado una tuallita desinfectante y me haya hecho limpiarme las manos la cara y los pies con esta... ¿Una chica que le teme a los germenes? Incluso su aspecto es muy limpió.

-¿Te vas a quedar parada ahí todo el día?- me pregunto con su voz ronca. Me moví hacia adentro de la casa, donde ella me estaba esperando.

-Sientate.- me pidió que me sentara y lo hice. Me miro por un momento, me sentía un poco incomoda.

-Y bien, ¿Por donde debemos empezar?- la voltee a ver algo insegura.

-Pues... En realidad no se absolutamente nada de Francés.- en sus labios se dibujó una leve sonrisa, no quiero decirlo pero era sexy su forma de sonreír.

-Entonces debemos empezar por lo básico.- acerté con la cabeza y fue entonces que ella comenzó a hablar, ella era realmente buena, su forma de hablar con fluidez era tan buena que podía entenderla con facilidad, paso el tiempo hasta que llegó el momento en el que mi cabeza no podía retener más información.

-Estoy cansada.- Le resople colocando mi mano en mi frente.

-Uh... ¿De verdad?- ella me miro abriendo los ojos con sorpresa.

-Si, eres buena enseñando, pero una palabra más y mi cabeza va a explotar.- dije haciendo gestos.

-fille stupide.- ella lo estaba haciendo para burlarse de mi, mire hacia ella con mala cara.

-¡Eshh, dije que pararas, eres mala!- le dije fuertemente.

-Jajajajaja... Lo sé.- me miro lascivamente, mi cara cambio a una de incomodidad, la chica rubia en verdad tenía una mirada que mataba, ella estaba sentada enfrente mío, pude darme cuenta que mientras me miraba también se me acercaba... lentamente... Hasta el punto que estaba demasiado cerca de mí, me encogí de hombros y claro que me avergonzó mucho... Sentía mis mejillas ardiendo.

-Tu... si eres una chica dulce.- ella soltó una leve carcajada sin dejar de mirarme.

-Eh... Eh... Te agradecería que... No invadieras mi espacio.- ¿por qué? no sé, pero esta chica me ponía nerviosa de verdad.

-Oh, ¿te molesta?- ahora estaba siendo bruta, me estaba mirando y sonriendo a la vez.

-S...sí...me molesta...- trate de no hacer contactó visual.

-Vaya... (Suspiró) Eres de verdad muy linda.- de nuevo lo sentí, ¡Dios esta chica esta diciendo muchas tonterías!

-¿Qué...qué cosas estas diciendo?- ahora estoy tartamudeando. Esta chica me asusta.

-¿Dime, has tenido novio alguna vez?- no se por que me esta preguntando eso ahora.

-M...m...ah...si...si- trate de contestarle.

-¡No mientas!- frunció el ceño.

-No estoy mintiendo... Yo... Estaba enamorada de...alguien cuando... Cuando vivía en Filipinas...- ella rió de nuevo.

-Aigo... Estar enamorado no significa que hayas salido con alguien.- tiene razón, aunque aquel chico que me gustaba en preparatoria me trataba bien, lo cierto es que no conseguimos tener una relación formal.

-Aún no entiendo... ¿A qué vienen tantas preguntas tan de repente?- intento calmarme, tal vez ella se esta dando cuenta que me siento incomoda.

-Solo tengo curiosidad... mm... Y... ¿Has besado a una chica?- ¡OMG, no puedo creer que me este preguntando esto! Comencé a sentir mucho calor, ella me tomo por la barbilla y acercándose bruscamente pego sus labios a los míos... En realidad no estaba segura de como reaccionar, una extraña sensación inundo mi estomago y debo ser sincera, sentí una inesperada humedad entre mis piernas... ¿Qué pasa?.

No se detuvo ni un segundo, cuando menos me di cuenta ella había subido a la mesa, y de repente ya la tenía conmigo.

-Sabes... que la ultima ves que te vi... me interrumpiste un agradable momento.- susurro sin dejar de besarme. Yo me sentía shockeada, ella me tenía sujetada del rostro con ambas manos y yo permanecía rígida... hasta que creo que mi mente tuvo reacción, la empuje fuera de mi.

-¡¿Qué estas haciendo?!- la mire asustada.

-Tranquila... - ella estaba un poco sorprendida por mi reacción. Ambas nos quedamos calladas, y yo estaba intentando comprenderlo todo. Me sentía extraña e incomoda, darme cuenta de lo mojada que estaban mis bragas me hizo sentir aun más avergonzada, mire hacía abajo.

-¿Pasa algo?- ella se acerco de nuevo. Levante la mirada, ella me miraba aun como si estuviese tramando algo. - Vamos, no me mires así (Con su mano acaricio mi mejilla) no te haré daño.- eso ultimo que dijo me dio escalofríos. Me tomo por la cintura y me atrajo hacia ella, con movimientos torpes me moví, ella acerco su rostro al mio. -¿Podrías levantar tu rostro un poco?- me susurro cerca del oído. Extrañamente la obedecí, una amplia sonrisa lleno sus labios, mismos que una vez más me están besando, de algún modo imite sus movimientos, aún no sabía por que lo estaba haciendo, por inercia mis manos estaban buscando contacto con ella, pero inmediatamente ella me tomo por las muñecas. -No toques.- se detuvo en seco y me miro fijamente.

-¿Qué?- le pregunte extrañada.

-¿Eres virgen?- pregunto fríamente. Acerté con la cabeza. Ella se separo de mi y me observo un poco más, es extraña de verdad... no se si me da miedo o curiosidad. Me tomo de la muñeca y me jalo hacia su cuarto, una vez dentro cerro con seguro la puerta.

-Amm... creo ... qué, debería irme.- ella se giro a verme con cara de molestia.

-No creo que vayas a hacer eso.- sentí un escalofrío recorrer por toda mi espalda. ¿Pretendía violarme o algo parecido? De nuevo se acerco a mi dándome un beso seco y rápido.

-¿Qué...qué quieres decir con que no me iré?-

-Simplemente, no vas a querer irte.- ella me estaba desabotonando la camisa... tome sus manos.

-¿Qué haces?- la mire.

-Eshh... deja de estar tan tensa, ya te dije que no te haré daño.- quito mis manos y continuo lo que hacia.

-¡Para!- le aventé las manos. Ahora parecía enojada conmigo, es más, parecía como si fuese a matarme con la mirada. -Quiero... irme.- la empuje de nuevo con mi cuerpo, para hacerla a un lado y que me dejara pasar.

-¡Te dije que no lo harás!- me tomo del brazo.

-¡Suéltame!- mi reacción instantánea fue darle una bofetada. Ya me ha pasado antes que se han querido aprovechar de mí. CL se sobo el golpe, le había quedado marca.

-...Ah...- me miro en silencio, tenia una mala cara, se hizo para atrás y se sentó en una esquina de la cama.

-Yo... lo siento.- me sentí culpable de haberle lastimado. No me contesto, y eso me hizo sentir a un peor, me acerque a ella, quizá la había lastimado de verdad. -Oye... ¿Estas bien?- me agache hasta su altura para mirarla.

Levanto la vista y se notaba que estaba muy muy molesta.

-¡TU!- inesperadamente me sujeto y aventó hacía la cama, para quedar por encima mío y sujetarme de las muñecas.

-¡Ahhh, ayuda!- grite sorprendida.



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