Robert seguía sentado en el sofá mientras yo caminaba en ropa interior por la casa. Él ni me miraba y yo apenas me percataba de su apariencia... Entonces, sonó el teléfono que está en casa. Corrí a contestar, pero él se adelantó.
—¿Diga?— Frunció los labios y me tendió el teléfono—Laura —Dijo sin mirarme. Asentí y tomé el teléfono.
—¿Laura?—Pregunté.
—Hola amor mío... ¿Cómo va el insti?— Enarqué una ceja.
—Como la mierda, odio historia— Dije entre risas. Robert bufó. Odiaba que fuera más sonriente con mi Madre que con él... La gran diferencia era que ella no me mostraba públicamente sus actos sexuales como él.
—Pues ya mejorarás... Te queda un año para salir de allí—Dijo entre risas.
—En verdad son unos meses—Suspiró.
—Me siento vieja cada vez que te llamo... Jodes mi juventud, tesoro—Enarqué una ceja.
—Tengo deberes que hacer, llama más tarde si no te importa—Dije con la boca llena de mentiras.
— Claro, cuidate. Un beso. Saludos a Robert—Fruncí los labios.
—Oh claro—Corté.
—¿Algo interesante?—Preguntó Robert.
—Saludos de su parte para ti.
— ¡Mosca muerta! ¡Que le den!—Sonreí.
—Sí, si... Y a ti también —Dije subiendo las escaleras.
Me vestí lo más rápido que pude para poder irme a Química. Estaba ansiosa por ver que nota había sacado de la prueba de hace dos semanas. Odiaba cuando los profesores entregaban muy tarde las notas... Como si lo hiciesen a sabiendas de que la espera estresa.
Me vestí con la camiseta de superman que me había regalado Robert el año pasado y con unos short de color gris. Automáticamente recordé el color de ojos de Bradd y no pude evitar sonreír.
Entonces, sonó mi móvil. Miré el nombre... ¿Por qué me llamaba? Dudé en atender. Pero al fin y al cabo, era mejor hacerlo. Tomé el móvil y lo puse junto a mi oreja.
—¿Qué quieres?—Escuché un suspiro del otro lado.
— ¡Hasta que me atiendes, Eli! Estaba preocupado... Yo... Anoche llamé a tu casa y tu Padre dijo que te habías perdido y que no estabas—Enarqué una ceja recordando lo de anoche y el estómago se me revolvió al recordar porque me marché con Bradd. Suspiré.
—Problemas en el paraiso—Dije con frialdad.
—¿Eli? ¿Podemos estar juntos hoy?—Negué con la cabeza pero luego me puse la mano en la frente recordando que él no podía verme.
—No, tengo que estudiar historia. El exámen es en dos días—Hubo un largo silencio.
— Podemos estudiar juntos—Volví a fruncir los labios.
— No, gracias— Dije con amabilidad.
—Sabes que tengo buenas calificasiones allí... Tal vez se te pegue algo de la historia ¿No?—¿Como mierda le decía que lo quería lejos? Suspiré.
—Fernando, entiende que te evito porque no quiero estar contigo ¿Cómo no lo vez? Por favor, déjame en paz—Corté el móvil y metí mis pies en las converse negras que tenía en el armario. Amarre mi cabello en una coleta y bajé las escaleras. Robert estaba atento mientras bajaba y se cruzó de brazos.
— ¿Has cambiado de novio tan pronto? Fernando me agradaba — Dijo con malicia.
—Nunca fue eso, Robert— Se encogió de hombros.
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Sin miedo a nada. [TERMINADA]
Teen FictionElizabeth es una chica normal de apenas unos 17 años de edad. Sus supuestos Padres estan mal de la cabeza. Ella no puede recordar más cosas que torturas y malos momentos que pasó con ellos. Tiene traumas que nadie puede cambiar en ella... Le cuesta...