Mili es una adolescente que se ve obligada a abandonar todo lo que conoce por una guerra iniciada hace siglos.
Las circunstancias la obligan a tomar decisiones de las que no está orgullosa. Tendrá que aprender rápido sobre un mundo que ella creyó e...
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Señores pasajeros, favor de apagar sus celulares, abrocharse el cinturón y subir las mesitas de los asientos; estamos por aterrizar.
El vuelo 317 con destino a Buenos Aires ha llegado con bien. Esperamos que su estadía haya sido agradable. Son las 6:46 pm en Argentina. El piloto y sus demás servidores agradecen su preferencia. Hasta la próxima.
Si Leo no me hubiera zarandeado, seguro me habría quedado dormida en el avión.
Abroche mi cinturón y traté de mantenerme despierta, pero la verdad es que había dormido casi nada.
Todos los recuerdos de hace unas horas se convertían en pesadillas.
Trato de despejar mi mente y prepararme para lo que venga.
—Mili, ayúdame con la maleta por favor —dijo mi hermano.
Bajamos del avión y salimos del aeropuerto.
Argentina es muy similar a la Ciudad de México. Sus calles, cómo fluye todo. Las personas...
Cuando llegamos deberían ser alrededor de las 7 de la noche en Argentina. Y ya estaba oscuro. El clima era mucho más cálido.
A comienzos de noviembre en la Ciudad de México, el frío estaba comenzando y es horrible, siempre nublado, haciendo frío y enfermedades por todas partes. Cuando salí del avión sentí un clima muy agradable. Debería haber alrededor de unos 20 grados.
Leo hizo una llamada. En menos de 5 minutos una camioneta negra apareció y mi hermano me ayudó a subir. Al principio dudé un poco si debía subir o no, pero Leo me sonrió.
—Tranquila Mili, son personas del reino, no te van a hacer daño.
Tomé entonces su mano y subí a la camioneta. Segundos después subió Leo y cerró la puerta.
Desde dentro no se veía tan misteriosa como lo hacía por fuera. Y el chofer y su acompañante no llevaban pasamontañas ni pistolas, mucho menos me dijeron "No se muevan ni hablen mucho o les va a ir mal". Todo lo contrario.
—Buenas noches princesa, ¿Cómo estuvo su vuelo?
Me quedé callada esperando que alguien contestara, hasta que Leo me dió un codazo leve en mi brazo y reaccione que esperaban mi saludo.
—Eh hola —me volví a callar. Seguramente esperaban una respuesta más elaborada.
—La princesa se encuentra cansada por el vuelo. Necesita dormir —intercedió mi hermano por mí.
Reaccione a la mentira de mi hermano y rápidamente puse cara de sueño y bostecé.
—Oh por supuesto —el sujeto que estaba al lado del chofer volteó comprensivamente. Vi a una persona como de unos 25 o 30 años. Tenía barba y su rostro se veía muy agradable —. Atrás hay un colchón inflable. No es mucho pero... Supongo que estará cómoda.