Capítulo 03

8K 699 149
                                    

El Mukami había tocado a su mujer, y aunque el no lo admitiera, le molestaba ese hecho.

Akira le pertenecía a Shu, y aquello se selló cuando el la hizo suya en la luna de miel, aunque aquella luna de miel sólo había durado una noche, ya que él no se había preocupado de buscar algún lugar lindo para pasar unos días. Sí, la luna de miel no había sido lo que Akira habría deseado, porque apenas hubo, pero en ese tiempo ella estaba conforme de estar junto a Shu, aunque aún le desagradaba la idea de haberse casado tan joven.

Durante las clases, Akira y Ruki estuvieron haciendo las tareas juntos, y leyendo juntos, la verdad es que su relación iba mejorando cada día que pasaba, a diferencia de su relación con Shu, que no mejoraba ni empeoraba, seguía igual que siempre.

- ¿Qué piensas hacer mañana? - preguntó el azabache a la pelirroja, un poco nervioso, puesto que esperaba que ella le dijese que nada, quería invitarla a algún lugar.

- Etto... - dijo la chica, intentando recordar si tenía algo que hacer, no había nada, la verdad es que ella se aburría bastante en la mansión, se dedicaba a pasear por los alrededores o leer algo - Nada.- respondió riendo - Aburrirme quizá.- bromeó, Ruki sonrió.

- Entonces... ¿te gustaría ir a algún lugar conmigo? - preguntó, el nerviosismo se hizo presente, pero Akira no lo notó.

- ¡Claro! - respondió la pelirroja sonriendo - Me encantaría.- el azabache sonrió satisfecho, había logrado pedirle salir después de mucho tiempo, antes había pensado en hacerlo, pero el hecho de ser rechazado lo asustaba.

- Entonces...

- Dime donde y a que hora.- interrumpió la pelirroja, Ruki rió y asintió.

(...)

Akira se encontraba dándose un baño, había quedado de ir a una cafetería con Ruki, y luego irían a un parque, ya era casi hora, así que salió de la tina, tomó una toalla y envolvió su cuerpo en ella. Salió del baño, cerró la puerta tras ella y se encontró con Laito, quien la miraba con lujuria.

- Bitch-chan ¿Estás intentando seducirme? - preguntó con su típico tono de voz.

- ¿Eh?¡Claro que no! - respondió la pelirroja enojada, odiaba encontrarse con Laito ya que era bastante difícil quitárselo de encima, era muy insistente.

- ¿Ah no? Nfu~ pues eso parece.- dijo acercándose, Akira retrocedía a medida que el pelirrojo se acercaba, hasta que su espalda chocó con la puerta - No hay escapatoria, Bitch-chan - Laito se acercó su cuello, pero no para intentar beber la sangre de la pelirroja. Comenzó a besar su cuello, puso su mano en la cintura de Akira, mientras que ella puso sus manos sobre el pecho de Laito para intentar alejarlo.

- Es inútil, no puedes contra mí.- dijo el pelirrojo susurrando en el oído de la chica - ¿Por qué no te dejas llevar? Yo te complaceré, a diferencia de Shu - susurró en el oído de Akira, quien en un momento de descuido de Laito lo empujo y caminó rápidamente hacia su dormitorio.

Laito no la siguió, se apoyó sobre la puerta y se quedó riendo.

Akira abrió la puerta de su dormitorio, su respiración estaba entrecortada, puso su mano en su pecho.

- ¿Qué te pasa? - escuchó que le preguntaban, era Shu, quien estaba acostado sobre la cama.

- N-nada.- respondió la chica, Shu no insistió y siguió durmiendo.

Akira buscó en el armario ropa para ponerse, estaba intentado decidirse entre dos vestidos, los dejó colgados y se puso la ropa interior, cuando ya la tenía puesta tomó ambos vestidos y caminó quedando frente al espejo, primero puso un vestido frente a ella, y luego el otro, finalmente se decidió por uno azul claro, que le llegaba un poco más arriba de la rodilla y se puso unas sandalias. Iba a salir de la habitación cuando fue interrumpida por la voz de Shu.

- ¿Vas a salir? - preguntó el rubio sin abrir los ojos, cosa que molestó a Akira pero no lo demostró, además, ¿desde cuando a él le importaba si ella salía o no? Le pareció extraño que él le preguntase eso.

- Sí.- respondió la chica, Shu se reincorporó y abrió los ojos, miró de pies a cabeza a Akira quien se sonrojó, era la primera vez que él la miraba así, ni siquiera el día de su boda él le había dado ese tipo de mirada, se sorprendió, aunque, obviamente no lo demostró.

- ¿A dónde vas? - preguntó el vampiro, la chica se extrañó ¿Acaso esto era un interrogatorio?

- A un café.- respondió Akira, a Shu le pareció extraño, puesto que en la mansión si había café.

- ¿Por qué ir por un café si aquí hay? - dijo preguntándole en un tono serio, sus ojos color zafiro la miraban inspeccionándola, ella no supo que responder, no le iba a mentir, pero tampoco quería decirle la verdad.

- Y-Yo... Estoy atrasada.- dijo abriendo la puerta, pero cuando estaba por irse sintió que la tomaban del brazo.

- ¿Atrasada? - preguntó el rubio, Akira ya se estaba cansando de ese tipo de preguntas, ¿porque no es más directo y le pregunta con quien irá?

- Sí, en media hora debo estar allí.- la pelirroja no supo de donde sacó fuerzas para responder de una manera fría, quizá en otro momento se habría lanzado a los brazos de Shu, como solía hacerlo, aunque el rubio no le respondía nunca los abrazos.

Shu se sorprendió ante la frialdad de la chica, ella jamás le había hablado así, fue como un balde de agua fría, se sintió incómodo, el hecho de que ella le respondiera así lo hizo tensarse.

- ¿Con quién saldrás? - preguntó el rubio, aunque no quería llegar a esa pregunta, no sabía cual era la razón por la que tenía esa sensación, pero estaba irritándose.

- Con Ruki.- respondió la chica soltándose del agarre del rubio.

Bajó las escaleras y salió de la mansión, Shu no quitó su mirada de ella, escucharle decir que iba a salir con Ruki le molestó, sí, pero tampoco iba a asumirlo.

Aunque tenía ganas de romper todo lo que se encontrase a su paso.

_______________________

¿Es muy tarde para decir te amo?  (Shu Sakamaki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora