Si Que Te Odio 《Finalizada》

CAPITULO XLV

[EDITADO]

Ethan.

Me desperté, de un salto cuando vi el rostro de Charlote muy cerca del mio, mirándome. Supe d inmediato que llevaba bastante rato despierta.

-- ehh, ¿por qué tan cerca?- me alejo un poco.
-- solo te miraba, te vez tan genial cuando duermes- se sienta acomodándose en la cama, mirando al frente.
-- pero no lo es tanto si tienes una cosa fea frente a ti al momento de abrir los ojos- bromeé.
-- ¿no me vas a preguntar como dormi?- arruga la frente-- ¡¿te despiertas solo para insultarme hijo de satanas!?- lo regañé.
-- supongo que con los ojos cerrados.
-- ahj no estoy tomándomelo con gracia- se cruza de brazos molesta.

Aun tengo sueño, recién despertando y ya comienza a armar un escándalo, como siempre lo hago, le daré la razón.

-- ¿como dormiste?- le pregunté.
-- uh dormi muy bien y calentita, eres tranquilo para dormir, crei que me patearias, destaparias o incluso tendrias esos sueños obscenos y comenzarias a manosearme.
-- ah- curvé una ceja, ¿me trata de pervertido, cuando le he hecho yo algo?

Me cambié de ropa en el vestidor, salí a ver quien estaba en la entrada para asi sacar a Charlote de mi dormitorio y no formar malos entendidos.

-- ya puedes salir.
-- gracias- corre a su puerta.
-- oye, después puedes acompañarme al centro para ir a pedir un seguro para puertas digital.
-- ¡¿me estas preguntando o estas dandome una orden?!
-- la que te parezca mejor.

Fui a tomar una ducha para despertarme mejor, aun estaba soñoliento, el corazón lo tenia agitado y me ardía la cara con solo pensar que estuve en el mismo dormitorio con Charlote, la misma cama y nuestros cuerpos juntos. Bajé en cuanto terminé.

-- ¿amor como dormiste?- encerio, ¿preguntó como dormí o uno de mis hermanos vió que metí a Charlote en mi cuarto y le contó?
-- bien- miro sospechosamente para todos lados.
-- ¿y Charlote? No ha ido a trotar- dijo en un tono preocupante.
-- aun esta en su dormitorio, se habrá quedado dormida- le respondi calmado.
-- o posiblemente quedó cansada- me miró Andrew con complicidad, en efecto nos vió entrar juntos, pero al menos no le dijo nada a mi madre.

Un manotazo en la nuca recibió Andrew por parte de mi hermano Claude, quien tomaba una taza de té muy calmado.

-- recuérdenme no traerlo mas, da mas problemas que mi hijo.
-- no se golpeen niños- regañó mi madre, bueno, Claude siempre me ayudaba en todo.
-- te lo recordaré- le respondi de inmediato.

Pronto bajo Charlote vestida tan natural y refrescante, usaba un vestido ligero celeste con flores blancas y rosa. Dios, casi babeo, pero puso una mirada fria y aterradora en cuanto Andrew la saludó y dió un paso hacia ella.

-- no te enojes preciosa, solo era confirmación- se encoge de hombros.
-- ¿puedes dejarla tranquila?- le susurré con molestia a mi hermano.
-- claro que me enojo idiota, anoche entraste en mi dorm...- Andrew voló hacia ella y le tapó la boca.
-- vale, ya entendi, no lo grites- le descubre la boca.

Una risa salió de mis labios en cuanto noté que Andrew habia perdido la partida y que Charlote lo tenia bajo su control, Claude me imitó, mostrando una amplia sonrisa y negó suavemente con la cabeza.

-- ¿asi que nunca pierde?- me mira.
-- si, se defiende muy bien.
-- le gustas Ethan- ¿y a que se debe el tema ahora? Claro que lo sé.
-- mm... no lo creo.- me atreví a decir para que sonara a sorpresa.

Una vez despidiéndose de mi madre, salimos al antejardín y yo me ofrecí a dejarlos hasta el centro, por supuesto, cada uno iba subido en el auto que correspondia.

-- me encantó conocerte Charlote- Claude le sonrió, poniendo su mano en la cabeza y doblando las rodillas hasta su altura.
-- de nada, tu me caes muy bien- le correspondió con un abrazo por el cuello.
-- me parece bien que aun hayan chicas que se defiendan frente a acosadores, me disculpo por Andrew, me fue tan gracioso ver como le dabas una paliza que intentar separarlos no pude.
-- ah... eso no volverá a pasar, Ethan se molestó mucho conmigo.
-- ¿todo lo haces por él?
-- si, es porque me gusta.
-- descuida, al final tú serás quien se quede con mi hermano.

Habia quedado fuera de la conversación por unos minutos, hasta que mi hermano se subió al auto y se marchó.

-- me cae bien tu hermano.
-- que bien, compartimos gustos.
-- ¿vamos a pedir el seguro digital?
-- claro, ven vamos.

Charlote.

Ethan hacia que se me moviera el suelo, que me palpitara desenfrenado el corazón, y hasta ahora es el único que me entiende, que me cuida y me apoya; por eso es que quiero cambiar.

-- Ethan, ¿puedes tomarme la mano?- le pregunté nerviosa.

El iba caminando delante de mi, de una forma inalcanzable, cuando me oyó, se detuvo y se volteó a mi con una mano extendida seguida de una perfecta sonrisa, yo no dudé en sostener esa enorme, suave y calida mano.