Trajes negros. Almas en suspensión.

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Tocó el timbre, tenía la mente en otra parte. Sin embargo, algo me decía que hoy no sería un día donde las diosas me declararan que el amor estaba en mi mente. Parecía un infierno ver a Emily en la cafetería hablando con otras personas ni percatándose de mi existencia, ella, mi musa, mi vida y amor. Deseaba que cupido le disparara el amor que algún día sintió por mi, que no se perdiera en el paraíso de sus ojos. ¿Que más puedo decir? ella tenía la medicina que necesitaba, si dios la envió a mi vida fue para que se quedara, pero decidió irse....y yo...no podía creerlo.

Entré a mi última clase, y se me hizo larga por pensar tanto en Emily. Pero cuándo estoy mas concentrada alguien interrumpe mis pensamientos.

Hola?- dijo una niña colorina

Hola- respondí

Eres la niña nueva, un gusto- estiro su mano y yo se la respondí

Una de las niñas nuevas- reí- un gusto también- le sonreí

Hoy hay una junta que organizamos con el curso y algunos amigos ¿por que no vienes?- se inclinó en mi asiento- habrán personas de distintos grados y quizás otras escuelas - hizo una pausa- es para sociabilizar -rió

Lo pensaré- sonreí- gracias- dije mientras tocaba el timbre

Genial! te dejo mi numero- dijo animada

ok claro- le pasé mi celular y se anotó-¿Como te llamas?

Brooke- respondió con una gran sonrisa mientras se iba

Sonreí.

Nuevo mensaje:

Samantha: Sorpresa en casa.

Alice: ¿Por qué?

Samantha: Por ese ánimo.

Fin de conversación.

Tomé mi mochila y me dirigí a la puerta principal. Sin embargo, justo, otra vez allí estaba Emily en la puerta y no quería salir por allí.

Me armé de valor y camine hacía allí. Emily se percató de que caminaba hacía allá y se me acercó.

Alice, podemos hablar?- dijo mientras se paraba frente a mi 

¿De qué?- pregunté enojada

De lo que pasó, de todo- dijo mientras buscaba que la mirara

No sé que estás jugando Emily, un día dices que si y el otro que no. Que quede claro que no me rendiré, te seguiré buscando por que te amo y yo soy la que debe estar contigo- hice una pausa y me acerqué a ella- sabes que me amas y yo a ti ¿por que haces esto?- le dije acercando mi cara a la suya.

Miró hacía otra parte.

Si estás con él, si eso decides no puedo desearte más que suerte, por que felicidad con él no la encontrarás.- dije mientras dejaba que nuestros labios se acercaran cada vez más

Alice, yo...-dijo tímida- me tengo que ir

Sí, ahí veo a tu noviecito- dije al ver a Ellis buscandola por encima de su hombro.

Le roce con mi dedo índice desde el hombro hasta su mano.

Piensalo, nosotras somos felices- le dije para luego irme.

Se me partió el corazón hablarle así, sentía que se había acabado. 

Me subí a mi auto y manejé hasta casa. Cuando entré a la casa vi el living con comida, películas, mantas y Samantha...con esa gran sonrisa. 
Sonreí y deje mi mochila en el piso y me fui a sentar con ella.

La amistad se convierte en amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora