Círculo vicioso.

1.6K 135 24
                                    

Oí por ahí que el pasado era un reflejo del futuro, y que el futuro era la repetición del pasado.

Nunca llegué a creerme nada de eso. 'Supersticiones estúpidas' solía pensar.

Hace poco que llegué a creer en el dicho tan conocido.

Llegué a Anteiku a duras penas. Me dolía el estómago, y aún peor, había tenido que ir por zonas poco habitadas para esconderme de los humanos que todavía había por las calles.

Cuando llegué a la puerta, creo que me desplomé delante de Touka, porque lo siguiente que recuerdo es haberme despertado en mi habitación. Estaba sola, pero de pronto entraron Touka, Hinami y Kaneki los cuales me traían comida y café.

"¡Onee-chan!¡Onee-chan! ¡Hoy voy a salir con mamá!" Hinami gritaba emocionada sobre como en unos cuantos minutos ella saldría con su madre por los alrededores. Me sentía muy feliz por ella.

Kaneki también hablaba de su escritora favorita y de que iba a ir a una biblioteca para que ella le firmase su nuevo libro.

Mientras hablaba, me di cuenta de como Touka le miraba. De vez en cuando le observaba de reojo y sonreía un poco. Kaneki obviamente no se daba cuenta de nada.

¡Los hombres son muy simples!

Después de charlar un poco, Hinami y Kaneki decidieron irse. Me quedé sola con Touka, la cual me preparaba el café.

"Gracias" dije cogiendo la taza que ella me tendía. 

"Oye Leiko." Se sentó en un sofá de conejo que teníamos en la habitación, el que yo tanto odiaba. " Dime la verdad. ¿Qué te pasó ayer?" Me miraba seriamente, sus ojos advertían que si me advertían de que habría pelea si me atrevía a bromear sobre el asunto.

"Verás... ayer quería ir al gimnasio de Yomo, pero durante el camino ocurrió un incidente... unos miembros de Aogiri me pillaron... y parece ser que saben que soy Ōkami. Me escapé de ellos pero acabé en su base por accidente. Ahí me obligaron a luchar contra Yamori. De ahí vienen las heridas. Pero tranquila, ya estoy bien"

"Yo no creo que estés bien" sonó cortante, pero sobre todo harta. "No soporto a esos imbéciles. Me ponen enferma" me miró una vez más. "Leiko. Tú hiciste lo correcto. ¿Mencionaste algo sobre Anteiku?"

Touka tenía miedo. Lo presentía.  Tenía miedo más que nada de que matasen a su única familia.

"Claro que no, aunque siento que debería irme. Solo por si acaso. Y si eso visitar a menudo." Ella negó.

"En Anteiku, nuestra política es ayudar a los ghouls que más lo necesitan. Y ahora mismo, tú nos necesitas" ella me dirigió una sonrisa conmovedora, a la que yo respondí.

Después de un largo silencio, me atreví a preguntar la pregunta del millón. 

"¿Touka a ti te gusta Kaneki no?" Fui muy directa, como siempre. Ella me miró confundida, y al entender lo que le había dicho, su cara empezó a adquirir un color rojizo. Estaba sonrojada hasta a las orejas. Se tapó la cara con las manos y negó rotundamente.

"¡¿QUÉ DICES?! ¡NO! ¡NO!"

"Pero si estás roja"

"¡QUÉ NO!¡PESADA!" Touka salió a toda pastilla del cuarto dejándome sola.  Me reí levemente ante su reacción.  Nunca me imaginé que Touka Kirishima pudiese enamorarse. Y aún menos de un humano, bueno, un ghoul que solía ser humano.

Me tumbé en la cama. Suspiré rendida.  Ya me habían encontrado. Ya estaba muerta.

Me sentía llena de energía, lo cual me sorprendió ya que no había dormido bien en mucho tiempo. Me puse mi uniforme y fui abajo a continuar con mi trabajo. Era miércoles así que me tocaba trabajar con Touka hasta tarde.

Único en su clase (TOKYO GHOUL) {AYATO KIRISHIMA X TÚ}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora