-Alex, despierta-susurraron en mi oído.
Me revolví.
-cinco minutos más mami-dije adormilada.
Quien estuviera ahí se río.
-¡Alex, despierta!-gritaron, me desperté bruscamente y me caí al suelo.
Giré la cabeza lentamente para saber quien me había despertado. Lo mire con odio y le tiré lo primero que pillé.
-¡estas muerto Logan!-le grité.
-no por favor, soy demasiado guapo para morir-dijo tapándose la cara con las manos.
-¿por qué demonios me has despertado?-pregunté con el ceño fruncido.
-los chicos no están y me aburría-dijo sin importancia.
-¿y dónde están?
-no lo se-se encongió de hombros.
-pues dejame dormir-me volví a acostar.
Logan saltó encima de mi.
-pero es que me aburro-se quejó como un niño pequeño.
Gruñí.
-¡quitate de encima!-intente tirarlo al suelo, pero era imposible.
-me aburro-siguió quejándose.
-¡pues vete a hacer el desayuno!-le grité enfadada.
-porque tengo hambre, no porque tu me lo digas.
Sonreí ante su comentario. Genial, ahora ya no puedo conciliar el sueño. Maldito Logan.
Me levanté, eran las siete y media. Fui a ducharme. Cuando acabé me vestí y baje a desayunar. Los chicos no habían llegado. Un olor a quemado inundo mis fosas nasales. Entre rápidamente en la cocina, de la sartén salia humo.
-¿qué ha pasado?-me acerqué a la encimera, cogí la sartén y eché agua.
-estaba intentando hacer tortitas. Pero mejor lo dejo-dijo mirándome.
-ya hago yo el desayuno.
-gracias-me dio un abrazo y un beso en la mejilla y se fue.
Prepare mis deliciosas tostadas con nutella y fresas. Le entregue su plata a Logan, lo miró un segundo y lo dejó en la mesa. Me senté en el sofá mirándolo confusa.
-¿no tenias hambre?
-no me gusta la nutella ni las fresas-dijo, mirando con asco el plato.
Abrí mis ojos como platos, ¿a quién no le gusta la nutella?
-más para mi-cogí su plato y eche sus tostadas en el mío.
-¿y para mi no hay desayuno?-preguntó algo molesto.
-te lo preparas tu-le di un bocado a mi tostada.
Se levantó a regañadientes del sofá y se fue a la cocina. Los chicos todavía no habían llegado.
Logan salió de la cocina sonriente con un bol de cereales. A veces se comportaba como un autentico niño pequeño. Por eso era mi favorito.
Acabamos de desayunar y salimos fuera.
-nos vemos en clase-me despedí de él.
-espera, llevame a clase-pidió.
-no puedo, tengo que recoger a Sam.
-pero los chicos no me dejan coger los coches-se quejó.
-pues vete andando.
-me da pereza ir andando.
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Viviendo Con Los Miller
Ficção Adolescente¿como te sentirías si tus padres te enviaran a vivir con tu hermano y sus estúpidos amigos? Bueno yo soy Alex Walker y mis padres me enviaron a vivir con mi hermano y sus amigos. Tendré que vivir con seis mujeriegos, guapos, asquerosos e inmaduros...