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Un día después del vídeo.



Jungkook sonreía mientras veía como en la televisión solo se hablaba de de lo que había pasado en la carretera sur y del extraño payaso que había mandado un comunicado que había dejado a todos sudando frío.

"Que buen discurso di", pensó para si mismo.

Ahora comenzaría la verdadera diversión, eso era lo que Jungkook había estado esperando desde que había decidido emprender aquella peligrosa aventura. Las personas que habían desaparecido apenas eran el comienzo para la gran ola de asesinatos que el castaño tenía prevista. Solamente un loco era capaz de crear un grupo de sádicos con sed de sangre por mera diversión.

Y justamente eso había hecho Jungkook.

El castaño sufría de sociopatía por lo que no sentía ningún tipo de remordimiento, apego, emoción hacia nadie que no fuese el mismo. ¿Y como nadie se había dado cuenta de que el era capaz de las peores atrocidades?, pues porque Jungkook era peligrosamente inteligente.

Desde que era niño sus padres notaron lo extraño que era y decidieron llevarlo a ver un psicólogo el cual fue el encargado de entregarles su diagnostico. Apenas tenía seis años y ya era considerado como un enfermo. Jungkook tenía claro que algo malo había en el porque sus padres lo apartaban a causa de la vergüenza que les daba tener a un hijo con aquellas condiciones.

Ahí Jungkook comenzó a odiarlos.

Mientras que los niños de su edad dibujaban, jugaban con autos o simplemente interactuaban entre ellos, Jungkook se encerraba en su habitación a leer sobre psiquiatría para así conocer mucho más sobre su enfermedad llegando a ser un experto en la materia, gracias a eso pudo ocultar a la perfección los síntomas.

Aprendió a hablar con los infantes de su edad y a ocultar aquel temperamento explosivo con el que nació. A los 10 años Jungkook era considerado un niño sumamente normal, descartando así el diagnostico entregado por el psicólogo.

Pero nadie sabía lo que Jungkook hacía cuando iba al bosque.

Sus primeras victimas fueron bichos pequeños fáciles de atrapar, luego uno que otro gato de algún vecino y por ultimo algunos animales más grandes que merodeaban por ahí. Al castaño le gustaba desmembrarlos mientras aún su corazón latía y así escuchar los aullidos de dolor de parte de ellos. Al terminar se preocupaba de enterrar bien cada parte o al menos hacerlo parecer como el ataque de un oso.

No fue sino hasta los 14 años que por primera vez mato a una persona, bueno a dos.

Aquel día Jungkook había cometido el error de cortar en pedazos a el cobayo que su padre le había regalado para su cumpleaños en su habitación por qué este no dejaba de mordisquear la jaula provocando un ruido que molestaba al castaño. Cuando lo tomo en sus manos y clavo el cuchillo rebanándolo pensó que estaba solo en la casa, hasta que su madre irrumpe diciendo que había salido el trabajo más temprano.

Cuando la señora Jeon vio a su hijo con el cadáver del pobre animal a un lado y su camiseta llena de sangre entro en pánico.

– Tu no estas bien –le dijo a Jungkook– te llevaré a una institución.

Y con eso firmó su sentencia de muerte.

Jungkook no estaba dispuesto a volver a medicarse, pensar en ver a otro odioso médico que no entendía su naturaleza le revolvía el estomago y ni hablar de dejar que lo encerrasen privándolo de su libertad.

Así que de forma tranquila se colocó unos guantes de plástico que tenía ocultos debajo de su cama más una sudadera que ocuparía solo esa vez. Tomó el cuchillo y lo guardo en el bolsillo derecho para comenzar a bajar la escalera.

Sr. Payaso ◆ Kookmin ; 국민Donde viven las historias. Descúbrelo ahora